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Conduzco como si mi vida fuera en ello hacia mi apartamento. No pienso con demasiada claridad y estoy seguro de que en otra situación me preocuparía bastante más tener un accidente pero ahora no es así. Al llegar a mi edificio no me molesto en guardar el coche en el parking sino que aparco en la puerta y corro para llegar a mi piso lo antes posible.

Al llegar a la puerta de mi apartamento puedo ver que es verdad lo que Rubén me había dicho, casi sin poder respirar me acerco a la silueta que está parada justo delante de mi puerta, el chico ya se había girado al escucharme llegar y mantiene una sonrisa socarrona en los labios como si estuviera disfrutando mucho verme así.

-¿Qué coño haces aquí? -pregunto bastante cabreado.

-Pensaba que tendrías ganas de verme, ya que no te llegan ni mis llamadas ni mis mensajes -responde el pelinegro acercándose un poco más a mí.

-Yo creo que sabes perfectamente porque no me llegan y que también sabes que eso significa que no quiero ni verte -le digo con un tono más serio. Ya estoy recuperando la respiración y ya me siento con más fuerza.

-Venga ya ¿en serio vas a tirar nuestra amistad a la basura por una cualquiera que no sabe ni defenderse por sí solo?.

Lo odio, jamás pensé que esto pudiera pasar cuando me hice su amigo, jamás pensé que alguien pudiera hacer estas cosas solo por puro egoísmo y maldad, pero aquí está, intentando conseguir algo que no logará y muchísimo menos con amenazas e insultos a mi pareja.

-Mira Brett, voy a decirte un par de cositas a ver si te quedan claras -empiezo arrinconándolo contra la puerta de mi apartamento-. Tú nunca serás otra vez mi amigo, eres una persona asquerosa y repulsiva que eres capaz de hacerte amigo de una persona tan deplorable como el ex de mi novio solo para conseguir... Yo que sé que quieres conseguir, así que para, déjalo y deja de llamarme, escribirme y muchísimo menos vengas a mi casa a tocarme los cojones.

-Raulito, sabes perfectamente lo que quiero y deberías entender mi frustración -no parece que mis palabras le afecten, al contrario, parece que le hacen hasta gracia-. Es normal que después de estar intentando gustarte después de un año me joda que llegue el primer camarero de turno y lo consiga en un mes. Pero bueno yo tampoco me he inventado estas expectativas de tenerte, si tu no me hubieras seguido el beso aquella noche yo no habría pensado que podría haber pasado algo.

Ahora mismo no entiendo nada de lo que me está diciendo ¿beso? ¿yo? Mi cabeza empieza a funcionar a mil por hora intentando buscar algún momento en el que Brett y yo nos hubiéramos besado pero no encuentro ninguno, debe estar inventándose todo esto porque no me cuadra nada de lo que dice.

-¿No te acuerdas? -pregunta mirando mi cara de confusión. Ahora me he apartado de él, ya no lo estoy acorralando contra la puerta pero él se ha quedado ahí, apoyado con tranquilidad-. Me lo imaginaba. Pues para tú información, hace un poco más de medio año salimos de fiesta y te emborrachaste mucho, tanto que al final tuve que traerte yo a casa porque no me fiaba ni de que vinieras en taxi. Te acompañé hasta la puerta de casa, estuviste tooodo el camino diciéndome cosas sobre lo bueno que era, la suerte que tenías de haberme encontrado en clase y bla bla bla y cuando llegamos a tu puerta hice lo que tenía muchas ganas de hacer desde hace unos meses: besarte.

Creo que sé a que noche se refiere pero la verdad es que no me acuerdo de nada. Intento recordar lo que sea, tanto que me empieza a doler la cabeza, pero no puedo, hasta que un leve recuerdo de aquel beso pasa por mi cabeza, ahí me doy cuenta de que no me está mintiendo, al contrario, solo me está diciendo la verdad.

-Y no solo eso -continúa al ver que me quedo totalmente callado ante sus palabras-. Tú me seguiste el beso y que yo recuerde que muchas ganas, estuvimos aquí un buen rato, justo en esta misma puerta y además hasta me invitaste a entrar a tu casa.

Lleva el mando de la discusión, lo sé, sé que ahora mismo estoy sin palabras y no sé muy bien que puedo responderle a todo esto. No me acuerdo de nada de lo que pasó pero aún así me arrepiento de haberlo hecho con todo mi corazón, lo único que recuerdo es que llevaba un día de mierda y me emborraché para despejarme de todo y bueno acabé cagándola monumentalmente.

-Por si te lo preguntas, entré a tu casa, pero solo para asegurarme de que llegabas bien a la cama y luego me fui -termina borrando ligeramente la sonrisa de su cara-. Al día siguiente tenía la esperanza de que te acordaras y no te arrepintieras pero no dijiste nada, me hablaste como si nada y pensé: bueno puede que no se acuerde pero si él me quiso besar también y quería que entrara a su casa es porque también siente algo por mí. Se ve que yo no tenía razón, simplemente fui pues eso un lío de borrachera.

-Brett, lo siento, siento haberte dado esas expectativas y que pensaras que me gustabas, estuvo mal, pero eso no justifica nada de lo que estás haciendo. Había mil formas de hablar esto y en vez de hacerlo de una forma normal me estas acosando a mí y a mi pareja -respondo intentando centrar un poco mis palabras, entiendo su dolor pero aún así no justifico para nada sus actos-. Así que te voy a pedir que te vayas y nos dejes en paz.

-Tú me hiciste daño a mí y te fuiste con un tío que conocías de dos meses y ¿tengo que aceptar eso? Para nada, Raúl, voy a conseguir que te des cuenta del tipo de persona que es el "angelito" de Borja y al final vendrás a mí.

Antes de que pueda responderle se aparta de la puerta y se va, dejándome ahí en la puerta totalmente perdido, analizando la conversación que hemos tenido y pensando si debería decírselo o no a Borja.

💛

Holiii, estoy a punto de escribir el capítulo final de esta historia y se me ha ocurrido una nueva que puede estar muy bien. Creo que sera Rubegetta porque nunca he escrito una de ellos pero también me apetece Fargexby y no se que hacer.

Cappuccino [Luzuplay]Where stories live. Discover now