Capítulo 22: "Mi alma en tus manos"

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A primera hora del día siguiente, volví a la escena del crimen. La policía ya había hecho su trabajo, pero sabía que quedaban detalles invisibles para ojos inexpertos. La habitación estaba vacía, y el silencio que la envolvía se sentía como un eco de lo que había ocurrido aquí. Recorrí cada rincón como si estuviera reconstruyendo un rompecabezas, con la precisión de un detective, como en otra vida.

Mis dedos recorrieron el borde del escritorio, y mi mirada se detuvo en los detalles, buscando respuestas en la aparente calma. Después de un rato, un destello en mi memoria se encendió: un rastro de aroma en la cortina de la ventana. Me acerqué, y cuando inhalé, algo en mí se heló. Ese olor me llevó a un tiempo lejano, a alguien que pensé que nunca volvería a encontrar. Viktor Marlov. No podía ser... pero esa presencia era inconfundible.

Fruncí el ceño, sopesando la posibilidad. La muerte de Viktor estaba sellada en mi memoria como un hecho definitivo. Sin embargo, este aroma me decía lo contrario. Con cautela, regresé a donde esperaba el detective, con el tono firme y calculado que exigía la situación.

—Viktor Marlov, busque ese nombre —le dije, evitando que mi voz temblara. No me atreví a darle más detalles; su curiosidad ya había crecido lo suficiente en torno a Yazlyn, y este descubrimiento solo intensificará su interés —. Pueden hacer el levantamiento, no hay más nada que pueda ser de utilidad.

Apenas unos minutos atrás, Suvorov había insistido en "verificar" que mi pequeña mujer estuviera bien, observando su cuerpo con una mirada que le recorrió más allá de lo necesario. Al principio pudo tratarse de una rutina profesional, hasta que noté su ceño fruncido cuando sus ojos se detuvieron en mis marcas en su piel, las que había dejado la noche anterior por todo su cuerpo con mis labios. Aunque intentó disimular su incomodidad, no pude evitar sentir su desaprobación.

Deseo desaparecerlo, pero con él no puedo hacerlo demasiado simple. Necesitaba una historia para no resultar envuelto en un problema, que más que causarme conflicto a mi, le va a molestar a Yazlyn.

Un temor oscuro me atravesó de golpe. Yazlyn. Si Viktor había vuelto, su vida estaba en peligro, y no podía arriesgarme a dejarla desprotegida. Sin perder más tiempo, decidí llevármela a la casa de su familia. Por mucho que quisiera evitar involucrarla más en este asunto, era necesario poner distancia entre ella y cualquier amenaza.

Yazlyn

—Te tienes que despedir de tus padres, debemos volver a casa —dijo mientras giraba en una curva el volante. Verlo tan concentrado en la carretera, es algo que no pensé en llegar a disfrutar. Se había subido las mangas de la camisa blanca hasta el codo, dejándome ver sus fuertes y gruesos antebrazos ¿Han visto a hombres con los antebrazos marcados por sus venas? pues esa es la imagen que tengo.

—¿Qué pasó? —me sorprendió verlo volver apurado después de que saliera de su oficina con el detective temprano.

Me puso el abrigo y cogió mi manta para luego cargarme y subirme al carro. Parecía ansioso aunque no mostraba expresión alguna. Por fortuna, eso evitó que me tuviera que despedir tanto del detective como de la secretaria. La vergüenza que había pasado aún no se me pasaba; esta mañana el detective insistió en verificar que estuviera sana, tenia marcas por todo el cerpo gracias al idiota, lo que no termino de entender porque dentro de todo, habia sido suave conmigo, y no me mordio por primera vez desde que tenemos sexo. O tal vez, solo lo sentí así porque estaba más concentrada en sus ojos durante el tiempo que estuvo sobre mi. El punto es que tanto Alana como el detective las vieron, y aunque me gusto ver la cara de Alana al verme, la del detective fue otro cuento.

—Ya lo había mencionado pequeño, hay alguien siguiendo nuestros pasos y el único lugar en el que confío para que estés completamente segura en nuestro hogar —su voz parecía dispersa, como si me estuviera hablando pero pensando en otra cosa.

El Dulce Sabor de la Perversión (En edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora