Cartas para Tres

La Última Carta

Era una tarde tranquila en casa de Karime, con la luz del sol filtrándose a través de las cortinas, creando un ambiente cálido y acogedor. Karime se sentó en su escritorio, rodeada de papeles y su cuaderno de notas. Con el bolígrafo en mano, decidió que era hora de expresar sus sentimientos en una carta para Gala. Sabía que había mucho que decir, y esta sería la manera perfecta de poner en orden sus pensamientos.

Querida Gala,

Desde que decidí ayudar a Agustín con su plan para conseguir una cita con Luis, mi vida dio un giro inesperado. Al principio, todo lo que podía pensar era en cómo acercarme a ti, en cómo escribir esas cartas que te hacían sonreír. No te voy a mentir, al principio fue solo un medio para un fin, pero lo que no anticipé fue que, al conocerte, me quedaría atrapada en tu mundo.

Recuerdo el primer día que te vi en el pasillo. Tenías esa energía vibrante y dominante y no pude evitar admirarte desde el principio. Tu pasión por la música, tu sentido de justicia, y esa chispa en tus ojos me hicieron querer ser parte de tu vida. Cuando nos hicimos amigas, la conexión fue instantánea. Comenzamos a compartir risas, secretos y momentos que atesoro profundamente.

Pero cuando Agustín reveló que mis intenciones iniciales no eran del todo puras, todo se volvió confuso. En ese momento, me sentí como una traidora, y supe que no podía seguir escribiéndote esas cartas, que había dejado de ser una simple tarea para convertirme en alguien que realmente se preocupaba por ti. Me dolió ver cómo nuestra amistad tambaleaba por un malentendido.

Sin embargo, lo que realmente me hizo darme cuenta de lo que significabas para mí fue el proceso de arreglar nuestra amistad. Pasamos por momentos difíciles, pero nuestras disculpas y tu comprensión fueron un bálsamo para mi corazón. En medio de la confusión, descubrí que te valoraba por mucho más que una simple amiga; eras alguien que me inspiraba, que me empujaba a ser mejor.

Ahora que estamos de nuevo en un buen lugar, siento que he aprendido tanto de ti. Me haces sentir segura y comprendida, y me has enseñado lo que significa tener una amiga en la que puedo confiar.

No sé cómo será nuestro futuro, Gala, pero quiero que sepas que estoy aquí para ti, siempre. A veces, siento que mis sentimientos por ti son más profundos de lo que debería. Pero no puedo evitarlo; cuando estoy contigo, todo se siente en su lugar.

Espero que puedas entender mis palabras, y que esta carta te haga sentir lo que realmente siento.

Con amor,

Karime.

Karime leyó y releyó la carta, sintiendo cómo sus palabras resonaban en su interior. Se sentía vulnerable, pero también liberada. Sabía que debía entregársela a Gala, pero había un nudo en su estómago. Las palabras estaban cargadas de emoción, y no estaba segura de cómo Gala reaccionaría. Sin embargo, ya era hora de ser honesta.

Esa misma tarde, Karime decidió que era el momento perfecto. Se arregló un poco y, con la carta en el bolsillo, se dirigió al jardín donde solían encontrarse. Al llegar, vio a Gala sentada en una de las mesas, tocando suavemente su guitarra. La melodía que salía de la guitarra llenó el aire con una belleza melancólica, y Karime se sintió atraída por la escena.

—Hola, Gala —saludó Karime con una sonrisa nerviosa.

Gala levantó la vista, sus ojos se iluminaron al ver a su amiga.

—¡Karime! Justo estaba pensando en ti. ¿Quieres escuchar lo que he estado componiendo?

Karime asintió y se sentó al lado de ella, sintiendo cómo la conexión entre ambas se volvía a fortalecer. Gala tocó algunas notas, y las palabras de la carta comenzaron a fluir en su mente, pero antes de que pudiera hablar, Gala dejó de tocar.

—Oye, ¿qué es lo que te trae aquí? Pareces un poco nerviosa —preguntó Gala, con una mirada curiosa.

Karime tomó una respiración profunda y, sintiendo que la sinceridad era lo mejor, decidió dar el paso. Sacó la carta del bolsillo y la sostuvo entre sus manos temblorosas.

—Quería compartir algo contigo, algo que he estado pensando durante mucho tiempo.

Gala la miró con atención, inclinándose un poco hacia ella.

—Claro, Karime. Estoy aquí para escucharte.

Con el corazón latiendo rápidamente, Karime comenzó a leer en voz alta, sintiendo cada palabra resonar entre ellas. Mientras hablaba, pudo ver cómo Gala se sumergía en sus pensamientos, y cada frase que pronunciaba parecía acercarlas más.

Al terminar, el silencio se apoderó del jardín. Gala la miró, sus ojos brillando con emoción.

—Karime, no sabía que te sentías así. —Gala habló suavemente, sus palabras llenas de ternura—. Agradezco tus palabras y tu valentía para contarme esto.

Karime sintió que su pecho se apretaba; había una mezcla de ansiedad y esperanza en el aire.

—No quiero que esto cambie nuestra amistad, pero no podía quedarme callada más tiempo.

Gala se acercó un poco más, y la atmósfera se volvió intensa. Sus corazones latían en sintonía. Sin pensarlo dos veces, Gala se inclinó hacia adelante y, en un momento cargado de emoción, le dio un suave beso a Karime.

Fue un beso tierno y lleno de todas las palabras que no se habían dicho. Karime sintió cómo su corazón se aceleraba, y todas las inseguridades se desvanecieron. El mundo a su alrededor se desdibujó, dejando solo el roce de sus labios y la promesa de lo que estaba por venir.

Cuando se separaron, ambas se miraron, y la comprensión mutua brilló en sus ojos. No había necesidad de palabras; en ese instante, todo estaba dicho.

—Gracias por ser tan valiente —dijo Gala, sonriendo con calidez—. No sé hacia dónde nos llevará esto, pero estoy lista para averiguarlo.

Karime asintió, sintiendo una oleada de felicidad. No solo había encontrado el coraje para expresar sus sentimientos, sino que había dado un paso hacia algo que había estado esperando, anhelando en silencio.

El futuro era incierto, pero con Gala a su lado, Karime estaba lista para enfrentarlo.

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Penúltimo capitulo y primer beso 💋 iba a hacer que gala igual le escriba una carta pero siento que las canciones son más de Gala dkksks