𝐚 𝐛𝐧𝐡𝐚 𝐟𝐚𝐧𝐟𝐢𝐜𝐭𝐢𝐨𝐧 | 𝗽𝗿𝗼 𝗵𝗲𝗿𝗼! 𝘁𝗼𝗱𝗼𝗿𝗼𝗸𝗶 𝘀𝗵𝗼𝘁𝗼 𝘅 𝗳𝗲𝗺! 𝗿𝗲𝗮𝗱𝗲𝗿
❝Nacida dentro de una familia perteneciente a la élite de los héroes, tu destino era el de servir como moneda de cambio. Unir a dos familias con...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Abriste los ojos lentamente, como si un peso invisible te los hubiera mantenido cerrados por demasiado tiempo.
Lo primero que notaste fue la luz blanca que te rodeaba, demasiado brillante, demasiado fría, obligándote a parpadear varias veces para acostumbrarte. No sabías en dónde estabas, pero el olor estéril a desinfectante y el suave pitido de una máquina cercana te dieron una pista antes de que pudieras recordar algo con claridad.
Los momentos previos te golpearon con rapidez, siendo la voz de tus hermanas y madre fallecidas un recordatorio adicional de la decisión que habías tomado. Una sensación de pesar inundó tu pecho.
"Ni siquiera sirvo para matarme" pensaste con amargura.
Tu cuerpo se sentía pesado, como si estuviera sumergido en agua, y cada pequeño movimiento enviaba una oleada de incomodidad por tus músculos. Intentaste mover la cabeza, pero incluso eso parecía ser un esfuerzo monumental. Tu garganta estaba seca, rasposa, y cuando hiciste el intento por hablar, solo conseguiste un débil gemido.
Te rendiste ante la idea de que debías de ser paciente. Mientras esperabas que tu cuerpo reaccionará, tu mente volvió a sacar a relucir los recuerdos antes del escenario presentado. Estabas en casa, tu padre te había encerrado y la locura de ser la siguiente en su lista de muertas te hizo perder la razón, por lo que terminaste haciendo lo que él quería. No te considerabas una persona extremadamente suicida, pero la libertad se veía muy bien desde el lado de los muertos.
La verdadera pregunta era ¿cómo es que habías llegado ahí?
Estabas segura que tu padre no se había tomado la molestia. Era ilógico, considerando que el mismo te había dejado la navaja. Sin embargo, siempre se podía esperar lo inesperado de ese hombre.