Después de que All might le dijera que no podía convertirse en Héroe profesional, Izuku decide abandonar su sueño y seguir adelante con su vida. Convencido de que "ser héroe no lo es todo" decide reajustar sus planes y enfocarse en un futuro más tra...
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Las luces de la ciudad traspasaban sus pupilas. Aquellas luces, que antes consideraba insignificantes, ahora eran el paisaje más hermoso ante sus ojos. Si no fuera por su situación actual, las contemplaría con gran felicidad.
El auto se desplazaba a una velocidad moderada, permitiéndole apreciar las tiendas y las personas que caminaban por las calles. Lo que antes era normal para Izuku, ahora se convertía en un sueño casi imposible. Mientras apoyaba su cabeza en la ventana, una serie de pensamientos invadieron su mente; cabe decir que ninguno de ellos era positivo.
Suspiró profundamente y se concentró en recordar toda la información e indicaciones que Chronostasis le había dado. No había tiempo para sentirse mal, mucho menos para llorar; Lo único que tenía que hacer era sobrevivir a toda costa. En ese instante, su prioridad era obtener el dinero que Chisaki tanto quería y regresar a salvo para cuidar y proteger a Eri.
El camino hacia el bar fue más corto de lo que esperaba, o quizás sumergirse en sus pensamientos le hizo perder la noción del tiempo. Antes de bajarse, el hombre que iba junto con él le dio unas últimas indicaciones y le entregó algo en una pequeña bolsa transparente.
Ambos bajaron del auto y caminaron hacia el bar. A diferencia de las otras personas que entraban por la puerta principal, ellos se dirigieron al callejón que estaba al lado. Las luces se hacían más tenues mientras avanzaban y al llegar a una puerta, un guardia de aspecto rudo los recibió con una mirada desconfiada.
—¿Qué buscan aquí?— dijo el guardia, analizando al hombre y su pequeño acompañante.
—Eh, verá... —Metió la mano a su chaqueta y sacó una moneda—. "Hoy es luna llena"
—Espero que sepan lo que hacen —Agarró la moneda y les abrió la puerta.
El pasillo estaba ligeramente oscuro, así que Izuku caminaba con precaución para evitar caerse, sobre todo con los nervios que tenía en ese momento. Observaba de reojo la figura del guardia que los guiaba, repasando mentalmente cada palabra y acción que debía realizar.
Después de subir un par de escaleras llegaron a su destino. Tragó saliva y se dispuso a seguir de serca al sujeto con el que iba, quién según su actuación, era su hermano mayor (beta). Juntos entraron a una habitación donde habían varias personas, en su mayoría eran hombres, y por las feromonas que desprendían, parecían ser Alfas.
Más que interpretar su papel de hermano menor asustado, realmente fue por puro instinto de supervivencia el ponerse detrás de su supuesto hermano mayor. La mirada penetrante del hombre que parecía ser el Líder le ponía los pelos de punta. Los analizaba con mucha cautela, mientras el humo de su cigarro se disipaba en el aire. Parecía que su atención estaba más dirigida a izuku que a su acompañante.
—Bien ¿Qué es lo que quieres? —Esta vez su mirada se dirigió al beta.