Después de un aterrador y difícil viaje en auto por fin pude llegar sana y salva a casa de Ashton. Quede con Ana de vernos aquí ya que él no está, así que podremos hablar con libertad.
-¿¡Que diablos sucede!? - pregunto Ana cuando abrió la puerta de la casa, la preocupación está presente en su rostro y nuevas ganas de llorar se hacen presentes en mi.
-E-El volvió... J-Jesse - digo ahogada entre lagrimas, ella me abrazo con mucha fuerza y mas rápido que tarde también se encuentra llorando a la par mía.
-Explícame todo bien, porque no entiendo nada - nos separamos y limpiamos nuestras lagrimas.
Vamos a la sala a hablar allí porque de verdad necesito sentarme en estos momentos.
-Hace tiempo, recibí unas rosas, y creí que Luke me las había regalado - limpie mi nariz y trate de respirar para calmarme - ¿Y recuerdas los libros que recibiste por mi? - asintió - Bueno, esos tampoco los mando Luke.
-¿Como sabes que fue Jesse?
-Porque los regalos traían notas, y solo tu y él saben que me gustan los libros de Thomas Hardy y que las rosas rosadas son mis favoritas. - explique y su cara palideció.
-Tienes razón.
-Yo creí... que tu le habías dicho a Luke que me gustaban esas cosas, esa era la única explicación que le encontraba a que me haya regalado todo, pero hoy me dijo que no me a mandado nada y... - nuevas lagrimas salieron de mis ojos - No puedo pasar por esto otra vez Ana, no puedo... - negué con mi cabeza muchas veces tratando de desaparecer los recuerdos de mi mente pero es inútil.
-Tranquilízate Angie, se que esto es muy fuerte pero ya se nos ocurrirá algo, confía en mi - dijo tomando mi mano.
-Confió en ti Ana, pero no confió en él.
-Debe de estar tramando algo, porque si te ha mandado esos regalos y sabe donde vives pero no ha ido a verte es porque está pensando en hacer algo. Ahora la pregunta es, ¿Que carajos pretende ese idiota?
-¡Está loco! Es un maldito enfermo y sabe donde vivo - me puse de pie - Tengo que irme... tengo que irme del país, no puedo quedarme aquí.
-¡Cálmate!, tienes que tranquilizarte primero para poder pensar en algo, en este estado no lograremos nada - dijo agarrándome del brazo, me senté de nuevo y puse mi cabeza entre mis manos.
Tiene razón, no soy ninguna cobarde que huye pero joder esto es demasiado duro para mi.
Mi celular suena de repente, y me pongo nerviosa en lo que veo el nombre de Luke en la pantalla.
-E-Es Luke.
-¿El no sabe nada?
-No, salí corriendo de la casa, ni siquiera le dije nada.
-Primero deja de llorar,contéstale, dile que todo está bien... que estás conmigo - asentí y conteste.
-¿Si?
-¡Joder Angie! ¿En donde te metiste preciosa?
Su voz suena muy preocupada pero con un poco de alivio al ver que había contestado, y no es para menos, salí del departamento como una loca sin decir nada y deje un reguero en el piso. Respire hondo, no puedo dejar que sospeche nada.
-Es que... Ana tuvo una emergencia y vine corriendo a ayudarla - mentí.
-¿Pero está bien? ¿Las dos están bien? - pregunto.
No, el loco de mi ex me está acosando y seguro quiere matarme.
-Si...
-Dios estaba muy preocupado, dejaste los libros tirados en el suelo y te fuiste sin decirme, te juro que pensé lo peor.