Ni loca

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Me levanto con el sonido de mi móvil, a duras penas estiró el brazo para situar el pequeño cacharro molesto sobre mi oído, no hay cosa que más me moleste que me despierte el estúpido telefono.

- Quien - digo de mala gana mientras un montón de taladros atraviesan mi cabeza, ayer bebí demasiado creo que me pase.

- Pequeña como estas? Siento lo de Max... el es algo impulsivo - dice como disculpa, que por cierto para mi no es excusa... esto no se quedará así.

- Con resaca, y odio a tu estupido amigo lo sabes no? - digo mientras me acurruco un poco más en mi preciada cama.

- Arreglate, te paso a buscar en media hora te quiero - dice para colgarme dejándome con la palabra en la boca.

Miro la hora y oh! Santa mierda, tanto he dormido? Son las seis de la tarde asique me meto volando a la ducha para después ponerme un short negro con un top fusia, me maquillo suave y bajo. A los pocos segundos llega Mark, tan puntual como siempre.

- Vamos - dice guiándome hasta su coche, que está aparcado en la acera de mi casa.

- Y Deborah? - pregunto algo confusa ya que no la he visto por casa y eso no es normal.

- Esta con Richie, ahora la ves tranquila- dice sonriendo.

- Donde vamos? - digo frunciendo el ceño, no me gustan las sorpresas.

El solo se dedica a levantar los hombros y con una sonrisa pícara sigue conduciendo hasta llegar a un pabellón algo antiguo. Nos bajamos del coche a lo que Mark agarra mi mano y tira de ella para entrar al lugar.

En la entrada compramos un par de cervezas y es cuando captó donde estoy. En medio hay un cuadrilátero... y alrededor gente gritando eufórica. Genial me ha traído a un combate de boxeo.

- Me has traído a un estupido combate de boxeo - digo mientras cruzó los brazos sobre mi pecho haciendo un puchero.

- Es el combate del año... Max contra Shwezy - dice sonriendo, dios le mataría que pasa que no tuve bastante con lo de anoche o que.

- estupendo, lo que quería - digo ironica - ver al estupido ese... me voy a fumar - digo enfadada sin escuchar las advertencias de Mark de que es peligroso que me puedo perder bla bla bla.

Salgo por una puerta trasera, o de emergencia como lo querais llamar, donde no hay nadie gracias a dios, saco de mi bolsillo un paquete de Fortuna sacando un cigarro para encenderlo y relajarme mientras noto como el humo pasa por mi boca hasta llegar a mis pulmones.

La pequeña brisa sopla haciendo que mi pelo vuele libre. Me apoyo en la barandilla de las escalera de emergencia y resoplo frustrada, aveces parece que mis amigos me odian... no creéis?

- Malcriada - dice a mi espalda con una risa ronca, a lo que me giro y me encuentro su mirada, el otra vez? Venga donde esta la camara oculta.

- Vete a la mierda - digo con desdén dando otra calada a mi cigarro mientras me giro para darle la espalda.

- Ey, que eres una chica mala? - dice riéndose a lo que me quita el cigarro para dar una calada.

- Devuélvemelo - digo autoritariamente matandole con la mirada.

- Y si no que ? - dice mientras sigue fumando de mi cigarro con tranquilidad.

Suelto una risa maliciosa para quitarle sus preciados guantes de boxeo que antes colgaban sobre sus fuertes hombros y salir corriendo escaleras abajo - dudo que puedas competir sin estos - digo desde lejos enseñándole sus preciados amigos mientras de mi boca sale una fuerte carcajada.

Noto la adrenalina correr por todo mi cuerpo y escucho como sus pasos se van acercando a mi pero no me importa, no es el rey de la selva y yo se lo demostraré.

Me acerco al río y cojo los guantes con dos dedos insinuando que los voy a tirar, y creerme que me atrevo pero no está en mis planes.

- Y ahora que eh? Ya no eres tan valiente ? - digo sonriendole mientras está plantado a escasos metros de mi.

- Eres odiosa, el combate va a empezar en breves damelos - dice con media sonrisa acercandose lentamente a mi .

- Y si no quiero que? - digo lanzándole un beso al aire mientras suelto un poco más los guantes.

- Tendrás consecuencias Thais... no juegues - dice serio acercandose peligrosamente.

La travesura no tiene límites asique sigo con esta haciendo que los voy a tirar, pero para mi mala suerte resbalan entre mis dedos callendose de verdad. Mis ojos se abren como platos por la sorpresa, soy mujer muerta.

El me mira con los ojos muy abiertos sin dar crédito a lo que acabo de hacer, a pesar de que no era mi intención su mirada demuestra que cree que lo he hecho a proposito.

- No creo que hayas hecho eso... - dice acercandose a mi furioso a grandes pasos.

- Eso parece... mira como flotan... - digo riéndome mientras veo como navegan por el río, la verdad es que la situación tiene su punto de humor. Pagaría por volverlo a hacer para ver la cara de estupido que se le ha quedado.

- Estas loca, dios, si fueras un hombre... - dice apretando sus puños a su costado, dándome una vista de sus músculos en tensión.

- Que? Que harías ?- digo desafiandolo mientras doy un paso a el.

El no tarda ni dos segundos en salir corriendo hacia mi para agarrarme y empujarme al agua, que porcierto esta helada. La sonrisa en su rostro se agranda por segundos mientras me mira orgulloso.

- No... esto si que no - digo enfadada mientras salgo del agua, mi ropa esta pegada a todo mi cuerpo - Eres un idiota - digo acercándome a el - y tu eres odiosa - dice sonriendo pícaro.

Me acerco a el corriendo para voltearle la cara de un guantazo pero el es más rápido que yo y para mi mano tirándome al suelo para dejarme inmóvil en el mientras su pecho pega contra mi espalda. Por más que intento escapar no puedo...

- Recuerda que soy boxeador... - dice con la voz ronca - ahora me pedirás perdón nena- dice en mi oído mientras sigo comiendo hierba.

- Jamas - digo gritando de mal humor notando su cuerpo contra el mio.

- Bueno niñata, tengo gente esperando ver como destrozo a mi oponente nos vemos - dice soltandome para irse caminando con aires descuidados.

EnseñameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora