Capitulo 17: Observando

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Despierto demasiado temprano, no entiendo como pude dormir aunque sea un poco, aunque se que estar con Stefan es lo correcto no puedo estar cómoda durmiendo en la misma cama que el. Me abrazo toda la noche y yo solo quería estar a 10 metro de distancia, a eso sumemos-le que Damon no llego en toda la noche, estuve esperando escuchar la puerta abrirse, pero nada había cruzado la entrada. Y a decir verdad tenia la ilusión de que llegara y poder hablar con el o por lo menos verlo, me mataba la curiosidad saber en donde había estado toda la noche, cualquiera pensaría que fue a beber y luego asesinar alguna chica después de acostarse con ella, pero yo tenia otro presentimiento, sentía que Damon ya no estaba tan solo como todos imaginaban que estaba y por un momento me vino a la mente la pequeña chica pálida y cabello negro.

Son las 5 de la mañana y estoy vagando por toda la casa, todo sigue exactamente igual, como si jamas me hubiera ido. Cuando menos me doy cuenta estoy en el cuarto de Damon, no entiendo que hago aquí, pero aun así no me marcho, me da felicidad darme cuenta que todo sigue como lo deje, pensé que en cuanto saliera por la puerta rompería todo y lo tiraría por la ventana, pero incluso unos pendientes míos que deje en el closet siguen ahí, hay una rosa blanca delante del espejo donde solía maquillarme, la rosa esta abierta, no tiene ni siquiera dos días que fue cortada, quiero tocarla pero siento que no es para mi. Cuando me siento frente al espejo un recuerdo llega a mi, de estar justamente aquí sentada pero con Damon en mi espalda, besándome el cuello, el pensamiento me pone la piel de gallina y doy un gran suspiro.

-¿Se puede saber que esta haciendo su majestad en mi habitación?- escucho una dura voz desde la puerta.

-Damon, lo siento, no podía dormir y.. y cuando menos lo pensé esta aquí- contesto mas rápido de lo normal.

-Tranquila, no pasa nada, mira que si quieres estar en este cuarto solo basta con que lo ordenes y listo, si quieres duermo en el sofá, o en la cochera, tal ves seas tan misericordiosa como para dejarme dormir en el bosque, lo que la reina mande- contesta con un claro tono de dolor en su voz.

-No sean injusto Damon, no soy así de mala, que las cosas no resultaran entre nosotros no me hace un monstruo.

-Okay, entonces ¿te puedes retirar para que pueda dormir?-dice apartándose de la puerta para que pueda salir.

-¿Has bebido?- le pregunto acercándome a el.

-No Elena, no voy corriendo hacia una botella cada ves que mi vida es un desastre- y rodea los ojos de una forma que solo el puede hacer.

-Lamento ser quien trae todo el desastre a tu vida- cada vez acercándome mas.

Damon y yo estamos tan cerca que puedo sentir el calor de su cuerpo y no puedo apartar mis ojos de su boca, esa boca que siempre me hipnotizaba. Noto que a el también se le acelera la respiración como a mi, y se lame el labio inferior.

-No eres el centro de mis problemas Elena- dice esto tan pausadamente que se que le cuesta mantener la concentración en ser malo conmigo.

Mis manos comenzaron a enredarse alrededor de su cuerpo, rodeándolo por la cintura y obligandolo a estar mas cerca de mi, mi aliento pega directo con su cuello, el no se mueve pero sentir como su respiración comienza a ser cada ves mas artificial, mi mano derecha sube por su pecho tocándolo y termino acariciando su cuello con la punta de mis dedos, es ahí cuando su mano comienza a recorrer mi espalda cada vez mas abajo y sin que nuestros labios se toquen Damon me toma por las piernas y me alza hasta llegar al tocador del espejo donde me sienta y me abre de piernas posicionándose el entre ellas. Sus ojos no se separan de los míos como pidiéndonos permiso el uno al otro, y cuando menos pienso su boca esta en mi cuello, comienzo a gemir y mis manos rápidamente trabajan en quitarle la camiseta y al no lograrlo pierdo el control sobre mi fuerza y la hago pedazos, el ríe contra mi cuello y yo lo empujo mas hacia mi. Siento la lejanía de su boca contra mi cuello y esta frente a mi cara de nuevo, empieza a acariciarme la cara y sonríe chocando su frente contra la mía, yo solo lo deseo hasta tan punto que nada nos separe.

-Por favor- ruegan mis labios contra su oído.

Pero en lugar de que esto lo incite a besarme, se aparta mas rápido de lo que jamas lo había hecho, va al armario y toma una nueva camiseta, se la pone y comienza a recuperar su respiración.

-Deberías irte Elena- logra decir- Stefan puede despertar y se preocupara por ti.

Yo sigo sobre la mesa que esta en el tocador, sin poder creer lo que acabo de presenciar, Damon se detuvo porque sabia que era lo correcto, jamas pensé que llegaría el día en que esto sucediera. Baje de la mesa y compuse mi vestido-pijama, aun sin poder mencionar una palabra salí del dormitorio de Damon y el cerro la puerta tras de mi.

No me importaba si era Miranda o cualquier otra chica con la que salia Damon, había logrado lo que ni siquiera yo pude lograr... que Damon hiciera lo correcto por su propia decisión, no porque alguien se lo dijera, si no porque el sabia que era lo que debía hacerse, y eso solo provoco celos en mi, debo deshacerme de esa intrusa, pero siento que no debería hacerle daño a Miranda. Necesito mas pruebas, y necesito saber mas de ella.

Llego al cuarto de Stefan, y lo veo moviéndose mucho en la cama, parece que tiene una pesadilla, lo muevo y lo llamo para que despierte, lo cual hace muy rápido.

-Stefan, ¿Estas bien? tenias una pesadilla- le digo para que se calme.

-Elena, soñé que te perdía, no podría soportarlo de nuevo- dijo abrazándome muy fuerte, y mi sentimiento de culpa creció bastante.

-No te preocupes, aquí estoy- conteste besandole la coronilla.

-Si, lo se hermosa- dijo obviamente mas tranquilo- Cambiemos de tema, dime, que quieres hacer hoy, haremos lo que tu quieras, hable con los chicos y están de acuerdo.

Dijo esto besándome los labios, lo cual me alegro, ya que si me besara en este momento tal ves podría distinguir el deseo a Damon que no puede salir de mi cuerpo.

Estoy pensando en lo que mas quiero hacer y lo que quiero es ver mas como es Damon con Miranda y rápidamente se lo que pediré.

-Quiero que hagamos una fiesta donde vallan todos... en las cascadas.

Y así comenzara mi plan....

TVD: Línea De Sangre Donde viven las historias. Descúbrelo ahora