AY DIOS!!

Cap. 11

Nota: Cuando está en cursiva habla Daniel.

Miguel sonríe, le ha encantado la película. Apenas he podido ver un par de escenas en paz, he estado tan distraído que ni siquiera me he dado cuenta de que ha terminado. Migue empuja un poco mi brazo apurándome. Espero para salir después de Daniel. Sé que Migue se va a levantar si no se lo impido. Tomo su mano y le sonrío. Él se sorprende un poco y comienza a tartamudear algo. Veo la figura de Daniel desaparecer en el pasillo. Suelto su mano y me pongo de pie. Vuelvo a sonreír.

-era una broma.

Vuelvo a cruzar la correa de mi bolso sobre mi pecho y salgo a la escalera. Comienzo a bajar despacio hasta que Miguel me alcanza y avanzamos un poco más rápido, pero no demasiado.

Llegamos a la salida y ya no puedo verlo, me siento aliviado de nuevo. Suspiro. Migue me mira un poco extrañado y trato de poner la mejor de mis caras, pero él llegó a su límite.

Nos sentamos en el patio de comida en un puesto para dos junto a una mampara. Puedo oír otras personas al otro lado de esta. Miro la comida frente a mí: una hamburguesa, papas fritas y una bebida. Luego desvío mis ojos a Miguel que no me quita la mirada.

- lo siento, vale- comienzo mi monologo muchas veces ensayado- sé que he estado distraído y raro, pero no ha sido un buen día para mí.

-¿Tuviste problemas en el trabajo?- pregunta relajando su mirada, pero aun puedo ver un deje de molestia.

-en parte- rio- pero no es algo que yo pueda cambiar.

-¿Qué es?- insiste.

-migue- susurro- no quiero hablar de eso. Es un poco molesto.

-está bien, pero sabes que me tienes, estaré ahí si necesitas hablar.

-gracias- sonrío, él me imita.

Miro la comida frente a mí y me preparo para quitar el papel que envuelve mi hamburguesa, cuando un grito del otro lado llega.

-¡Era realmente mala!- una risa acompaña esa voz, sabía que se referían a la película que acabábamos de ver. Veo que Migue se molesta un poco.

No sé qué paso por mi mente en ese momento, pero sentí que debía defenderlo:

-realmente era una gran película. La historia estaba bien desarrollada y tenía un gran argumento detrás de cada acción.- dije tan fuerte que estoy seguro de que se escuchó del otro lado. Migue me mira atónito ¡Yo casi gritando! Pero se veía feliz. Sonreí y empecé a comer.

- la sangre era demasiado exagerada y falsa- escuche que me respondieron. Me paralice un poco, no me esperaba eso, pero igual seguí defendiéndome.

-al menos los efectos especiales no eran tan irreales e irrealistas.

Seguimos así durante un rato, Miguel se reía cada vez más de lo empecinado que estaba por ganar esa batalla. Y yo también me divertía algo, pero era más importante ganar en ese momento. Pero jamás espere que me arrepentiría de haber ganado.

Solo escuche silencio del otro lado, así que pensé que por fin había acabado, me dieron ganas de reír y bromear con Miguel, tome mi hamburguesa y empecé a sonreír para decir algo, cuando del otro lado escuche que alguien se paraba y en un rápido movimiento estaba junto a mí. Me asuste un poco, creí que buscaba pelea o algo así. Levante mi cabeza lentamente, solo para encontrarme con ese rostro que evitaba ver. Pude sentir como los músculos de mi cara actuaron a voluntad, frunciendo mi ceño y haciendo una mueca de disgusto. No sé porque, pero su rostro parecía realmente sorprendido.

-¿Q-que haces aquí?- tartamudeo

-Si no te habías dado cuenta es un lugar público y no tengo por qué darte explicaciones- respondo malhumorado.