Mi Primer Amor// Got7

4° recuerdo

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— Debes estar bromeando.— Detuve mis pasos y respiré agitada. Aún me faltaban dos vueltas por la cancha.— ¿Por qué Mark Tuan?

—  Por que Jinyoung lo odia.— Jackson no respiraba con dificultad, casi ni sudaba, como si dar 50 vueltas por la cancha no fueran nada.

— Jinyoung no es esa clase de persona que va odiando a cualquiera, ¿porqué estas tan seguro?

El entrenador hizo sonar su silbato y ambos comenzamos a correr nuevamente.

— Le ganó en un ensayo de literatura, ambos están conmigo en esa clase, y lo peor que le pueden hacer a él es ganarle en una clase.

— No creo que... esa sea una razón suficiente como para odiarlo.

— Pero lo es, tú confía en mí.

Miré hacia las gradas, Mark ya estaba sentado ahí, ya había terminado de dar las 50 vueltas por la cancha.  Sus brazos estaban extendidos, se notaba que estaba cansado, él miraba hacia otro lado. Hasta que sus ojos se encontraron con los míos y sonrió guiñándome un ojo.

No esperaba que hiciera eso, no, más bien no esperaba que se diera cuenta que lo estaba observando. Mis pies se entorpecen y tropiezo, logré aferrarme al brazo de Jackson, pero solo conseguí llevarlo conmigo al suelo.

El entrenador gritó preguntando si ambos estábamos bien, Jackson río y le dijo que sí. Antes de que yo pudiera decir algo, una mano fue extendida hacia mí. Sabía que no era la de Jackson, y no quería levantar la mirada pero tenía que hacerlo.

Tomo la mano y miro a Mark aún con esa sonrisa en su rostro, pero ésta no era como la de hace un momento.

— ¿Sabes? Acabas de romper un nuevo récord, eres la primera chica que veo caer por una sonrisa mía, en menos de un minuto.

Solté su mano, me guardé las ganas de decirle algún insulto y comencé a sacudir mi uniforme.

— Tendrás que disculpar a mi amiga, es un poco torpe y tiene dos pies izquierdos.— Veo a Jackson y él tenía una sonrisa burlona.

Mark río suavemente, lo que me hizo mirarlo.— Sé que no tienes dos pies izquierdos, te he visto jugar antes y te mueves muy bien. Te puse nerviosa y caíste.

— Claro que no.— Que tipo tan arrogante, Jackson tomó mi brazo y me detuvo antes de que intentara marcharme.

— ¿Tienes algún premio para mi amiga por lo del récord?

Mark sonrío y mordió su labio inferior.— Claro, una cita, pasaré por ti a las 8.

Ni siquiera esperó a que yo respondiera algo, solo se marchó dejándome ahí con la palabra en la boca.

— Minsuk, enserio que eres rápida, mira que conseguir una cita con Tuan antes de que acabaran las clases, solo para conseguir un beso de Jinyoung.

— Jackson, esto no esta bien, no quiero una cita y mucho menos usarlo. Iré a hablar con él.

— No, esta es tu oportunidad para saber si le gustas o no a Jinyoung. No te preocupes por Tuan, ni siquiera notará que lo usarás como carnada.

Observo a Mark nuevamente sentado en las gradas, dos compañeras se habían sentado a su lado he intentaban llamar su atención, pero él me miraba a mí.

— No va a funcionar.— Comienzo a correr una vez más y Jackson me sigue.— Te diste cuenta de lo arrogante que es, no podría pasar más de media hora con alguien como él.

— Ok, ¿Tienes a alguien más en mente?

— No Jackson, no usaré a nadie.

— Bueno, entonces pregúntale directamente a Jinyoung si le gustas, por que eso de charlar con él atraves de su ventana no creo que te este dando frutos. Llevas intentando eso desde el año pasado.

Detengo mis pasos, mis ojos se humedecen pero me contengo.

Jackson me rodea con sus brazos y susurra.— Lo siento, no era mi intención lastimarte.

— Ambos sabemos que tienes razón... Ya veré como le hago, pero no usaré a nadie.— Jackson me soltó.— Iré a los vestidores.

Él asintió.— Si el entrenador pregunta, le diré que no te sentías bien.

Pasé de largo por los vestidores, observé las escaleras que daban hacia la azotea y las subí lentamente. Solo faltaba poco para que las clases terminaran, nadie notaría mi ausencia.

La puerta estaba entreabierta, observé a alguien mirando por el barandal, caminé hacía ahí sin hacer ruido.

La cancha donde estaba corriendo hace unos minutos se miraba desde aquí.

— La clase aún no termina.

Suspiré recargandome en el barandal. Parecía que cada vez que quería escapar de algo, Jaebum aparecía ahí, pero esta vez fui yo quien apareció.

— Ya lo sé... no me siento con ganas de seguir corriendo.

— ¿Tiene algo que ver con la caída que tuviste?

Mis mejillas se sonrojaron y no me atreví a mirarlo.— ¿Me viste?

— Siempre lo hago.

Su confesión me hizo girarme, Jaebum me miraba a los ojos, por alguna razón esta vez su mirada la sentía diferente, estaba sonriéndome, pero su sonrisa era tan pequeña que apenas lograba notarla.

— El chico que te ayudó.... ¿Quién era?

— Mmm era Mark... Tuan, no sé si lo conoces.

Él asintió, dándole una mirada rápida a las gradas.— Es un Idiota

— Sí, lo noté.

Me tomé el atrevimiento de observarlo, detallando cada parte de su rostro y descubriendo pequeños lunares que no sabía que tenía.

Jaebum susurró dándome cuenta de que se había acercado a mí.— Si continúas mirándome así, yo...

— ¿Tú qué?.... ¿Qué harás?.— Había preguntado en el mismo tono bajo que él.

Extendió su mano hacia mi rostro, quitando un mechón de cabello para ponerlo tras mi oreja y acarició con delicadeza mi mejilla.— Sobre lo que dije anoche, la oferta sigue en pie.

Reí suavemente.— ¿Porqué querrías besarme?

Jaebum suspiró y juntó su frente con la mía. Mi corazón latía con rapidez, y aunque en otro momento yo lo habría empujado para que se alejara, esta vez no lo hice. Algo dentro de mí, me susurraba que no lo apartara.

— Por que me gustas.

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