— Achu. — Alyssa estornudó, y su cuerpo tembló levemente, mientras se abrazaba a sí misma en busca de calor. El frío penetraba hasta sus huesos, y no podía evitar sentir cómo su piel se erizaba. — Quiero ir a un hotel cálido para descansar. — pensó, aunque no lo dijo en voz alta. Era extremadamente sensible al clima, y el frío helado de la ciudad la afectaba más de lo que le gustaría admitir.
Caesar, que había estado observando en silencio, no tardó en notar su incomodidad. Con una sonrisa ladeada, le puso la mano en el hombro de Alyssa, un gesto que, aunque amable, no hizo más que incrementar la sensación de incomodidad en ella.
— Es más caliente de lo que pensaba, ¿no lo crees? — comentó, con su tono relajado, como si intentara hacer una observación ligera.
Alyssa lo miró, sus ojos se entrecerraron con cierta molestia. ¿Cómo podía decir eso? ¿Cómo no iba a sentir calor, si él mismo llevaba un abrigo de piel de animal, mientras ella solo se cubría con una capa ligera? El contraste era obvio, pero no dijo nada, solo mantuvo su expresión impasible, como si la irritación que sentía no tuviera peso.
— Este tipo... — pensó, sintiendo cómo una ola de calor la invadía, no por el clima, sino por la frustración que se estaba acumulando dentro de ella.
El taxi llegó para recogerlos en el aeropuerto, y ambos subieron al vehículo con una cierta prisa en el paso. La ciudad aún estaba despertando, y la brisa fría se colaba a través de las ventanas, haciendo que Alyssa se acomodara más su abrigo.
— Buenos días, señor. — saludó Alyssa, acomodándose el cabello con una suave sonrisa mientras miraba al chofer. Su aspecto era impecable, y sus ojos brillaban con una mezcla de confianza y nerviosismo. Se acercó al conductor, mostrándole el papel con la dirección escrita. — A esta dirección quiero ir.
El chofer frunció el ceño al mirar la dirección, luego giró ligeramente su cabeza hacia ellos, con una expresión de duda.
— Ese es un pueblo vacío, ¿quiere ir ahí? — preguntó, algo desconcertado.
— Huh... — Caesar soltó un quejido suave, claramente no tan interesado en la conversación. Se recostó en el asiento, mirando hacia la ventana con aire distraído, como si estuviera esperando que todo terminara pronto.
— Por favor, tenemos prisa. — interrumpió Alyssa, sonriendo nerviosa. Su tono era urgente, pero su rostro, cuidadosamente preparado para no revelar ningún estrés, trató de mantener la calma ante la situación.
El chofer los miró detenidamente, casi como si intentara discernir algo más allá de sus palabras. Alyssa, sintiendo la tensión, sonrió aún más nerviosa, esperando que el chofer no notara nada fuera de lo común.
— Disculpe, ¿es usted una celebridad? — preguntó el chofer, su tono claramente entusiasta.
Alyssa se quedó petrificada un segundo, sorprendida por la pregunta.
— ¡Claro! Definitivamente lo he visto en el periódico. No sabía que por aquí había celebridades. — el chofer agregó con entusiasmo, sonriendo ampliamente mientras miraba a Alyssa, como si estuviera en presencia de alguien muy importante.
Alyssa soltó una leve risa incrédula, casi como si no pudiera creer lo que acababa de oír. Si realmente recordara el contenido del periódico, no diría eso pensó, su mirada ligeramente endureciéndose. El chofer claramente no prestaba demasiada atención a los detalles, y quizás ni siquiera se había percatado de las pequeñas señales que lo delataban. Una persona distraída, pensó, observando al hombre.
— ¿Qué lo trae por aquí? — preguntó el chofer, con tono curioso. — ¿Está filmando algo?
Caesar abrió la boca para responder, pero antes de que pudiera hacerlo, Alyssa intervino con una sonrisa cálida y una actitud tranquila.
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LIKE THAT .-Caesar Alexandrovich y tu. -Rosas y Champaña-
Hayran KurguSinopsis: "Si me acerco, cariño... ¿te gustará?" Él la mira con intensidad, su voz llena de promesas peligrosas. "Si te doy un poco... ¿me lo devolverías?" Alyssa siente el peso de esas palabras. Cada mirada, cada gesto, parecen empujarla hacia un d...