18. final

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By Bill

El diablo, estaba apunto de tirarme del maldito carro del pisadito de Tom. Ya le había explicado todo sobre lo sucedido con Georg, aunque creo que casi no me entendió porque la verdad estaba un poquito imperventilado.

Tom intento tomar todo con calma ¡¿Cómo?! Me estaban apunto de matar, ¡A el también! Y se lo expliqué. Pero ¿¡Cómo estaba tan tranquilo?!

Llegamos a un tipo hotel un poquito lejos, para no decir al otro lado de la puta ciudad. Estaba en la única maldita cama que había en ese motel. Estaba seguro de que habían matado a alguien ahí.

—sabes que nos encontrarán... ¿Verdad?— hablaba con tanta tranquilidad que estaba apunto de tirarle un puño en la cara.

—¡Ya se! ¡No tienes por qué repetirlo!—

—tranquilo, todo va a estar bien— estaba apunto de matarlo.

—¿Acaso sabes que siento ahora que mi maldito viejo me quiera matar? ¡Incluso te quiere matar a ti también!—

—el que tenga miedo a morir que no nazca...

—¿Que? ¡¿No te querés callar!?— ¿de dónde se saca esas frases de adicto?

Ya no podía más, ¡Tenía miedo! ¿¡Y que?! ¿Acaso no ven en la situación en la que me encontraba? Sabía que mi papá me odiaba ¿Necesidad de querer matarme? ¡Me tiene envidia!¡ No es mi culpa que el no se pueda coger a quien el quiera! Y Tom no estaba ayudando mucho que digamos.

No dijo nada más después de que le grite, solo se sentó al lado mío, se fue acercando para poder abrazarme, estaba seguro que no iba a llegar a fin de mes. Le devolví el abrazo, intenté esconder mi cara en su ropa, lo único bueno que hizo ese imbécil, no dijo nada.

 Le devolví el abrazo, intenté esconder mi cara en su ropa, lo único bueno que hizo ese imbécil, no dijo nada

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Nos quedamos así un buen rato, recordando cuando mi mamá recién acababa de morir. Jesussss... ¿¡Por qué yo?!

Nos quedamos así un buen rato, incluso nos dormimos en esa posición, la verdad extrañaba esa sensación. Tom puede ser adicto o puto pero quiera o no estoy casado con el.

Al otro día ninguno de los dos sabía a dónde podíamos ir, ¿Y si mejor dejo que me mate y ya? No es tan difícil... Mejor no.

Tom tenía cara de que porfin entendía la gravedad del asunto, ¿Que haremos ahora? Nos teníamos que ir

Empezamos a pensar en lugares en dónde podríamos escapar pero... ¿Y si no? Tom tiene que saber toda la verdad...

—tom, antes de que pase cualquier cosa... Tenés que hablar  ¿No?—

—¿De que? ¿Te quieres divorciar? O algo asi

—¡No! ¿Recuerdas cuando nos conocimos? Cuando ví a un reguetonero con un niño pensé que me iba a quitar la billetera, y aunque no pasó, no nos llevábamos muy bien que digamos.—

Compromiso...? ✮ TollDonde viven las historias. Descúbrelo ahora