Daelyn sostenía su cabeza con frustración.
Se encontraba sentada en la cama de la habitación que le había dado Maggie.
En la mente de Daelyn solo había una pregunta: ¿El universo estaba en su contra?
Se suponía que hoy armaría sus maletas y abandonaría el grupo por su propia cuenta y de manera genial.
Se iría como una diva y con el ego tocando el cielo.
Dejaría atrás a todos estos lobos que fingen ser corderos.
Se iba a ir antes de que Rick la echara oficialmente, o esos eran los planes.
Para los que se preguntan: ¿Qué pasó?
El universo les dice: ¡Hello!A Daelyn le vino la regla.
Por primera vez en esta vida.
Le vino la regla.
Justamente el día que había planeado irse.
Le vino la regla.
- ¡Ah! - Daelyn destrozó la almohada que se encontraba entre sus manos de la cólera.
Le vino la regla.
¡Le vino la insufrible regla!
Ella se revolcaba en la cama de la furia.
De todo lo que le pudo haber paso, ¡¿Por qué tuvo que ser la semana sangrienta?!
Daelyn trató de respirar hondo y tranquilizarse.
Ella sabía que esto era inevitable para una mujer.
Sabía que tarde o temprano pasaría, por eso se preparó después de soñar con el apocalipsis.
Compró todo lo que una mujer necesita para pasar semejante tormento.
Pero eso no evitaba que se sintiera furiosa.
Furiosa y frustrada.
- ¡Ah! ¡Grrr! - el enfado hacía que los gruñidos escaparan de la boca de Daelyn sin control.
Parecía una bestia rabiosa enfurecida.
- Dollsben, dame las toallas sanitarias - le ordenó Daelyn mientras estaba acostaba boca abajo en la cama y con la mano extendida hacia el león.
Dollsben tragó saliva desde la esquina de la habitación en la que se encontraba.
Su peludo cuerpo cubría el pequeño cuerpo de Caleb, Dollsben podía jurar que el niño también temblaba, pero su nerviosismo no le permitió analizar eso por más tiempo.
Se acercó tembloroso a su dueña y con una velocidad impresionante colocó el paquete de toallas sanitarias en su mano.
Y la misma velocidad que usó para darle las toallitas la usó para alejarse de ella y volver a su esquina.
No quería estar en medio del campo de batalla.
A Daelyn no le importó esto y caminó lentamente hacia la ducha para realizar su limpieza personal y ponerse la toallita.
Su cara estaba tan arrugada por el enojo que parecía una vieja pasa deshidratada.
Muchos dirán: ¿Por qué tanto drama? Solo es la regla.
Pues justamente eso.
Es la regla.
Menstruar ya era difícil para las mujeres normales, pero para las mujeres despertadas (potencias) este sufrimiento se duplicaba, ¿Se imaginan qué pasaba con las superpotencias?
ESTÁS LEYENDO
¿Qué se siente morir en un apocalipsis para renacer en otro?
Fanfiction¿Qué se siente morir en un apocalipsis para renacer en otro? Deja que Han Sheng te cuente su experiencia personal. La desdichada superpotencia de la base z abandona la vida por cuenta propia al darse cuenta de que es la última persona viva sobre el...