"El niño" T2 Inicio

98 10 18
                                    

Hace ya varios días que Hipo desapareció de la faz de Berk.

Intentamos buscarlo por todas las islas cercanas de la nueva Berk, pero sin resultado alguno.

Realmente se ha marchado, y esta vez, probablemente sea para siempre..

Meses después.

Cielo azul, sin islas a la vista, y un vuelo rozante al océano, algo que realmente me da paz, me llena el corazón, y silencia la voz de mí cabeza.

Unos pequeños rugidos de Chimuelo llamaron mí atención.

-¿Que sucede, amigo?.- El hizo unos gestos con su mandíbula.- Oh, comeremos en la siguiente isla a la que lleguemos Chimuelo.

Y sin darme tiempo alguno, Chimuelo se acercó a una isla que apareció en nuestro campo de visión.

Se detuvo veloz y firmemente en un pequeño río que tenía esta isla.

-Puedes pescar lo que quieras, no es como si tuviéramos raciones para andar de exquisitos.- El se burló vil mente de mí con pequeños rugidos.

Yo comienzo a juntar ramas y hojas secas, caídas de los árboles cercanos, para preparar una fogata.

Oigo como Chimuelo se lanza al agua para comenzar con la pesca.

No puedo evitar soltar una pequeña sonrisa.

Me dirijo a donde se encuentra mí bolsa de cuero, y de ella saco una plancha de metal y un cuenco.

Comienzo a dirigirme hacia la orilla del río, me coloco de rodillas y comienzo a limpiar el cuenco junto a la plancha de metal.

A mí lado aparece Chimuelo, saliendo velozmente del lago, con la mandíbula llena de peces.

-Buena pesca, amigo.- El deja los peces a un lado de mí, y se aleja un poco para sacudirse todo el agua.

Comencé a atravesar varios pescados con ramas y a colocarlos alrededor de la fogata.

Chimuelo se acerca y la enciende con un pequeño ataque plasma.

-Gracias amigo.

Ahora mismo solo queda esperar a que los pescados queden cocidos para poder comerlos, al menos yo.

Miro a mí derecha y observo a Chimuelo comiendo una gran cantidad de pescado crudo de un bocado, que buen apetito.

Observo fijamente las llamas, como la madera arde y se consume lentamente cada vez más.

Me siento como un trozo de madera en llamas.

Últimamente solo nos la pasamos de isla en isla, sin un lugar fijo donde resguardarnos, donde vivir nuestra vida, pero eso es lo que quiero, ¿No?.

-Eso es lo querías.
-No empieces.
-Solo digo la verdad.
-Solo quédate en silencio de nuevo.
-Prefieres evitar la realidad.
-Solo eres mí subconsciente, no se a que realidad te refieres.

Mí mente se quedó en silencio nuevamente, al menos fue rápido.

Estás "charlas" con mí subconsciente ya tienen un tiempo, sinceramente creo que la soledad me está afectando.

-Quieres saber cómo está tu Hija, la cuál abandonaste, Estoico estaría decepcionado.

-Estoico está muerto.

-Murio por salvar una escoria como tu.

-Murio por qué el quiso hacerlo, yo solo intentaba salvarlos a todos.

No soy uno más || Hipo x Astrid || Hiccstrid || EditandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora