Capítulo 12: Sin palabras

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Le traje una manta a Daniel.

Daniel: Gracias.

Vi como este empezó a quitarse la camisa y sus músculos empezaron a verse.

Juliana: No creo que sea necesario que te quites la camisa.

Daniel: han te incomoda es que yo me acostumbre a dormir sin ropa.

Juliana: N.....o....N.....o Te piensas quitar el bóxer verdad.

Daniel: No, duermo sin bóxer. Cuando duermo en una habitación aquí, dormiré solo en bóxer.

Dijo mientras se bajaba el pantalón.

Aunque aparte, la mirada puede ver cómo tenía su parte íntima erecta...

Juliana: Te puedo preguntar algo.

Daniel: Claro.

Le iba a preguntar por qué tenía erecto su paquete, pero iba a ser incómodo.

Juliana: Mejor, no mejor, duérmete.

Daniel: Claro.

Dijo mientras se cubría con la manta. Llegué a mi habitación y no podía borrar eso de la memoria.

Juliana: Juliana, mejor olvídalo es tu hermanastro; olvidate.

Me repetía esto en eso; pensé en Adrián, imaginándome que el que había visto era Adrián. Empecé a meter mi mano bajo la cobija y empecé a tocar mi parte íntima. Era la primera vez que estaba haciendo esto.

Quería dejar de hacerlo, pero al pensar en Adrián mi cuerpo sentía mariposas. El momento donde le mire el paquete a Daniel vino a mi mente, pero la cara no era de Daniel; era de Adrián. Me acercaba a este y le empezaba a bajar el pantalón, mostrando su gran miembro. En eso empecé a gemir.

Rápidamente tapé mi boca con la otra mano. No podía escucharme, Daniel. Seguí dándome placer hasta empezar a meter dedo por dedo. Al meter el primero sentí delicioso; después metí el segundo y ya me dolió un poquito. Fuí por el tercero y, ay, con este sentí la sensación de quitar mi mano de la boca y empezar a gemir. Era tan delicioso. Sabía que Daniel me estaba escuchando.

Mi autoconsciente quería que Daniel me escuchara, entrara por la puerta y empezara a besarme y después me metiera su miembro en eso... Llegué al extasis.

Había sido mi primera vez, pero al recordar en lo que pensé con Daniel y Adrián me pegué una cachetada; estaba bien que Adrián me gustara, pero Daniel. Daniel es mi hermanastro.

Me levanté de la cama y agarré así a la puerta, y pude escuchar a Daniel gimiendo.

Juliana: Acaso también se está masturbando.

Me recosté en la cama. Daniel tenía razón. Me gusta Adrián.

Juliana: Creo que tengo que vengarme por él...

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