Me di una ducha y salí con las manos temblando. El clima estaba bipolar. Tome el vestido que Maddie rebuscó en mi closet. Era negro me llegaba unos centímetros arriba de las rodillas, tenía encaje en la parte de la espalda. Lo compre una vez y nunca tuve la ocasión de usarlo.
Vi unos tacones en el piso negros igual pero los aleje con mis pies y busque un par de zapatillas, simples y bajitas.
Me mire al espejo y mire dudosa mi cabello húmedo y enrolado. Tomé la plancha y lacie mi cabello. Me puse un labial rojo y listo. Estaba lista.
Salí y Maddie me reprochó por no haberme puesto sus tacones pero de igual forma me halago.
—Eres demasiado preciosa, perra.
Me reí y me senté en el sofá con ella. El tema de conversación era Zack y aproveché para sacar lo que tenía guardado con llave.
—Me besó y lo peor es que yo también quería besarlo pero luego sentí un profundo odio y le di una bofetada.—Me pase las manos por el cabello.—¡Una bofetada Maddie!
Maddie me miro sorprendida después de todo lo que le conté sobre el libro erótico y el beso. Ella entre abrió los labios para decir algo pero el timbre la interrumpió.
Me levante y con mis palmas planche un poco el vestido y abrí. Un Zack con una camisa azul preciosa apareció en mi vista. Su cabello estaba peinado hacía un lado. Lo mire de arriba a abajo y note que combinaba su camisa con unos zapatos del mismo color. Guapísimo.
—Estas demasiado hermosa.
Se quedo mirándome y susurre un leve gracias que dudo que haya escuchado.
—¿Nos vamos?
Dije ya que seguia mirándome. El reaccionó y se hizo a un lado para que pasara
Salí y mire dentro de casa y Maddie estaba escondida tras el sofá. Le lancé una sonrisa rápida y ella hizo lo mismo.
Nos dirigimos al auto rojo ya conocido para mi. Me puse el cinturón ya adentro, estaba muy emocionada es el restaurante de Ramsey o sea cualquiera estaría emocionada. El camino no fue pesado Zack decía algo de vez en cuando y yo no me sentía nerviosa o incomoda con su presencia.
Cuando el auto se detuvo me quedé boquiabierta.
El nombre brillante de Gordon Ramsey casi me deja ciega. Todo era refinado y bonito por fuera y por dentro era como una película.
—Señor Edward, su mesa esta lista .
Dijo un señor con traje desde que pasamos la puerta. Zack asintió y me tomo de la cintura.
—Reserve un lugar especial .
Me susurro. La música clásica se escuchaba de fondo, una mezcla de violines y piano.
Tomo mi mano y al ver como se entrelazaban nuestros dedos se me revolvió el estómago. Salimos a una pequeña terraza y aquí la música no se escuchaba tanto, estaba vacío. Solo una mesa con velas al rededor para aportar luz al lugar. Había unas rosas en medio de la mesa.
Trague saliva. El soltó mi mano y jaló la silla para que me sentara, Asentí como agradecimiento. ¿A esto se refería con una cita de amigos?.
Zack me recomendó que pedir y yo le hice caso. El señor de antes se nos acerco y tomo la orden. Zack le dijo algo al señor en el oído que fue difícil de descifrar. Traté de no prestarle atención.
Luego me miró dudoso.
— ¿Te dije que estás muy hermosa?
Sus ojos azules a causa de la luz que transmitía las velas se veian brillantes y potentes.—hmm... Creo que no me lo habías dicho, gracias.
El tomó mi mano por encima de la mesa.—No te preguntas porque te traje aquí.—Negué con la cabeza.—Se que te gustan esos programas de cocina, hoy lo confirme y pues, sé que admiras a Gordon y pues pensé que esto te haría mucha ilusión...Miro a la puerta y yo seguí su mirada y juro que mi corazón dejo de funcionar por un leve momento.
¡GORDON RAMSAY TRAÍA NUESTRA COMIDA, REPITO: GORDON RAMSAY TRAÍA NUESTRA COMIDA!Mi boca se abrió de sorpresa y cuando el hombre magnífico puso el plato frente de mi, volvió a latir mi corazón.
—Buenas noches.
Me abrazo por los hombros. Un abrazo leve y casi me derrito en sus brazos.— Oh por Dios... Yo n-no lo puedo creer, usted dios, es usted y yo no...
—Ella quiere decir que lo admira.
Dijo Zack riendose y Gordon se río igual. Se veía mejor que en la tele. Respire profundo, inhalando su perfume. ¿Estaba loca? Puede.
—Gracias. Espero que lo disfruten, si algo no les gusta, dejemenlo saber así retiro a algunos cocineros estúpidos.—Me reí. Tal cual como en la tele.—Buenas noches.
Asintió y con una sonrisa se marcho. Yo movia mi mano en forma de despedida, aún cuando el rubio desapareció por las puertas.
—Ya se fue, Ash.
Se río Zack. Yo lo miré y puse mis manos en mi boca.—Gordon... Gordon Ramsey nos entrego nuestra cena. Cuando le cuente esto a Maddie se morirá. Yo estuve a punto de morir ¿Sabias?.—Puse mi mano en el pecho sintiendo mi corazón aún rápido.—Siente.
El se levanto y puso su mano en mi pecho.—Vaya, no sabia que te emocionaría tanto... Si hubiese sido otra persona ni caso.
Me levanté y lo envolví en mis brazos
—Gracias.
Me devolvió el abrazo, fuerte.—No agradezcas.
.
.
.Terminamos de cenar y la pase asombroso con Zack. Esta vez decidí hablar en vez de escuchar, le conte sobre mi carrera de enfermera y las noches de servicio que hacía. Le conte sobre mi padre, le hable sobre Maddie, sobre mis libros favoritos y mi admiración enfermiza hacía Ben Carson. Él escucho antento todo lo que decía, dando su opinión sobre todo. Esta velada no pudo ser mejor.
Luego llegamos a mi casa, Maddie al parecer estaba dormida, así que lo invite a pasar.
—Siéntate.
Me di la vuelta para dirigirme a la cocina, recorde que tenía un vino
busque unas copas.Sentí como Zack acariciaba mi cintura. Me elevo para que podiera alcanzar las copas, y cuando ya la tenía en manos me bajo. Me di la vuelta y ahí estaba. Robando mi espacio. Deje las copas en la mesita de la cocina y lo miré. Lo mire pidiéndole que me besara, dandole el permiso.
Él se percató de como lo miraba, de como miraba sus labios y se animo a dar otro paso. Su respiración mezclada con la mía, sus labios rozaron los míos haciendome delirar.
Cerre mis ojos dejandome llevar de mis sentimientos y nos besamos. Su boca era otro terreno todavía y quería que me diera más. Mi lengua busco la suya, suave y delicado. Un beso tranquilo y sin prisa, disfrutando de nuestro momento.
Al despegar nuestros labios, esta vez no sentí rabia. Acaricio mi mejilla y deposito un beso en mi frente y sin más... Se fue.
Esuche como se cerro la puerta.
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El novio de mi prima lHOTl
Teen FictionLa vida de Ashley, aburrida, monótona. Hasta que conoce a el novio de su prima. ¿Eres capaz de hacer lo incorrecto por estar con la persona que amas? Un amor prohibido,donde habrá pasión,amor y obviamente habrá problemas. ¿Podrá Ashley enfrentar es...