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Jeongin llegó primero, como siempre. Esa clase era su lugar favorito, el único en el que podía ser él mismo. No es que odiara a su madre, Rapunzel, pero ella nunca lo dejaba salir. Aquí, al menos, podía usar sus poderes sin miedo. Sus amigos comenzaron a llegar, felices porque era la última clase del día. Todos valoraban ese espacio, donde aprendían a controlar sus habilidades. Para Jeongin, esa era la única oportunidad de usar su poder sin que alguien lo regañara. Afuera, no podía hacerlo; la reina había prohibido el uso de poderes en público, pues los veía como una amenaza que podría alterar las jerarquías sociales.
A Jeongin le costaba aceptar que, aunque su madre le había bendecido con su poder, él nunca sabía si había algo más, algo más fuerte en su interior. A veces, sentía un impulso irrefrenable de ayudar a los demás, de usar su poder, pero también sentía el peso de controlarlo. Los maestros le decían que debía apaciguar esa "bestia interior" para no perder el control, pero Jeongin, sin entender del todo, sabía que afuera del aula, su poder era un riesgo, no un regalo.
Changbin entro a la clase y el omega de pelo color caramelo le sonrió, no sabia con exactitud porque siempre soñaba con Changbin, pero sabía que él no era consciente de eso, así que no tenia porque mirarlo como estúpido, probablemente lo asustaría como le decían constantemente en esa clase tonta para no alejar a alfas.
Changbin quería acercarse, pero sus amigos estaban detrás de él y tenía que hacerse el menos interesado posible, aunque claro, él estaba muriéndose por hablarle, aunque sea para saludarlo sin tartamudear, moría por olerlo de cerca y descifrar aquel aroma y no se le daba la oportunidad, lo cual lo tenía muy frustrado.
— Buenas tardes alumnos, por favor, siéntense —Ariel sonrió a todas las personas que estaban ahí, Han la saludo con la mano discretamente y esta le dedico la sonrisa más dulce a su único hijo — Saben ya cómo funciona, veremos algunos videos que podrían afectar nuestras emociones y quiero que regulen esa bestia que amenaza con salir.
Los chicos asintieron y cuatro alfas simplemente levantaron una ceja confundidos.
Definitivamente se estaban perdiendo de algo ¿Qué estaba pasando?
— Ustedes son nuevos, ¿verdad? — los chicos asintieron y Ariel trato de no poder una mueca — preséntense, algunas chicas lo están deseando...
Ariel miro hacia un grupo de omegas que solo los miraba para luego susurrarse cosas emocionadas, Hyunjin sonrió haciendo suspirar a las chicas lo que lo supero y termino por reírse.
— Hyunjin, hijo de Hades — guiño un ojo haciendo a las chicas suspirar por el tono de su voz, Hyunjin podía ser la persona más sexy que habitaba en esa escuela, aunque algunos (como Felix) pensaban que del mundo entero.
Felix le sonrió y cuando Hyunjin lo vio volvió a guiñar el ojo, esta vez era solo para él, alguna forma de hablarse en código lo que hizo a sus mejillas calentarse y volverse rojas al instante, quizás para Hyunjin no significaba nada y ahí estaba el, ilusionado como un cachorro que fuera a ser adoptado.
— Seo Changbin, hijo de Dr. Facilier — se mantuvo serio mientras lo decía sin ni siquiera mover el dedo, luego se apoyó mirando de vez en cuando a Jeongin, aunque pasara desapercibido.
— Lee Minho, hijo de Úrsula — Ariel se hizo para tras cuando lo escaneo, su vista pasando por aquel collar que alguna vez había tomado su voz, que la había engañado sin más, como si fuera la cosa más fácil y normal del mundo.

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𝐒𝐊𝐘𝐅𝐀𝐋𝐋 - 𝐒𝐭𝐫𝐚𝐲 𝐤𝐢𝐝𝐬
أدب الهواةHaz oído hablar de ellos. O al menos de sus padres. Chan, Felix, Han y Jeongin son los descendientes de los héroes de los cuentos que alguna vez escuchaste, pero llevan un profundo secreto. En Elyria, el reino de la luz, nadie sabe que su destino e...