¿𝗗𝗲𝗯𝗲𝗿𝗶𝗮 𝗲𝗻𝗮𝗺𝗼𝗿𝗮𝗿𝗺𝗲?

~𝑉𝑜𝑙𝑑𝑒𝑚𝑜𝑟𝑡~

Narra Leah

Ya habían pasado las vacaciones de navidad, eso significa que mi mejor amiga está de vuelta.

-¡Her!-. Grite mientras corría a abrazarla.
-Hola Leh-. Dijo Herms entusiasmada mientras correspondía el abrazo.
-¿Donde están Harry y Ron?-. Pregunto separándose de mi.
-Están en la biblioteca. Buscamos todo este tiempo información sobre Nicolás Flamel, pero no había nada, incluso Harry fue a la sección prohibida, pero no encontró nada-. Respondí mientras caminábamos hacia donde estaban los chicos.
-Hola hola, ¿Me extrañaron?-. Dijo Her son una sonrisa en la cara.
Harry corrió a abrazarla, Ron solo la saludo con la mano.

Estábamos leyendo libros hasta que Her dijo.
-Que tonta, como no lo vi antes. Los mande a buscar en el lugar incorrecto-. Dijo mientras soltaba un gran libro sobre la mesa.
-¿Qué es eso?-. Pregunto Ron.
-Es un poco de lectura ligera-. Dijo Her tranquila.
-ESO, ¿eso es ligero?-. Dijo Ron.
Hermione lo vio mal y continuó leyendo.
Yo solo reí junto con Harry.

Encontramos la información sobre Nicolás Flamel, el había hecho la piedra filosofal, y eso era lo que cuidaba fluffy en el tercer piso.
Esperamos a que anocheciera para ir a ver a Hagrid.

-Hagrid-. Dijo Harry.
-Hola, cúlpenme, pero no estoy en condiciones para entretenerlos-. Dijo este a punto de cerrar la puerta.
-¡Sabemos lo de la piedra filosofal-. Dijimos los 4 al mismo tiempo.

Hagrid nos dejo pasar.
Los chicos seguían diciendo que Snape quería robarla. Pero Hagrid no nos creía, ya que Snape, supuestamente era uno de los que cuidaban la piedra.
Estamos hablando con Hagrid cuando vi que el perro de este estaba babeando por completo a Ron, estaba apunto de soltar la carcajada cuando escuchamos un ruido.
Venía de una olla que tenía Hagrid en el fuego. Era un dragón. No sabemos porque lo tenía, pero lo tenía ahí.
Estábamos apreciándolo cuando vimos a Malfoy en la ventana, sabía que estábamos ahí.
Corrimos hacia adentro cuando vimos a la profesora McGonagall junto a Draco, nos estaba acusando, la profesora dijo que nos pondrían un castigo a los 5.
-Disculpe profesora, pero ellos son 4-. Dijo Malfoy.
-Si, pero usted estaba fuera de la cama también, señor Malfoy-. Dijo McGonagall.

Quería reírme en la cara de el pelos tiesos, pero no quería arruinar la situación.
Filch nos llevó con Hagrid; el cual nos llevaría a el bosque prohibido para acompañarlo.
-Harry, Draco y Leah, irán juntos por allá. Ron, Hermione y Fang, van conmigo.
-No, yo quiero a Fang-. Dijo Malfoy.
-Bueno, solo les digo que es un cobarde-. Dicho esto empezamos a caminar por el bosque. Draco como siempre estaba haciendo drama, mientras que Harry y yo platicábamos.
A lo lejos escuchamos ruidos y vimos una silueta negra, estaba chupando la sangre de un unicornio. En ese momento Fang y Draco corrieron. Yo y Harry nos quedamos helados, estábamos retrocediendo cada vez más, ya que la silueta se estaba acercando más a nosotros.
Harry se puso en frente mío cubriéndome con su cuerpo, yo por instinto lo abracé por detrás cuando llego un centauro ahuyentando a la silueta.
-Señor Potter, usted no debería estar aquí, y menos por estas fechas-. Dijo el centauro.
En eso Hagrid llego y el centauro se fue.

Regresamos al castillo. Estábamos en la sala común. Harry y Hermione estaban sacando sus teorías; Harry decía que Voldemort estaba en el bosque, pero estaba débil, por eso bebía sangre de unicornio. También dijo que Snape no quería la piedra para el mismo, el la quería para Voldemort.

No sé cuánto paso, pero me quede dormida.

Estaba caminando junto a los chicos. Ellos platicaban sobre los exámenes, mientras yo prestaba atención a Harry, el cual no dejaba de sobar su frente.

-¿Estás bien Harry?-. Pregunté.
-Mi cicatriz... me quema-. Dijo con dolor.
-¿Ya te había pasado esto?- pregunto Herms.
-Nunca así...- dijo Harry.
-¿Por qué no vas a ver a la enfermera?-. Pregunto Ron.
-Creo... que se avecina peligro, siempre que estoy cerca de él, quema-. Dijo Harry.

En eso Harry comenzó a correr hacia Hagrid, todos lo seguimos, y cuando llegamos Harry pregunto.
-Hagrid, ¿Quien te dio ese dragón?-. Dijo Harry apurado
-Ah, no lo sé, no le vi la cara-. Respondió.

Harry empezó a preguntarle cosas a Hagrid, el cual nos dimos cuenta que la persona estaba interesada en Fluffy. Obviamente era para saber cómo evitarlo, el único que no se daba cuenta era Hagrid, volvió a echarnos y nos marchamos.
Fuimos corriendo hacia la profesora McGonagall. Le contamos todo, pero solo nos mando a nuestra sala común.

Esperamos a que anocheciera para ir al tercer piso. Yo nunca había visto a fluffy, así que siento que me quedaré helada en cuanto lo vea.
Cada quien bajaba de su habitación cuando vimos la rana de Neville.
-Trevor, no deberías estar aquí-. Dijo Ron.
-Ni ustedes-. Dijo Neville saliendo detrás del sillón.
-Saldrán de nuevo, ¿verdad?-. Pregunto frustrado.
-Mira Neville, esc-. Harry no terminó ya que Neville lo interrumpió.
-¡No!, no los dejare, harán que nos quiten puntos de nuevo... a- a- a-, voy a enfrentarlos-. Dijo haciendo puños con sus manos mientras enredaba sus palabras.

-Neville, se que algún día me perdonarás. ¡Petrificus Totalus!-. Dijo Hermione.
En ese momento Neville se quedó congelado y cayó al suelo.

Llegamos al tercer piso.
Cuando entramos a la habitación por suerte el perro estaba dormido. Alguien había puesto música pata dormirlo, era obvio que de verdad querían entrar a robar la piedra.
Movimos la pata de Fluffy, ya que estaba tapando una trampilla, levantamos la trampilla. Harry nos dijo que bajaría primero, que cualquier cosa nos avisaría.
En eso escuchamos mucho silencio, pues se había detenido la música.
Ron hizo expresión de asco, pues había caído baba en su hombro. Los 4 volteamos hacia arriba y vimos que Fluffy estaba despierto; no pensamos ni un segundo más, gritamos y nos aventamos por la trampilla.