No soy uno más || Hipo x Astrid || Hiccstrid || Editando

"Mí despertar"

Abro mis ojos lentamente, veo hacia los lados, me encuentro en una cabaña.
Intento levantarme pero la herida de mí espalda me genera un fuerte dolor.

Logro oír voces familiares acercándose a la puerta.

-Realmente estamos progresando mucho en poco tiempo.- ¿Mama?.

-Si, espero que Hipo se alegre de esto cuando despierte, o al menos que no le bajen tanto sus ánimos por las malas noticias..- Suspiro.

La puerta se abre y ambas entran a la cabaña, para observarme volteado hacia un lado, entregándoles mí espalda.

Silencio incómodo.

-No hace falta que se queden ahí.- Digo mientras sigo de espaldas.

-HIPO.- El grito y un repentino abrazo de Astrid me sorprendieron bastante.

-Pe-pense que nu-nunca despertarás.- Los sollozos de Astrid sobre mí hicieron que mí corazón se ablandara.

Una voz interrumpe el momento.

-Es bueno saber que estás bien, Hijo.- Madre..

Intento sentarme sobre la cama, pero no puedo por mí mismo, así que Astrid me ayuda a hacerlo.

-¿Que sucedió luego de que me desmaye?.- Digo mientras llevo mí mano hacia mí nuca.

Ambas se quedan en silencio mientras se miran entre si.

-Hipo..- Me dice mí madre con un tono notablemente triste.- Hubieron algunas bajas importantes en la aldea..- me quedo en total silencio durante algunos segundos.

-Supuse que sería asi.. ¿Quienes murieron?.- Inconscientemente comienzo a apretar mí puño.

-Personaje de relleno1, personaje de relleno2, Patán y Spitelout Jorgeson...- Breve silencio.- Salvaron hasta el último Berkiano que pudieron.- Silencio.- Brutilda Tortón, Murió atravesada por Grimmel.- Breve pausa.-Brutacio sobrevivió al ataque, pero se suicidó luego de la muerte de su hermana, dijo que no podía vivir sin ella..- Ella se queda en silencio mientras me observa fijamente.
Un sentimiento de impotencia me invade de repente.

-¿Que sucedió con los Bewilderbeast?.- Pregunto desinteresado.

-El Bewilderbeast protector del nido, como ya sabes el mu-murio por el Bewilderbeast que anteriormente perteneció a Drago Manodura.- Noto como una lágrima se escapa por uno de sus ojos.- Luego de que termino la batalla en tierra, comencé a buscar al Bewilderbeast Juvenil, que había llevado su batalla al medio del basto océano, no obtuve ninguna información relevante.- Realmente creí que el seguiría con vida...- El regreso por su cuenta días después.- Levanto la cabeza emocionado por la afirmación de mí madre.

Es la única noticia buena que eh escuchado hasta ahora, por eso mismo, quiero ir a verlo.

Intento levantarme de la cama, pero nuevamente, no lo logro.
Astrid me levanta como si fuera un niño y me sube sobre su espalda, no sin antes, regalarme un cálido beso en la mejilla.

Ella comienza a caminar hacia la puerta conmigo entre brazos, mí madre abre la puerta y nos sigue por detrás.

Mí primer vistazo fuera de la cabaña me dejó casi ciego.
Un sol abrumador me pegó directamente en los ojos, tarde unos segundos en acostumbrarme.

Una vez que me acostumbré a la luz exterior, pude verlo, a todo Berk.

Era increíble verlo, hay demasiadas cabañas, logro ver una herrería, gente por doquier, todo está tan bien dividido, tan ordenado, es espléndido.