DESPEDIDAS Y COMIENZOS

55 10 0
                                    

Sesshomaru y Miroku se dirigieron a un pequeño café que se encontraba en las afueras del pueblo, un lugar en el que usualmente servía cuando Kanna y Miroku se veían a escondidas, eso trajo muchos recuerdos a Miroku, realmente se había enamorado de aquella muchacha y hubiera dado cualquier cosa por ella, pero sabía que aquel chisme sobre él había sido el causante de su ruptura. No dudaba del amor que sentía por Sango, él la amaba, pero si era sincero las manos le sudaban y podía sentir el nudo en el estómago, así como hace años atrás sentía antes de verla Sesshomaru podía ver a Miroku como un adolescente a punto de cometer una locura, eso lo inquieto, a quien verían y por que él tenia que ir, cuando se estacionaron Miroku hablo con él

-Sesshomaru no quiero que pienses mal de mí, yo amo a Sango, pero a quien venimos a ver es a Kanna mi ex novia, ella fue quien me hablo e insistió en que teníamos que hablar, es algo relacionado contigo y Kagome así que por favor esperes un momento, en cuanto te avise búscame y veremos que es lo que tiene que decir-

-bien esperare-

Miroku salió de la camioneta y entro al café, diviso la mesa que siempre utilizaba con ella y por nostalgia se dirigió directo ahí, tomo asiento y espero, no quería aceptarlo, pero tenia ganas de verla, repaso cada momento que había vivido con ella y sonrió entonces la vio entrar, su cabello lacio que llegaba hasta los hombros, pantalones ajustados que denotaban el desarrollo que sus caderas, la blusa roja con transparencias que también dejaban a la vista de Miroku aquel cuerpo que alguna vez fue suyo y que ahora era totalmente prohibido, su rostro también había madurado, ya no era el rostro de una jovencita, su rostro comenzaba a tener rasgos de una mujer adulta en la flor de su juventud, hacia varios meses que no la había visto, normalmente se mantenía alejado de los caminos de la joven que tantos dolores de cabeza le habían dejado. Kanna era bella pero sus ojos seguían siendo vacíos, nunca entendido por que jamás vio en ellos el amor que le profesaba, Kanna vio el momento en que Miroku llego con Sesshomaru, sabia que él no se expondría a que lo vieran solo con ella después de la mala fama que le creo, ella sabía sobre la relación de Miroku y sabiendo que jamás le permitirían tener nada con él así que nunca intento nada, pero al menos quería tener unos minutos a solas, había cosas que hablar antes de darle la información que tenía. Entro y se sentó frente a Miroku y busco los ojos de él, los minutos comenzaron a pasar lentos entre ellos, principalmente tensos pues ninguno sabia la manera correcta de saludar a un ex amor.

-hola Miroku cuanto tiempo sin verte-

-lo mismo digo Kanna ha pasado mucho tiempo-

-si lo sé, aunque para algunos sitios pareciera que el tiempo se detuvo, este lugar no ha cambiado nada...ni tu...bueno solo tu cuerpo se ve mas grande que hace unos años-

-si este lugar se ve igual, pero vamos tu también has cambiado mucho...te vez muy linda...bueno siempre fuiste linda pero ya te vez más madura-

-si los años me han ayudado mucho a pensar en mis actos pasados...y a aprender a entender mis errores y aprender a vivir con las consecuencias de mis actos-

-Kanna la verdad es que no le veo el caso a retomar asuntos que ya son pasado...yo tengo grandes recuerdos junto a ti, pero no vivo amarrado en el pasado-

-si lo sé, sé que has encontrado a una buena mujer y me alegro sinceramente, no quiero causante problemas, pero si quiero que sepas que lamento profundamente haberte dejado sin darte alguna explicación, yo creí en todo lo que me dijeron sobre ti...meses después me entere que fue Kagura quien hizo que las criadas comenzaran el rumor y yo no hice nada para desmentirlo después, te he causado muchos problemas y quiero que sepas que lo lamento-

-gracias Kanna, saber que finalmente te disté cuenta que yo no hice nada por dañarte me conforta-

-bien, dicho esto es importante que ahora llames a Sesshomaru, les tengo información y es importante que él esté presente-

YAKODonde viven las historias. Descúbrelo ahora