Cappuccino [Luzuplay]

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Entro a casa un poco desubicado, Rubén no tarda en venir conmigo a la entrada para saber que ha pasado y puedo ver su preocupación cuando me mira a la cara. No sé muy bien que pensar de lo que ha pasado, no sé muy bien que hacer y tampoco sé como solucionar toda esta mierda de la que claramente soy el culpable.

-¿Qué ha pasado? - pregunta al segundo de verme.

Le cuento todo lo mejor que puedo y puedo admirar su clara cara de sorpresa (y con razón). También se nota que está intentando buscar alguna solución para poder ayudarme pero no la encuentras, como es normal, ni siquiera yo se que hacer ahora mismo.

-¿Debería contarle todo esto a Borja? -esto es lo que más me preocupa, no quiero que piense cosas raras de mí o que se acabe enfadando conmigo más aún.

-Sinceramente, creo que si se lo explicas todo bien lo entenderá, fue algo que pasó hace mucho y ni siquiera lo conocías.

-Ya, pero por mi culpa su ex lo está acosando. Joder Rubén, soy una mierda.

Tengo ganas de llorar, muchas ganas de llorar, pero me controlo, no puedo derrumbarme ahora mismo si caigo es cuando no voy a poder sacar nada en claro. Tomo una respiración muy profunda e intento aclarar mis pensamientos, Rubén tiene razón, es mejor que Borja se entere de esto por mí antes de que Brett intente acercarse a él o contarle algo.

-No eres una mierda, eres buena persona Raúl, cometiste un error estando borracho, no sabías que esto podría pasar -dice poniendo su mano en mi espalda y acariciándola un poco para darme apoyo-. Habla mañana con Borja y seguro que lo entiende todo.

-Eso mismo haré, gracias tío.

-Ahora ves a tu cuarto, cámbiate de ropa y mientras preparo algo rápido de cenar.

-Y también me tienes que contar eso de que mañana comes con Samuel.

Una gran sonrisa se hace presente en su cara y asiente. Yo voy a mi habitación y hago justo lo que me ha pedido, mañana hablaré con Borja.

...

Hoy Raúl me ha dicho que tiene que hablar conmigo de forma urgente así que le he dicho de quedar esta tarde en mi casa. El turno por la mañana se me pasa bastante lento, quiero hablar ya con mi novio y saber esto tan importante que tiene que decirme, sonaba muy preocupado y eso ha hecho que me preocupe yo más.

Cuando llego a casa me pongo lo más cómodo posible e intento hacer tiempo hasta la hora en la que he quedado con Raúl. No tengo muy claro que quiere contarme, pero será malo y ahora mismo no podría se peor momento para tener más noticias malas aún.

Al oír el timbre salto del sofá y corro para abrir la puerta, necesito saber ya que esta pasando. Al otro lado de la puerta está mi novio, sonríe pero se nota que no de forma muy segura, cuando me ve se inclina y me deja un beso en los labios, pero parece distante como si ahora mismo solo quisiera hablar lo que tenemos que hablar y no entretenerse en cosas como los besos.

-Vamos a tu habitación -dice después de colgar sus chaqueta en el perchero.

Sin decir nada lo sigo hasta mi habitación, estoy bastante confundido. Jamás había visto así a Raúl y ahora me estoy preocupando mucho más por toda esta situación.

-¿Qué es lo que me tenías que contar? -pregunto con delicadeza.

-Antes que nada, lo siento, si te digo esto es para que veas que soy sincero contigo y porque es algo que deberías saber. Sé que me arriesgo a que te enfades conmigo pero aún así creo que tienes que saberlo.

Se sienta en mi cama e inspira aire de forma muy profunda dando a entender que se está armando de valor para poder contarlo. Le dejo su tiempo y unos segundos después empieza a narrarme todo lo que pasó anoche en la puerta de su apartamento y también de lo que se entero.

Me quedo totalmente callado, la verdad es que no sé muy bien ni que decir ni que pensar sobre toda esta situación. Me confunde mucho eso de que Raúl besara a su amigo, pero me confunde aún más el hecho de que también le insinuara que quería acostarse con él y aunque me jure y me perjure que no le ha gustado jamás me hace pensarme muchas cosas.

-Ósea qué, te puedes poner tan borracho que puedes liarte con alguien que ni siquiera te gusta e incluso acostarte con él -digo intentando entender toda esta situación.

-No, Borja de verdad que no quiero que pienses así de mí. Fue un mal momento y se me juntó todo, no sé ni porque lo hice, solo perdóname.

-Raúl, no tengo nada que perdonarte, no estábamos juntos cuando te liaste con él. Es solo eso, que si eres capaz de liarte porque sí con alguien sin siquiera atraerte ni un poco solo porque vas borracho...

-Oye, escúchame -dice poniendo su mano en mi mentón, acaricia ligeramente mi mejilla y el suave tacto de sus dedos me tranquiliza-. Si te preocupa que eso pase ahora, créeme, no pasara. Te quiero a ti y solo me gustas tú, da igual si voy tan borracho que no sé ni quien soy yo, siempre sabré quien eres tú y lo que siento por ti.

Sus palabras me tranquilizan bastante y siento que la punzada que estaba sintiendo en mi pecho se relaja un poco. Sé que no me miente pero aún así todo esto me ha dejado un mal sabor de boca, no los porque haya besado a Brett sino porque este se piensa que aún puede conseguir a Raúl a base de destruirme a mí.

-Amor, no puede pasar nada que me haga odiarte. No te cambiaría por nadie en el mundo, eres el chico más bueno del mundo entero y te amo, te amo con cada milímetro de mi ser.

-Yo también a ti, eres el amor de mi vida ¿lo sabes no? -respondo bastante más tranquilo que antes.

-Lo sé y eso ya sabes que no cambiará jamás.

Me besa con dulzura y me animo a acercarme un poco más a él.