Era un día como cualquier otro. Salté de la cama y miré mi celular. Esperen... No era un día como cualquier otro. ¡Era domingo! Bufé pensando en por qué puse la alarma la noche anterior para que me despertara a las seis un domingo. Después de pelear con mi conciencia por media hora por lo menos, volví a la cama y dormí unas tres horas más.
Desperté, y según mi oído, había un alboroto ni el hijuemadre afuera. Me acerqué a la ventana, agarré una piedra de un balde repleto de las mismas, destinado para lanzar las piedras a los chicos que hacen alboroto a las ocho de la mañana. Me alisté para hacer lo que más disfruto en este mundo y...<< Oh! Mira estabas a punto de lanzarle una piedra a tu mejor amiga >>
Cállate, conciencia. Me di cuenta. Era Katey. Mi mejor amiga desde el jardín. Ella era la única haciendo alboroto ahí afuera, tratando de despertarme. Bufé y me asomé bien a la ventana. Hice una mueca de "¿por qué tenías que ser tú y no un chico molesto que hace alboroto a las ocho de la mañana?" Ya que en verdad quería lanzar esa condenada piedra.
- ¡Qué quieres Katey! ¡Son las ocho! ¡Déjame dormir!
Grité, haciendo que los vecinos se asomaran. Hice una cara de lo siento, me puse una chaqueta, y bajé al encuentro de Katey para no tener que gritar.
- ¿Ocho? Sabrina, son casi las doce del día.
- ¡¡QUÉ!!
<< Qué inteligente, ahora perdimos la cita con nuestro amado Caleb. ¡Pero tranquila! Seguramente a él también se le olvidó >>
¿Por qué dices eso? Él jamás se pierde una de nuestras citas.
<< Y qué me dices de el lunes, del mes pasado, y del ante-pasado? >>
Solo cállate.
El punto es que se supone que a las nueve debía ir al parque con Caleb, mi novio. Pero desafortunadamente me olvidé.Corrí de vuelta a mi cuarto, y revisé mi teléfono. Caleb, es un poco idiota, así que mi conciencia tenía razón. Tal vez se le olvidó por cuarta vez.
Agarré mi teléfono, y tenía cero notificaciones nuevas. Genial. Sí se olvidó de nuestra cita. Lo desbloqueé, y le escribí un mensaje a Caleb.
"Hola, ¿qué te parece si vamos al parque ahorita?" Le escribí, y puse enviar. Perfecto! Me respondió.
"Claro!" okay iré al parque. Pero esperen. ¡Ni me he bañado! Me paré de un salto, y me metí a bañar lo más rápido que pude. Cuando salí, me puse unos pantalones pegados y medio rasgados negros, una blusa blanca con una frase con letras negras y grandes en el pecho, y unas botas negras de medio tacón. Me miré al espejo, y me dio flojera hacerme un peinado, así que me dejé el cabello suelto. Salí del baño, y mi hermana estaba en mi cuarto.
- ¿qué haces aquí, Nina? ¿No deberías estar con tu novio o algo así?
Dije yo, con curiosidad, y un poco molesta. Odio que entren a mi cuarto sin permiso.- hoy no. Vamos a tener una charla de chica a chica.
<< esto terminará mal. >>
- emmm.. Okay. ¿De qué quieres hablar?
- De tu novio.
- Nina. Ya se que es un idiota, no me lo tienes que recordar. Y además necesita de mí para sobrevivir. O sino, ya estaría estampado contra un árbol o contra la puerta de su habitación.
- no, Sabrina. No es eso. Bueno.. En parte. Pero es algo mas que estamparse contra su propia puerta.
Hice una mueca de no-entiendo-nada ya que, no se puede hablar mucho del tipo.
- ¿entonces?
- Caleb te confundió conmigo.
Dijo Nina entre risas. Yo reí y a la vez bufé por el novio tan idiota que tengo.
- luego, te confundió con el retrete y se cayó de cabeza.
