El vestido azul

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era casi como un deja vu, pero de una forma extraña, esta vez tenia una idea de lo que me espera en la fiesta, mientras me arreglaba el cabello tenia una sonrisa amplia, tenia un buen presentimiento de esta fiesta.

tome mi telefono para verificar si dayana estaba lista - si, te estoy esperando - era lo unico que contenia el mensaje, sali de la habitacion y el deja vu se intensifico mientras los tacones hacian ruido contra la ceramica del piso, subi al auto junto a mi tia y nos encaminamos a la casa de dayana, la amplia sonrisa nunca abandono mi rostro.

lo unico que hizo que saliera de mis pensamientos fue el carro deteniendose y dayana corriendo hacia el mismo - upa mami, quien pidio pollo? - dije claramente bromeando con dayana la cual correspondio con una risa ante mi chiste.

cuando estabamos acomodadas en el auto mi tia arranco, yo aproveche para poner musica, despues de conectar el sistema de sonido del carro a mi telefono, reproduci todo tipo de musica alegre y lo mas sin sentido posible, sacando risas a mis acompañantes, no se si eran las risas o la velocidad a la que iba mi tia, pero en un abrir y cerrar de ojos estabamos en el lugar, dayana y yo intercambiamos miradas aterradas, ambas teniamos ese destello de nerviosismo en los ojos.

en otro pestañeo estabamos en la entrada del lugar, que portaba elegancia y sofisticación, subimos las escaleras eran mas empinadas de lo que me gustaria, al estar en la parte de arriba una puerta de madera con cristales se alzaba frente a nosotras, pude esuchcar a dayana tragar grueso, le di un codazo seguido de una sonrisa para intentar sacarle los nervios, aunque yo estaba igual o peor.

empuje la puerta dejando entrar a dayana primero, un aire helado nos envolvio al entrar, despues de dar una vista 360, me di cuenta que no habia nadie conocido eso me hizo sentir ligeramente mas tranquila, junto con diana nos sentamos en uno de los muebles, escuche a diana respirar como si hubiera estado conteniendo el aire desde que entramos, yo me rei ante su reaccion, eramos practicamente iguales.

desde la comodidad de mi asiento aproveche para detallar el espacio donde nos encontrabamos, un salon amplio pero no extremadamente grande, era de un tamaño adecuado, tenia una pequeña pista de baile a un lado de mi, enfrente de mi se encontraba la decoracion, era muy hermosa, por cierto el tema era -enredados- o simplemente rapunzel, solte una pequeña risa considerando que aquella era mi princesa favorita automaticamente tuve un flashback al dia de mi cumpleaños numero 6.

....

- Vamos mariangel, se supone que tienes que darle a la piñata - dijo mi mami agachandose a mi altura para hablarme.

- no, no quiero pegarle a rapunzel - dije al borde del llanto, de una forma claramente exagerada.

mi padre se llevo una mano a la boca para ocultar sus ganas de reir, mientras yo me encontraba junto a la piñata de rapunzel, sosteniendo el bate con mis juveniles y fragiles manos.

- traiganme una tijera - dijo mi padre en medio del silencio,

mi mamá y yo lo miramos confusas, que pretendia?, sin aviso previo mi papá tomo las tijeras y corto con extremo cuidado la rapunzel de la piñata, dejando la piñata intacta y la rapunzel a un lado, yo sonrie ampliamente y el me imito con una sonrisa de complicidad.

- ahora si, mariangel dale a la piñata - dijo mi papa dandole unas palmaditas a mi pequeño hombro.

yo me seque las lagrimas con un movimiento de mi mano me acerque a la piñata con una sonrisa, aliste mi bate y pum.

....

rei mientras negaba con la cabeza, era un recuerdo especialmete divertido y saben que es lo peor de todo?, aun conservo la rapunzel, si asi como se escucha, mariangel de 14 años guarda una rapunzel de un metro desde sus seis años, ya es considerada una reliquia.

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⏰ Última actualización: 3 days ago ⏰

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