_Narrador_
De repente, Azrael se levanta de su asiento, recoge sus cosas y sale corriendo de la sala, llorando desconsoladamente. Su figura se desvanece en la distancia, dejando a los demás en shock y confusión.
Miguel: (preocupado) ¡Azrael! ¡Espera!
Gabriel: (sorprendido) ¿Qué pasa? ¿Por qué se fue así?
Sera: (inquisitiva) ¿Qué dijo Miguel que lo afectó tanto?
Rafael: (concernido) Debemos ir detrás de él. No puede estar solo en este estado.
Leroy: (determinado) Voy a buscarlo. No puede escapar de sus responsabilidades.
Joel: (reflexivo) Creo que Miguel tocó una fibra sensible en Azrael.
Miguel: (arrepentido) Lo siento. No quise herirlo.
La escena se vuelve caótica, con todos tratando de entender qué pasó y cómo ayudar a Azrael.
Mientras tanto, Azrael corre por los pasillos del Cielo, sollozando y con la vista nublada. Su corazón late con dolor y tristeza.
Azrael: (llorando) ¿Por qué? ¿Por qué Miguel tiene que saber mi secreto?
Su figura se detiene en un jardín solitario, donde se derrumba en el suelo, llorando desconsoladamente.
¿Qué secreto ha sido revelado? ¿Cómo afectará la relación entre Azrael y Miguel? ¿Podrá Azrael superar su dolor y encontrar la paz?
_Narrador_
Azrael se calma lentamente, su respiración se estabiliza y su mente comienza a clarificarse. Se sienta en posición de meditación, cerrando los ojos y enfocándose en su interior.
De repente, siente una presencia detrás de él. Se abre la puerta del jardín y Leroy entra, su rostro preocupado.
Leroy: (suavemente) Azrael...
Azrael no responde, sigue meditando. Leroy se acerca y se sienta frente a él.
Leroy: (con cuidado) Azrael, hermano...
Leroy toma las manos de Azrael, cerrando los ojos y uniendo su respiración con la de Azrael.
Ambos se sumergen en un estado de contemplación, sus mentes conectadas en un nivel profundo.
La energía de Leroy comienza a fluir hacia Azrael, calmándolo y equilibrándolo.
Azrael: (en silencio) Leroy... ¿cómo puedo confiar en Miguel?
Leroy: (en silencio) Azrael, Miguel te conoce. Te entiende. Confía en él.
Azrael: (en silencio) Pero ¿y si me traiciona?
Leroy: (en silencio) No lo hará, Azrael. Miguel es leal. Y te ama como hermano.
La conexión entre ellos se profundiza, sus corazones y mentes se unen en una comprensión mutua.
Azrael: (en silencio) Gracias, Leroy. Me siento más claro.
Leroy: (en silencio) Estoy aquí para ti, Azrael. Siempre.
La meditación compartida llega a su fin, ambos abren los ojos y se miran, sonriendo.
¿Qué cambios ocurrirán en la relación entre Azrael y Miguel? ¿Cómo afectará la conexión entre Azrael y Leroy su futuro? ¿Qué desafíos enfrentarán juntos?