YAKO

DEVASTADO

Irasue había salido en búsqueda de Kagome apenas termino de conversar con su hijo, algo le incomodaba profundamente, llego a la casa de los Higurashi encontrando que aquello era un verdadero circo, mas gente de lo que imagino entraba y salía de la casa, nadie la recibió, pero eso no le impidió preguntarle a uno de los chicos que se encontraba por los alrededores sobre Kagome

-oh si la señorita se encuentra en la habitación de visitas, le están haciendo los últimos ajustes a su vestido-

Agradeció la ayuda y camino directo a la habitación, la vivienda se encontraba en una profunda remodelación, no parecía haber sido victima de un incendio, evidentemente Totosai estaba cumpliendo con su palabra y exageraba un poco en los detalles pues nada de lo que se realizaba ahí era bajo la supervisión de los padres de Kagome. Finalmente llego a la habitación donde al menos 10 mujeres se encontraban alrededor de Kagome tomando medidas, colocando alfileres y parloteando sin orden alguno

-señorita por favor necesito que se pare bien, parece que tomamos mal las medias la ultima vez y ahora hay que arreglarlo nuevamente-

- ¿no me diga que ya le entraron los nervios y ha estado comiendo de más? -

- ¿quiere que las mangas estén mas ajustadas o las prefiere holgadas? -

Kagome simplemente las miraba sin saber a quien contestar primero, se suponía que debía mostrarse feliz pero era muy difícil ocultar su fastidio, además, se estaba evidenciando su ligero aumento de peso, aún era muy poco pero un pequeño bulto empezaba a asomarse. Kenta y Naomi se encontraban dentro de la habitación mirando y fastidiados por todo lo que se había convertido su vida, fue Naomi quien vio entrar a Irasue dirigiéndose rápidamente hacia ella

-pasa por favor, que sorpresa tenerte por aquí, ¿está todo bien? -

-oh si no te preocupes, todo de maravilla, vine por que recién recibimos la invitación de la boda, fue nada mas y nada menos que la dama de honor quien se tomo la delicadeza de hacérnosla llegar personalmente hoy por la mañana y no lo podía creer, Kagome convirtiéndose en la señora Temo, quien lo diría-

Las mujeres no dieron importancia a la platica y continuaron con lo suyo, eso alivio a todos y trataron de continuar con una platica desinteresada para evitar levantar alguna sospecha

-así es, nos tomo a todos por sorpresa pero que le hacemos, cuando alguien se encapricha con la idea del matrimonio no hay manera de pararlo, señoras serian tan amables de darnos privacidad, pueden continuar con eso más tarde-

La mujer mayor miro de mala gana a Kenta ante el pedido, tenia ordenes muy especificas de no dejar a solas a Kagome con extraños, debía de cuidar lo que la joven decía, Irasue al notar la tención opto por dirigirse a Kagome y comenzar a hablar sobre el vestido recordando cuando ella se casó, eso ayudo a que la mujer indicara a las demás salieran de la habitación.

-continuaremos en cuanto su visita termine señorita-

Una vez fuera Naomi cerro la puerta y ayudo a Kagome a ponerse más cómoda mientras que Irasue intentaba mantener una conversación interesada en los preparativos, la mujer había escuchado con fastidio a la intrigante mujer y después de un rato fastidiada ante los comentarios de la boda se retiró, no encontró que fuera un peligro para los planes de su jefe, solo era una señora mas que amaba los banales detalles de las fiestas de los ricos.

Con mucho cuidado Naomi se asomo por la puerta verificando que la mujer ya no se encontraba por los alrededores, así fue como Kagome se dejo caer al suelo afligida por toda la situación.

-tranquila Kagome, te puede hacer mucho daño estar así, tienes que tranquilizarte-

-es que es muy difícil vivir así, toda esa gente a nuestro alrededor, dando ordenes y disponiendo de nosotros-