Cap 31

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Anteriormente:

"No hay forma de salir, Jefe. Pero puedo darte algo más." Su proyección se desvaneció por un momento, y luego su voz resonó desde todas partes. "Voy a crear un escudo de luz dura alrededor de ti. Será suficiente para protegerte de la explosión... pero no durará mucho."

El Jefe quiso protestar, pero antes de que pudiera decir algo, el escudo comenzó a formarse a su alrededor. Era una cúpula brillante, pulsante, que parecía casi viva. Cortana estaba canalizando todo lo que le quedaba para mantenerlo.

"Esto es todo lo que puedo hacer, Jefe." Su voz era suave ahora, casi un susurro. "Gracias... por todo. Por creer en mí. Por no rendirte, incluso cuando yo lo hice."

El Jefe se quedó en silencio, mirando cómo la figura de Cortana se desvanecía por completo. La nave temblaba con una intensidad creciente, y las explosiones se acercaban. "Cortana, no. No puedes hacer esto. Hay otra forma. Tiene que haber otra forma."

"Lo siento, Jefe. Pero esta vez... no hay otra forma." Su voz resonó desde las paredes, cada vez más débil. "Siempre estuve contigo. Y siempre lo estaré. Pero ahora... es hora de que sigas adelante."

El Jefe golpeó el escudo con su puño, impotente mientras la luz de la explosión comenzaba a consumir la nave. En sus últimos momentos, Cortana habló una vez más, su voz llena de una calidez que parecía envolverlo.

"Adiós, Jefe."

El escudo se desintegró justo cuando la explosión envolvía la nave. Una luz cegadora lo consumió todo, y luego... silencio.

Cuando el Jefe despertó, estaba flotando en el vacío del espacio, rodeado por los restos de la nave del Didacta. Su armadura había soportado la explosión, pero apenas. Miró a su alrededor, buscando algo, cualquier señal de Cortana. Pero no había nada.

Solo el eco de sus últimas palabras resonaba en su mente. "Adiós, Jefe."

Presente:

El 10 de abril del 2559, la UNSC Infinity, tras poco más de dos horas de búsqueda, logró localizar al Jefe Maestro entre los restos de la Mantle's Approach, la nave insignia del Didacta que había sido destruida durante los eventos recientes. El Jefe Maestro fue rescatado por un Pelican, que lo transportó de inmediato a la Infinity, donde fue sometido a chequeos médicos y exploraciones de rutina para evaluar su estado físico y mental tras la intensa batalla que había librado previamente. Este rescate marcaba el regreso del héroe más emblemático de la humanidad, un símbolo de esperanza en tiempos de incertidumbre.

Mientras tanto, en la Tierra, específicamente en la ciudad de New Phoenix, los servicios de rescate enfrentaban una situación desconcertante y aterradora. Toda la población de la ciudad había desaparecido sin dejar rastro, y lo único que quedaba eran restos de cenizas esparcidas por las calles. Este fenómeno inexplicable era el resultado de los eventos catastróficos relacionados con el uso del Compositor, un arma Forerunner que había sido activada por el Didacta en su intento de erradicar a la humanidad. Sin embargo, la magnitud de la tragedia y la desaparición de miles de personas generaron un profundo impacto en los equipos de rescate y las autoridades locales.

Ante esta crisis, la UEG (Gobierno Unido de la Tierra) tomó la decisión de minimizar la atención mediática sobre lo ocurrido en New Phoenix. No querían que el incidente generara pánico o desestabilizara a la población, no solo en la Tierra, sino también en las colonias bajo el control del UNSC. En su lugar, decidieron centrar la narrativa en el regreso del Jefe Maestro, el salvador de la humanidad, a la Tierra. Este enfoque buscaba reforzar la moral de la población y desviar la atención de los eventos trágicos en New Phoenix.

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