Manual de lo prohibido♥ -Capitulo 13

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Manual de lo prohibido♥ -Capitulo 13

-Hola-musité.
-_______, mira, él es Chris-me dijo Sharon, empujándome por el codo hacía el par de ángeles.
Extendí la mano para saludarle y él respondió mi saludo.

-Hola-me dijo.

No estaba muy segura, pero sentía dentro de mí como dos partes; una, atenta a Chris; pero la otra, atenta a Justin. Seguro la fierecilla estaba dentro de la segunda.

-Bueno, ya que se conocieron, ¿a dónde vamos a ir?-preguntó Sharon.
-¿Quieren desayunar en...?-la voz de Justin habló por fin, y yo, completa, me perdí en ella.

Dejé de oír entonces la conversación que tenían los tres, de hecho, mis ojos estaban tercos y habían dejado a mis otros sentidos inactivos, ya que ellos se aferraban a mantener la vista en Justin. Los labios de los demás dejaron de moverse, luego me miraron. ¡Reacciona! Me ordenó una voz en mi cabeza. Entonces mis sentidos comenzaron a activarse de nuevo.

-¡______!-me sacudió Sharon.
-¿Eh?-musité, terriblemente desconcertada.
-¿Que si quieres desayunar pizza?-me preguntó.
-Amm... sí-dije.

¿Cuánto tiempo me habían estado hablando?

-Vamos, entonces-concluyó Justin.

Nos dejaron pasar primero y luego, en la Hybrid de Justin nos dirigimos a un pequeño local de pizza, que desprendía el aroma a salsa abarcando alrededor de unos tres metros y medio.
Nos sentamos en una mesa, Justin y Sharon en un lado y Chris y yo en el otro. Ambos enfrente de ambos.

-Pidamos la pizza típica, para que ______ pueda probarla. Apuesto a que jamás has probado una hecha en Italia.
-Eso es obvio, Sharon, ya sabes que no-dije, riendo.

Luego de unos minutos, la pizza estaba servida enfrente de nosotros; y el olor a queso y salsa se desprendía en cada movimiento mínimo de la pizza. Me sirvieron dos rebanadas, que inmediatamente me comí, ya que sabía delicioso; mientras que intercambiábamos la típica información de los que recién se conocen.

Yo miraba a Justin sólo cuando nadie me observaba a mí, evitando ser descubierta mientras lo apreciaba en cada paso que daba, cada gesto que hacía y cada palabra proveniente de sus labios. Él era hermoso a su propia manera y ni siquiera se daba cuenta de eso.

Al terminar, fuimos a caminar a uno de los tantos canales. A la fierecilla no le gustó para nada que Sharon y Justin se adelantaran, dejándonos atrás. Miré la unión de sus manos y la compatibilidad entre ambos, era como si estuvieran hechos el uno para el otro, las sonrisas entre ambos, las miradas, sus gestos, su aspecto; todo era como si al juntarlos formaran un equilibrio, el ying y el yang. Algo golpeó en mi estómago, se sintió como si dentro hubieran tirado una piedrita a alguna de sus paredes. Como cuando un bebé patea, pero no en esa forma tierna.

-_______- Chris musitó mi nombre y me giré a mirarlo-. Eres muy distraída, ¿no?-rió.
-¿Disculpa?
-Te llamé como tres veces y parecía como si fueras en tu propio mundo-explicó.
-Oh, sí, perdóname-gesticulé con la mano.
-¿Piensas en algo acerca de ellos?-adivinó, increíblemente rápido, haciendo un asentimiento de cabeza en dirección a su hermano y mi amiga.
-¿Eh? ¿Por qué dices eso?-pregunté, nerviosa.
-No sé, quizá por que te les quedaste mirando con profundidad-se encogió de hombros. Reí, aun más nerviosa.
-La verdad, sí-admití-. Pienso que de verdad están hechos el uno para el otro-dije y la fierecilla no estuvo para nada de acuerdo conmigo y me rasguñó allí dentro.
El ceño de Chris se frunció y su mirada se posó en el suelo, mirando sus pies al caminar.
-Sí-farfulló.
-No te oyes muy convencido-acusé, repentinamente curiosa.
-No, sí lo estoy-balbuceó, pero se le escondía entre su voz algún cierto matiz de resignación-. Sharon es muy buena-la miró y sonrió-, tiene una sonrisa muy bonita, como muy sincera; sus ojos grandes y cafés son como si de verdad fueran la ventana de su alma; sus lindos gestos cuando te habla te hacen reír... ¿has notado que cuando se encuentra con alguien se emociona muchísimo? Y luego ese abrazo que te da, emocionada-musitó, completamente perdido.
-Espera, espera... ¿tú...?-no pude terminar la pregunta, me llevé las manos a la boca cuando Chris me miró con sus ojos claros como platos, como si haya soltado un secreto que no quería decir.
-¿Qué?-preguntó, con la voz temblorosa.
-¡Tú estás enamorado de Sharon!-adiviné.

Ahora comprendía lo que Justin me había dicho el otro día, lo de que su hermano estaba enamorado de una chica misteriosa. Por supuesto, no le quería decir, porque la "chica misteriosa" era su mismísima novia.

-¡¿Qué?!-bramó, y pude jurar que vi el sudor perlar su frente.
-Por favor, ¡soy mujer, a mi no me engañas!-no sabía por qué pero una sonrisa empezó a expandirse por mi rostro.
-¡Ssshh!-gesticuló, nervioso hasta más no poder.
-¡Entonces es cierto!-la sonrisa se expandió hasta convertirse en un agujero extenso en mi rostro.
-No digas nada, por favor-me suplicó.

Me llevé ambas manos a la boca, tratando de aplacar mi emoción.

-________, nadie lo sabe-dijo, angustiado.
-Tranquiló, descuida yo no... se lo contaré a nadie-prometí, aun medio emocionada.
-¡Soy un pésimo hermano!-exclamo, gesticulando desesperado- ¿Quién se enamora de la novia de su propio hermano?
-Oye, tranquilo-a juzgar por su expresión, parecía como si estuviera a punto de llorar.

La fierecilla cantaba de placer y esta vez yo desconocía el por qué-. No eres el único, he oído bastantes casos-enrosqué mi brazo al suyo, como si ya le tuviera la suficiente confianza para hacerlo; pero él no se quejó.

-Sí, pero no es bueno que me pase precisamente a mí, ¿sabes lo que es tener que soportar cada beso, o caricia entre ellos; cuando por dentro duele?
-Sí-dije, inmediatamente; sin saber por qué, era como si la otra parte fuera la que hubiera hablado.
-¿Ah sí? ¿Te has enamorado del novio de tu hermana?
-Pues no, soy hija única-reí, pero volví a la seriedad de nuevo-. Pero te entiendo, extrañamente. Sé cómo se siente. Es como si quisieras escapar de la escena cuando ellos se besan, salir corriendo y borrar el recuerdo en tu mente; pero mientras más lo intentas, se vuelve más nítido.
-¡Exacto! Vaya, nunca pensé que hubiera una persona que me entendiera en ese aspecto.
-¿En qué aspecto?-de pronto la voz de Justin apareció en la conversación, materializándose

Manual de lo prohibido♥ Justin Bieber y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora