The Loud House - Especial Día de muertos

La Muerte en Casa Loud

La muerte llegó a Royal Woods, con su paso sigiloso,

"Hoy me llevo a los Loud, será un viaje hermoso".

Con su capa negra y su guadaña reluciente,

se acercó a la casa, muy decidida y valiente.

El caos y el bullicio en la casa reinaban,

los Loud no sospechaban que la muerte aguardaba.

Primero fue Lincoln, el niño más audaz,

"¡No puedes llevarme! ¡Soy el hombre con un plan!"

Astutamente, Lincoln su plan ideo

Al reto de sus hermanas, debía de avisar sin jubileo

"¡Mujeres, prepárense! La muerte está aquí,

debemos unir fuerzas, ¡no la dejen venir!"

La muerte, sorprendida, escuchó el alboroto,

"No puede ser verdad! Esto no está en mi protocolo."

Pero sin dejarse amedrentar, siguió con su misión,

"Hoy me llevaré a los Loud, ¡no hay discusión!"

A la mayor se acercó, con su porte encantador,

"Es tu hora, rubia, es tiempo de adiós."

Pero Lori sonrió, con astucia en su mirar,

"¡No puedes llevarme! ¡a menos que a mis hermanos puedas controlar!"

La muerte, intrigada, aceptó el desafío,

"¿Qué harás, pequeña? Cuéntame tu lío."

Lori pensó rápido y al juego llamó,

"Si ganas este reto, tal vez me llevarás."

Con cartas en mano, la partida comenzó,

la muerte, confiada, creyó que triunfó.

Pero Lori jugó con destreza y sin prisa,

"¡Mira quién gana, hoy me quedo en la risa!"

La muerte, frustrada, no podía avanzar,

y Lori, triunfante, ya podía respirar.

Siguió con Leni, la dulce soñadora,

"Hoy es tu día, no hay más demora."

Pero Leni, con brillo, le ofreció un trato,

"Un desfile de moda, ¡vamos a hacerlo en un rato!"