YAKO

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Se conocieron por casualidad, el principal responsable fue Yako, ella lo vio nacer cuando apenas tenía 10 años y él había convencido a sus padres en estar preparado para tener una mascota, sus 15 años eran adecuados para adquirir dicha responsabilidad así que su primer encuentro fue en aquella veterinaria donde se acordó el cierre de la venta.

Kagome cargaba al pequeño perro quien la miraba suplicante como si supiera que ese sería la última vez que fuera sostenido por sus brazos, ella estaba triste, lo había visto nacer hace 2 meses atrás y desde ese día ella había quedado prendada de aquel pequeño que desde que abrió los ojos solo tuvo mirada para ella, de toda la camada solo el respondía a ella como si se conocieran de años. Yako fue como lo nombro y creyó que sus padres permitirían que fuera el único de la camada que podría quedarse, pero no fue así, Yako creció siendo el más grande y fuerte de la camada y eso atrajo la mirada de muchos, pero fueron los Taisho quienes lograron convencer a la pequeña en aceptar que se quedaran con su preciado Yako la razón fue muy simple, ellos aseguraron que podría visitar a Yako cada que quisiera y que incluso conservaría su nombre. Así fue como coloco a Yako en la mesa del veterinario y vigilo cada movimiento que hacían con él, el veterinario después de la revisión felicito a la pequeña Kagome pues Yako estaba en perfectas condiciones de salud, esto provoco que Kagome se sintiera orgullosa de su empeño y dedicación, dicho esto el veterinario llevo a Kagome y a Yako a una pequeña sala donde vio a los señores Taisho y a aquel joven de pelo platinado que miraba a través de la ventana sin poner atención a los recién llegados.

Sesshomaru siempre había querido tener una mascota pero su pequeño hermano Inuyasha era alérgico a los gatos, pájaros y especialmente a los perros, así que era imposible pensar siquiera en tener algo que se le pareciera, conforme pasaron los años y los avances médicos Inuyasha encontró tratamientos muy eficaces que le brindaron la oportunidad de poder convivir con estos animales así que cuando cumplió los 9 años sus padres le regalaron una mascota y no es que Sesshomaru no quisiera a aquella perrita que era propiedad de su hermano, simplemente no conectaba con ella y él quería algo propio así que pidió para su cumpleaños número 15 un perro. Sus padres no pudieron decirle que no, los argumentos fueron muy concisos y entonces comenzó la búsqueda del perro adecuado para él. Cerca de su casa sabían existía una familia de criadores de perros entre los que destacaban los dóbérmanes y creyeron que sería el perro adecuado para su hijo quien era de un carácter frio y dominante, además el contraste entre ellos dos le daría un mejor toque a su convivencia; cuando visitaron el criadero quedaron enamorados que cachorro que corría junto aquella pequeña niña, era protector y obediente y además era el más bello de todos así que se decidieron por él, el gran problema era que la pequeña niña estaba muy encariñado con el perro y sabían cuan doloroso seria separarlos así que decidieron darle a la niña el privilegio de seguir viendo al cachorro. Sesshomaru solo había visto las fotos del cachorro y con solo eso fue suficiente para sentir que él era el indicado además su nombre era genial así que acepto las condiciones de sus padres sobre el nombre y las visitas de la pequeña niña.

Cuando al fin Sesshomaru giro la mirada y vio a Yako sonrió, una inexplicable conexión surgió en aquel momento entre ellos dos y el cachorro salto de los brazos de Kagome para encontrarse con su ahora dueño, Sesshomaru miro con detenimiento a su perro y se sintió complacido de tenerlo a él, entonces los sollozos se hicieron escuchar en toda la sala y fue cuando al fin la miro. Una pequeña niña menor que su hermano se encontraba de rodillas limpiando sus ojos y tratando de contener los pequeños quejidos, sabía que lo podría seguir viendo, pero eso no indicaba que Yako había roto su corazón en el momento en que salto de sus brazos, Sesshomaru interpreto de inmadura a la pequeña, pero al final del día eso es lo que era solo una pequeña niña. Se acerco junto a Yako quien arrepentido de su actitud acerco su cara a la de Kagome para confortarla.

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