Decisiones, decisiones

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(LAURA POV)

Laura observa como Rita toma una profunda respiración. La conversación reciente con Ernesto es todo en lo que puede pensar. Pero este tema le afecta a ella personalmente. Les afecta a ellas, a las cuatro. Y es consciente de que Rita lleva cargando con esto más tiempo del que le gustaría reconocer. Ella la acaricia y le da palabras de consuelo, instándole a hablar, pero Rita no parece arrancarse. Solo llora, y llora, y llora con más fuerza.

Al rato parece calmarse, sus respiraciones se vuelven más lentas y las lágrimas parecen ir cesando. 13 minutos es récord. Rita sigue quedándose corta. Se ve que todavía ha habido gente más desgraciada que ellas. Laura insiste a su amiga, con palabras dulces. Y Rita, por fin, arranca a hablar. 

—No sé ni por dónde empezar, Laurita...esto es muy duro

Aunque su voz tiembla, Laura no cesa de acariciar a Rita e instarla a que saque todo eso que lleva dentro, que se va a quedar mejor en cuanto saque todo eso que lleva encima. Palabras que, por otro lado, le hubiera encantado que le hubieran dicho a ella.

—Lo diré...Creo que estoy...estoy...estoy bastante segura de que...bueno...eso...tú ya lo sabes.

—¿El qué, Marga? Necesitas decirlo. Sácalo.—La mirada de Laura, profunda, no se aparta de los ojos de su amiga, todavía brillantes.

—Pues eso mismo. Que ya sabes qué me pasa.

—Dilo, anda. Aquí solo estoy yo.—Ambas miran a su alrededor, comprobando que es verdad. No hay nadie más allí para escucharlo. Nadie con quien desdecirse.

—Pues que estoy enamorada de Sara.—Rita lo dice de golpe, muy rápido, atropelladamente. Casi sin respirar. Como si decirlo fuera peor que un pecado.— Creo que  siempre lo he estado. Sara es... es increíble. Tiene una vitalidad contagiosa. Es puro nervio, puras ganas, es emoción en carne viva. Ya puedes estar como estés que ella sabe siempre cómo arrancarte una sonrisa, como pulsar ese botón de tu cabeza que te hace desconectar, dejar de pensar en todo y nada. Es la persona más increíble que conozco. Tan fuerte, tan valiente...Tan intensa, también, pero siempre está ahí para defendernos con uñas y dientes. Incluso a Ana, después de todo. Es tan apasionada que estar cerca de ella es apasionarte también. Ella es el centro del grupo. ¿Es una egocéntrica de manual? Sí. Pero es que ella es maincharacter, el pegamento del grupo. Sin ella podríamos seguir siendo nosotras pero no seríamos nosotras.

Laura acarició a su amiga en la cabeza, con cuidado, animándola a que siguiera. Lo cierto es que hasta ahí estaba de acuerdo en todo lo que había dicho.

—No siempre fui consciente pero siempre fui consciente. Desde que empecé en el bar, siempre la veía y pensaba en lo alegre que era siempre, lo simpática, lo guapa, lo divertida...Esas cosas que podría decir cualquiera. Era preciosa. Y siempre tan atrevida vistiendo...le daba igual. Sus modelitos imposibles, su piercing al aire...ya de aquellas, perdón por esto, pero no veas cómo me ponía ese piercing—Laura se ríe.—Ya sé que no puedes entenderlo, Laurita. Lo sé. Pero si pudieses verla con mis ojos...En fin. Que eso. Un día estaba yo en el bar, que estaba atope, era un festivo, ya no sé si de noviembre o de octubre o de cuando. Pero era de esos días que no se trabaja al día siguiente pero sí al siguiente más. Y entre estudiantes y autóctonos estaba el bar...todo tías ¿eh? Como ya te imaginarás. Que no quiero pensar cómo debía estar...Bueno, el caso, que estaba a tope y yo estaba muy agobiada, porque encima habían operado a Tina, mi perra, y yo estaba pendiente de mi madre, que me iba diciendo cómo estaba. Y llegó un momento que no podía más. Y vino Sara, me vio la cara, me plantó un pico.—Laura arquea las cejas hacia arriba.—Que sí, que sí. Como te lo cuento. Vino y me plantó un pico. Es que yo estaba muy agobiada y aparte ya hacía rato que estábamos allí. Total, que Sara me plantó un pico y me dijo que me relajase. Que me fuese un rato a fumar un piti y ya volviese cuando estuviese más tranquila. Y que si eso no se pasaba ahí pues que me fuera, que ella me cubría como fuese.

Noche de enredos [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora