Tweek había oído hablar de eso y Craig si lo conocía perfectamente. Era una máquina de ultrasonido.
-Muy bien Tweek, no te muevas. -Pete empezó a buscar algo en el vientre del rubio, ambos asustados a fuera lo que fuera que encontrará, pero la sonrisa de Pete solo les hizo saber que si era por eso. -Sabes tu desmayo no fue tanto por el cansancio, que también es un síntoma de tu estado.
- ¿Estado? -Tweek realmente no entendía hasta que el médico volteo la cámara y se pudo ver un bulto en el ultrasonido, uno muy pequeño.
-Quiero creer que tienes 2 semanas de embarazo Tweek. -El tiempo coincidía con el celo de la otra vez, impactando a ambos adultos. -Felicidades rubia... ahorita llamaré al doctor Mike Makowski, un omega que es obstetra y tiene toda mi confianza.
Ninguno de los dos adultos se atrevió a decir nada en esos momentos cuando recibió la noticia, fue como un balde de agua fría que cayó y aunque Pete vio esto decidió no meterse más en el asunto y dejar que ellos dos hablarán tranquilos.
-Gracias Pete. -Craig fue el primero en recuperarse del shock inicial y cuando el doctor salió este volteo a ver a su novio que aun seguía viendo la pantalla y tocándose esa parte del vientre.
- ¿Tweek? -Craig no sabía como tomar las cosas, por un lado, se sentía emocionado de ese cachorro, sabiendo que sería tan amado como lo era León, que sería tan querido por toda su familia y por él, sin embargo, tampoco olvidaba que Tweek había perdido a su hijita Helen en el vientre y esto influían en su ánimo de los omegas.
-Craig... -Unas lágrimas se posaron en sus ojos viéndolo con una sonrisa. -Juro que tome las pastillas, pero, yo...
-A veces pasa ¿verdad? -El rubio asintió con una media sonrisa mientras se quitaba las lagrimas y le pedía un abrazo a su novio que con gusto se lo dio. -Tranquilo, prometo cuidarlos con mi vida entera.
-Te creo, realmente te creo. -El rubio abrazó su novio, al final la luz pudo más que la obscuridad...
La vida es un sueño, hay días que son lindos, otros que son pesadillas y otros, incluso surreales.
- ¡Tendré un hermanito, tendré un hermanito! -León brincaba de emoción de un lado a otro, Tweek prefirió que pasarán 2 meses antes de anunciar su embarazo, lo cual puso a todos sus amigos felices y la pesadilla de Liane por fin acabará, era el día de la inauguración de la cafetería y también anunció su embarazo.
León era la persona más feliz, por fin un bebé de su edad para cuidar y jugar ya no sería el único niño entre tanto adulto y Allan solo le sonreía a León.
- Felicidades Tweek, dios estoy ansiosos por verlo. -Clyde lloraba mientras tocaba la pancita de su primo.
-Que emoción, seré tía por segunda vez. -Tricia brincaba en el hombro de Karen, habían formalizado su relación unos días atrás.
-Awww ¿estarás embarazado en la boda? -Leopold le dio un codazo a su prometido por esa pregunta estúpida, claro que iba a estarlo, la boda era en 5 meses.
-Me da mucho gusto por ti, amigo. -Leo abrazó a Tweek, como Red, Kenny, Stan y Gary juntos, se habían vuelto grandes amigos.
-Hijo. -Laura fue la última en felicitarlo con Roger. -Siempre supe que eras especial, desde ese día en el parque me aferré a ti y debo agradecerte por salvar a mi familia.
-Ambos te damos la gracias. -Tweek lloró ante esas palabras mientras dejaba que ambos adultos lo abrazarán.
La vida no es blanco y negro, llena de matices que hace cada momento único, cada momento, irrepetible.
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Pequeños Milagros
FanfictionTweek ha tenido una vida de mierda y un pasado trágico, perdiendo a su madre cuando era chico y con una horrible madrastra y hermanastro que lo han alejado de su familia, quedando solo con sus mejores amigos. Sin embargo, después de salvar a un niño...