"Pesadilla"-Yaoi-(Genos x Saitama x Amai Mask)-One punch-man

Capítulo 27: Inseguro

Narra Saitama:

A pesar de todo no me sentía tranquilo, pero no importa. Ya es momento de que vuelva a mi hogar y es muy seguro que Genos y Amai estén preocupados, por lo que antes de irme decidí agradecerle a Sonic ya que era lo mínimo que podía hacer.

-Gracias por... ayudarme-Dije, aunque me costó encontrar las palabras correctas. No sabía exactamente cómo sentirme al respecto. Sonic no era precisamente alguien de confianza, pero, al fin y al cabo, había curado mis heridas.

-Je-Él se limitó a sonreír levemente mientras se apoyaba contra la pared-No tienes por qué preocuparte. Aquí estás a salvo.

"¿A salvo?" Esa palabra resonó en mi cabeza. 

Algo en su tono me hizo dudar, y en el fondo no podía sentirme seguro.

-Quiero volver a casa-Dije intentando sonar firme.

-.....-Sonic arqueó una ceja, claramente sorprendido.

-Aún necesitas recuperarte. No estás listo para irte.

-Me siento mejor-Insistí-De verdad. Aprecio lo que hiciste, pero quiero regresar.

-.....-Para mi sorpresa, su expresión cambió. Esa sonrisa suya adquirió un matiz más oscuro.

-Esta es tu nueva casa-Dijo con una tranquilidad que me puso la piel de gallina.

-.....-Di un paso hacia atrás, tratando de procesar sus palabras-¿Qué? No... no puedo quedarme aquí.

Retrocedí otro paso, y en mi torpeza tiré el plato de comida al suelo, haciendo que se rompiera en pedazos. Sonic frunció el ceño, pero su tono se mantuvo calmado.

-Quédate ahí-Dijo levantando una mano para calmarme-Voy a buscar algo para recoger esto.

Ante esto, algo en mi interior gritaba que debía moverme. Quizás era el instinto, tal vez era el miedo, pero apenas Sonic desapareció de mi vista, me giré y salí corriendo.

El aire frío del bosque golpeaba mi rostro, pero no me importaba. 

Mis pies descalzos pisaban ramas y hojas secas mientras corría sin mirar atrás. Tenía que alejarme, tenía que encontrar una salida. Pero entonces...

-¡Ahhh!

Un dolor agudo me atravesó el pie derecho haciéndome caer. Miré hacia abajo y mi estómago dio un vuelco. Mi pie estaba atrapado en una trampa para osos.

La sangre comenzó a brotar lentamente, y el dolor era tan intenso que apenas podía respirar.

-Yo no lo haría si fuera tú-Dijo una voz detrás de mí.

Giré la cabeza y ahí estaba él, Sonic, caminando hacia mí con una sonrisa amplia. Sus ojos brillaban, reflejando una extraña satisfacción.

-¡¿Qué es esto?!-Grité incapaz de contener mi pánico.

-Una trampa para osos ¿No las conocías?-Respondió con naturalidad, como si fuera lo más obvio del mundo

-¡Deja de jugar!-Le grité, mi respiración pesada y mis manos intentando liberar mi pie atrapado-¿Por qué haces esto?

-.......-Sonic se agachó frente a mí, inclinando la cabeza mientras observaba mi herida. Su sonrisa permanecía intacta.

-Porque no voy a dejarte ir-Respondió con una serenidad que me heló la sangre-No hasta que te cures por completo. Y, por cierto...-Dijo mientras pasaba sus dedos ligeramente por mi pie atrapado en la trampa, haciéndome estremecer de dolor y rabia-Eso va a tardar un poco más de lo previsto.