Only You

¿Por qué no puedo cambiar el pasado?

Sanzu Haruchiyo Pov

-Esto es una mierda.- Pensé para mi mismo mientras fruncí el ceño com frustración y botaba el cigarrillo al suelo para pisarlo, sentí un líquido tibio fluir por mis mejillas y desenfocar un poco mi vista. ¿Es esto lo que llaman llorar? Pensaba que ya nada podía afectarme tanto trás la muerte de ella, mi dulce ángel...cuánto la extraño, su sonrisa era calida como la luz del sol, sus ojos siempre tenían ese brillo especial por ser rojos y su cabello era largo, liso y rubio...casi dorado por ser golpeado siempre de la luz solar, su piel era pálida por lo poco que le daban de comer en casa.

-¿Por qué mierda sigo pensando en ella?- Me pregunté mientras apretaba la cabeza entre las manos como si eso fuera a quitarme aquellos recuerdos desde hace años pero ya tenían conquistado mi corazón. La amo, soy consciente de eso...pero...ella siempre tendrá 14 años. Como el jefe que tendrá 27 años. Odio esta sensación, ayer murio el jefe, lo vi botarse desde lo más alto del edificio de Bonten y entre sus brazos tenía ese niño llorón. "Odio esta sensación." pensé mientras me levantaba del sofá y limpiaba esas lágrimas que no había derramado hace años ya. Empecé a caminar por la sala con inquietud. No soy apto para ser el próximo jefe de Bonten, tampoco tengo motivos para seguir viviendo en este mundo, la única persona que seguía se ha ido para siempre y ya confesé todo a ese llorón. -"La salvaré, Sanzu. No te preocupes."- Eso fué lo que me dijo.

¿Como se supone que me deba fiar de él? ¿Como lo hará? ¿Por magia? No me importa y tampoco es de mi incumbencia pero una parte de mi se sintió cálida y más tranquila trás oír esas palabras, pero ese llorón también murió junto a Mikey...

Lo sabia, no hay no futuro ni esperanza para alguien como yo, no merezco ser feliz. Siempre pienso eso pero cada vez que me lo repito, termino lastimándome más. ¿Que haré ahora?

-Pronto estaremos juntos mi querido ángel..- suena patético decirlo, no soy alguien romántico y tampoco soy un tipo sentimental, pero hablo enserio cuando digo que daría TODO solo para volverla a ver una última vez...

Eso incluye también mi vida...

Mi cuerpo cayó al vacío ¿En qué momento tomé esta decision? Creo que dá igual...si no muero por esto me moriré por sobredosis, no puedo seguir cargando con esto por más tiempo.

Siento como el viento mueve mi cabello y la ropa, ¿Asi se siente caer al vacío? ¿La gente le tiene miedo a esto? Entonces...

¿Por qué yo solo pruebo felicidad?

-Mi reina...mi todo, estoy seguro que estarías decepcionada en lo que me he convertido al pasar de los años. Lo siento si he roto tu promesa, no pude vivir lo suficiente tal como pediste. No volví a disfrutar de los placeres que la vida nos trae, si es que alguna vez me los hizo probar trás tu partida, lo siento.- mi cuerpo toca el piso y no siento más nada, solo veo un charco de sangre alrededor de ello mientras mi vista se desenfoca segundo por segundo.

Te amo reina mía. Tal vez en otro universo pudimos ser felices juntos. Pero en este solo me conformaré en estar contigo en el más allá. Aunque...

Los demonios como yo no merecen ir al paraíso con ángeles como tú, mi reina. Mi primera y única reina siempre serás tú en todas las formas en las que te vas a presentar frente a mis ojos siempre vas a ser perfecta.

-Mierda...me duele el cuerpo..- me quejé aunque sabía que tal vez era normal trás la caída que había hecho, levanté la mirada y pude ver el cielo azul, las nubes blancas y el sol tan brillante como nunca. Mis ojos automáticamente se llenan de lágrimas aunque no sé porque. Siento una sensación cálida pero a la vez ya no siento mi cuerpo que responde a los movimientos que quisiera hacer.

Voy en camino mi ángel.

Abro los ojos pero esta vez la luz es más violenta y me obliga a cerrar un ojo por intentar mirar a través de ella. Hasta que... -Ven Haru, te he estado esperando. Subamos juntos.-

Ella me extiende la mano, yo la tomo con desconcierto. Miles de preguntas pasan por mi mente. ¿Mi ángel de verdad me está ayudando? A pesar de esa pregunta yo sonrío, sé que mi hogar es ella y estaré bien solo si ella está conmigo.

No quiero soltar su mano, no lo haré. Si volvemos a vivir me gustaría tener siempre un mínimo contacto contigo, ese es mi verdadero calmante. No las drogas. Eres tú mi más grande adicción.

Mi vida, mi cordura, todo depende de ti y no te amo por nada. Aiko, desde el momento en que te ví supe que eras para mi y no quería a nadie más que no fueras tu.

Seamos felices en otra vida, tengamos hijos, una familia, una casa y casemonos juntos tal como lo habíamos planeado.

Salgo las escaleras junto a ella y agarrándola de la mano, ella me mira con esa sonrisa de felicidad, inocencia y pureza que siempre me logra tranquilizar aunque sé que estoy muerto. -Estoy orgullosa de ti, Haru.-