Rió Nina. Yo reí aún mas de lo que había reído antes.
- ¡Hubiera querido ver eso!
Dije yo, aún entre risas. Pero Nina se calmó y se puso seria.
- es enserio, Sabri. No puedes tener un novio tan idiota.
- Nina, no es gran cosa. Tu y yo nos parecemos mucho... Y el retrete y yo nos parecemos mucho... ¡Te lo dije! No es gran cosa.
- Sabrina. Es enserio. Caleb ya pasa de idiota a super-hiper-mega-estupitonto-estupido-tonto-idiota.
- Nina, ¡no! No eres mi madre no tienes ningún poder sobre mí. Yo decido con quién me quedo y tu no puedes hacer nada al respecto. ¡Deja la bobada!
Dije, levantándome de la cama donde Nina y yo estábamos sentadas y haciendo señas con las manos exageradamente.- SOY TU HERMANA MAYOR, SABRINA. NO TE ATREVAS A HABLARME ASÍ ¿OÍSTE?
Nina subió la voz. Yo la aparté de un manotazo y salí del cuarto. No veía a mi hermana, pero sabía de algún modo que se había quedado en mi cuarto y estaba mirándome con tristeza mientras yo caminaba por el pasillo, hasta que bajé las escaleras. Yo me sentí muy mal, pero seguí mi camino. No iba a dejar que Nina se interpusiera entre Caleb y yo. El pobrecito me necesita.
<< ¿Ves lo que hiciste? Ahora tu hermana nos odia. >>
Cállate conciencia. Tu tampoco puedes decirme qué hacer.
<< En realidad, sí. >>
(...)
Salí de la casa, y me dirigí al parque.
Nada más que 15 minutos caminando. Cuando al fin llegué, caminé por los caminos de cemento, y un perro se me cruzo de repente. Aunque era pequeño y débil me hizo caer al duro suelo de cemento.
- ¡Lo siento tanto! ¿Estás bien?
Dijo una chica desconocida, ofreciéndome una mano. Tenía como mi edad, e iba vestida con una blusa pegada negra, unos pantalones de cuero blancos, y una chaqueta blanca de cuero también. Su sonrisa era radiante, y su cabello era castaño brillante. Por un momento creí que había muerto y la chica era un ángel. Pero recuperé el conocimiento y me paré con ayuda de la radiante y extraña chica.- sí, gracias. No importa.
- me llamo Sunshine. ¿Y tu eres...?
<< con razón el nombre >>
- me llamo Sabrina. Bonito nombre!
<< bonito cabello, bonitos ojos, bonita ropa.... >>
- gracias. Este es Pillow.
Dijo Sunshine, presentándome a su perro. El que me hizo caer.
- ¡hola, Pillow!
Dije, consintiendo a su perro en la cabeza. Pillow se acercó y me dio un beso mojado y asqueroso en la mejilla. Yo lo cargué y lo mimé un rato.
- que bueno conocerte, Sunshine. Me tengo que ir. Gracias por presentarme a tu perro. ¡Nos vemos!
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¡HOLIGÜIS!
VOLVÍ CON UNA NUEVA HISTORIAAAAAAA
sé que ya estaba escribiendo otra en inglés, y sé que la medio abandoné, pero ya que acostumbro a hacer historias en inglés, creí que podía cambiar el caminado un poquitito. Espero que la historia les guste y que la disfruten...ADIOSSSSSSSSSSSS CUANDO YA TENGAMOS MAS VISITAS ESTARÉ HACIENDO DEDICACIONES.
#sabrina_se_consiguió_un_novio_idiota
#a_nadie_le_gusta_caleb
#nina_solo_queria_ayudar
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"COMO AMIGOS"
Teen Fiction"A los 12 años comienza tu vida". Todos me decían lo mismo. Yo no les puse atención. "A los 12 años encuentras a tus amigos de toda la vida, y a tu primer amor." Tampoco les creí. Yo pensaba que ya los había encontrado. Pero no me voy a adelantar. Y...