Enseñame

No debería haber venido

Termino de trabajar un día más, Vera hoy tampoco estaba asique estoy bastante cansada pero nada que no se pueda soportar. Antes de cerrar el bar retoco mi maquillaje para ir a la maldita fiesta de Max, si, no se porque pero iré, al principio me rehusaba de ir me parecía una completa gilipollez pero total, también es la casa de Vera... no tiene nada malo no?

Mi conjunto no es para la ocasión pero tampoco me preocupa, un short vaquero de tiro alto y un top rosa a juego con mis sandalias bastaba para asistir a la dichosa fiesta.

Despues de andar unos minutos por las vacias calles de Madrid por fin llegó a la fiesta, la puerta está abierta y desde fuera se escucha el bullicio que hay dentro, si no llaman los vecinos a la policía poco falta... Entro a la casa encontrándome muchas más personas de las que esperaba, mi mirada viaja hasta donde esta Vera, para segundos después encaminarme hasta allí.

- Ey - digo dándola una abrazo amistoso como cada vez que nos vemos.

- Thais !- dice correspondiendo el abrazo - que empiece la fiesta nena - dice alzando su copa y pasándome una para que empiece a beber.

Las horas pasaban y la música retumbaba por toda la casa, el alcohol cada vez se hacía más presente en mi. Llevaba un par de horas y todavía no había visto al estupido, ni a Mark cosa que era realmente extraña. Veo como Vera se acerca con pasos torpes haciendo eses cosa que quiere decir que esta bastante borracha, con una sonrisa dibujada en la cara se planta enfrente de mi hasta llamar mi atencion.

- Nena, te acuerdas que te conté que me gustaba un chico?- dice con una sonrisa dulce a lo que yo asiento energicamente - esta ahí - dice para señalar con su dedo.

- Mark? Mi Mark? - digo con una risa sonora, vaya, esto si que no me lo esperaba aunque pensándolo bien Mark es todo un Bombón, alto, rubio, ojos miel, cariñoso y con un cuerpo muy cuidado, cualquiera querría pasar una noche con el.

-Shh... calla... si... de que le conoces ?- pregunta curiosa Vera mientras da un sorbo a su copa, demostrando lo nerviosa que esta.

- Es mi mejor amigo, podría intentar ya sabes - digo alzando las cejas picara.

- Oh.. bueno si... pero otro día, ahora creo que estoy demasiado borracha para intentar nada, pero ya sabes mi hermano no... no debe de saber nada - dice sonriendo para desaparecer entre la gente meneando sus caderas al compás de la música.

Estar sentada en un sofá bebiendo no es lo mejor que puedo hacer pero tal y como tengo mi pierna, pocas cosas más puedo hacer.Veo como la gente se lo pasa en grande mientras yo me siento desubicada...

Unas horas despues el alcohol va subiendo por todo mi cuerpo haciendo que descontrole mi ser, Mark intenta evitar que siga bebiendo pero no hay nada ni nadie que me frene.

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Me despierto con un dolor de cabeza intenso, es como si mil taladros retumbaran sobre esta misma, mi cuerpo está adolorido hasta tal punto, que pensar en realizar un movimiento duele.

Poco a poco voy abriendo los ojos para adaptarme a la luz, saliendo de mis labios un quejido, mierda, ayer bebí demasiado. Quito las sabanas que recaen sobre mi cuerpo enredandome y es cuando frunzo el ceño, miro la habitacion y esta no es la mía,paredes azules, un par de muebles en tono negro a juego con un sillón del mismo tono, póster de boxeo, y una enorme tele de plasma... sin duda no es la mia.

Frunzo el ceño extrañada de donde estoy bajo mi mirada y veo mi cuerpo que está al descubierto, completamente desnudo...Oh santa mierda, que hago en una habitación extraña desnuda? Solo hay una solución pero rezo porque no sea...

Agarro la sabana tapandome como buenamente puedo para incorporarme de la cama, mi mirada recae en la espalda que se recuesta a mi lado. Sospechas afirmativas, me he acostado con alquien y no me acuerdo ni de una mierds.Con desesperación me levanto enrollada en la sabana para echar una última ojeada al hombre que esta todavía dormido, suspiro un par de veces para ir andando cuidadosamente para ver quien es el...

Mi mandíbula cae dos metros al ver a ese estupido hombre durmiendo, su pelo esta completamente despeinado y su cuerpo sudado abraza la almohada. Mi pulso esta a mil por hora... que mierda paso anoche? No recuerdo absolutamente nada por mucho que lo intento, mi furia se enciende por momentos. Con mi mano agarro su brazo hasta dejarlo caer en el suelo, el de golpe abre sus verdes ojos verdes mientras frunce el ceño.

- Que coño ha pasado Max ? - digo andando de un lado para otro histerica mientras intento recordar algo de lo que pudo pasar, esto no me puede estar pasando...

- Nada que no quisieras que pasara - dice tranquilo para levantarse del suelo dejándome verlo como dios lo trajo al mundo, esto es una pesadilla... ahora me despertare verdad? Cierro los ojos con fuerza con la esperanza de que al abrirlos el no esté, pero al separar mis parpados ahí sigue el mirandome.

- Tápate por dios - digo dándome la vuelta lo que hace que de su boca salga una sonrisa ronca.

- No es nada que no hayas visto ya - dice acercandose a mi para agacharse y cojer sus bóxer para ponerselos, su mirada me reta en todo momento.

- Mira no se que paso, no me acuerdo de nada pero que quede claro una cosa... esto nunca ha pasado si? Nunca - digo resoplando mientras niego con la cabeza frustrada.

- Ya habrá próxima vez - dice con humor mientras sonríe de medio lado.

- No no no, nunca Max escúchame bien... aunque fueses el último hombre en la faz de la tierra y mi vida dependiera de ello jamas me acostar contigo si? - digo acercándome a el mientras sujeto la sabana que cubre mi cuerpo.

El solo sonríe egocéntricamente para después guiñarme un ojo y salir de la habitacion, mientras tanto yo recojo la ropa que esta tirada por el suelo para vestirme a toda velocidad y salir de esa casa... si algo tengo claro es que nunca debí haber venido.