Capítulo 21: La rosa...

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—Darien... —lo llame cuando lo vi cruzar la puerta, me puse mis zapatos y corrí para alcanzarlo, pero él ya había partido.

Ultimamente me había vuelto un tanto sensible a todo lo que tenía que ver con Darien, aun me quedaba el resentimiento de que no haya confiando en mi en lo que refería la salud de Sammy, pero también sabía que era injusta al tratarlo así, porque yo le había pedido distancia y el solo hacía lo que yo le pedia. Pero, ¡Rayooos! A veces quisiera que entendiera lo que realmente deseaba...

Quizá estaba siendo caprichosa, pero quería un Darien que no sólo me ame protegiendome, quería un Darien que confíe en mi, que me llevara al abismo de las emociones, que me discuta, me me conquiste, que me de la contra de vez en cuando... Quería que él también se valore más de lo que se valoraba a lado mío, quería que no se limite, quería que luche y persiga sus sueños y nunca después me reclame o salga a relucir que por mi no pudo terminar su especialidad en el extranjero.

Pero lo acepto, se me pasó la mano el día de hoy. Quizá era las emociones tan confusas que me producía tenerlo cerca de mi. El que Rocky se le pegue más me causaba celos, pero me molestaba que él se ponga celoso cuando tenía una nueva amiguita que a leguas estaba interesado en el.

El sábado me la pasé limpiando el departamento, no había abierto aún el regalo de Dereck. La angustia y la tristeza me invadia, había esperado que el me llamara, pero no lo hizo.. Intenté hacerlo yo también, pero apenas buscaba su nombre en la agenda del teléfono, me arrepentía. Extrañaba a Rocky, extrañaba a mis amigas, extrañaba a Darien. Me dormi en el sofá del departamento comiendo un bote de helado de fresa con jalea de chocolate como le gustaba a Darien.

Llegó el domingo y sentía más intensa la soledad.. Quizá debí decirle a Darien que el domingo podríamos salir juntos con Rocky al parque... Pero esas ideas solo quedan en quizás y sacudo mi cabeza con fuerza para ser más firme en mis propias decisiones.

Reviso mi celular y tengo varios mensajes de Dereck que ni he abierto desde ayer, pero de Darien ninguno. Me entra la desesperación de saber si todo bien con el... Y escribo...

S< ¿Todo bien con Rocky? Es que soñé con el >.

Envíe el mensaje y me llame mentirosa, no había soñado con Rocky, toda la noche soñé con él..

D< 👍>

Solo obtuve un emoji como respuesta, me molesto, ¿Por qué no podía decir si o no? ¡Que infantil era esto! Abrí la caja de regalo de Dereck, era un atrapasueño con un mensaje escrito a puño y letra por Dereck.

"Dicen que cuando uno llega a un nuevo hogar nunca debe faltar un atrapasueño para alejar cualquier energía negativa que traigas contigo. Espero que te guste. Deck."

Sonreí al verlo, era hermoso y de piezas delicadas, sin querer me habia robado una sonrisa en medio de esta agonizante soledad del fin de semana. Abrí mi teléfono y le respondí a sus mensajes.

S< Gracias, es lo más bello que me ha podido regalar un amigo. Me alegraste el día >

Así fue que él me llamó de inmediato y aunque dude en responder, lo hice y me pase una hora al teléfono platicando de cosas tan triviales como la vida.

Cerca de las 5pm, Mina, Ami, Lita y Rei llegaron a mi casa. Ya había tenido contacto con Mina y Lita, pero ahora se presentaba una oportunidad de limar asperezas sobretodo con Rei.

—Venimos a una tarde de chicas —dijo Mina mostrándome las bolsas con cosas para cocinar. Lita tenía un vino, Ami trajo algunos juegos y Reí con su cara de poca felicidad, un juego de cartas para leer la suerte.

Perfecta ImperfeccionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora