¡Al carajo todo!

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Estaba a punto de morir mientras elegía la ropa de mi cita del sábado, ese mismo día.

-¿estás bien?-
Dijo Nina, desde el otro lado de la puerta, entre abriéndola. Yo hice cara de "tu qué crees" mientras sostenía en alto un horrible vestido rojo de cuadros con cuello en v.

-¡que pena que no tengas nada que usar!-
Dijo ella con un suspiro sarcástico, mientras sacaba una bolsa de regalo de detrás de su espalda. Yo bajé el infame vestido, y comencé a jugar con mis manos mientras que me mordía el labio como niña pequeña.

-¿eso es para mí?-
Dije con voz de niñita de cinco años mientras sonreía pícaramente.

Nina me dio la bolsa con una sonrisa de oreja a oreja. Rápidamente saqué el contenido de la bolsa, rompiéndola como nunca. Era un vestido hermoso: blanco, hasta la rodilla, con estampado de rosas blancas con borde negro, un saco negro de botones, y unos botines negros de medio tacón.

Lo sostuve en alto, mientras lo admiraba. Nina siempre me saca de los problemas.

Corrí a abrazar a mi hermana, y luego me encerré en el baño para ponerme el vestido. Me quedaba perfecto. Casi como si estuviera mandado a hacer. Me puse el saco y me quedaba un poco raro, así que hice un invento y me amarré el saco en la parte de abajo nada más.

Me arreglé un poco el pelo, y me puse algo de maquillaje. No demasiado para el cine. En eso, sonó el timbre. Llegó Hayden. Me sobresalté, y salí del baño, con un millón de mariposas en el estómago. De repente un pensamiento vino a mi mente.

¿Cómo alguien podría superar a Steven? Nadie podría. Estaba muy segura de eso. Estaba bajando las escaleras, y de pronto me fui de jeta contra el planeta y caí en los brazos de alguien. Al principio creí que era mi papá, pero abrí los ojos, y vi los de Hayden. Azul muy claro, y sonrisa sincera.
Le sonreí levemente, y me bajé de sus brazos rápidamente.

-hola.. Te ves hermosa.-
Dijo él con una sonrisa.

-gracias pero... ¿No crees que es mucho para el cine?-
Dije yo. Él negó con la cabeza.

-es perfecto.-
Dijo, y al notar que mi padre nos estaba observando detenidamente, nos dirigimos a la puerta, y nos fuimos. Eran las cuatro de la tarde, así que seguía habiendo luz. Hayden tomó su celular, y comenzó a tomarme fotos mientras caminábamos, y yo me resistía.

-¿qué haces?-
Dije entre risas.

-tomándote fotos. Es que te ves hermosa a la luz del sol.-
Dijo, y yo sonreí. Pude sentir que me ruborizaba. Genial. Ya hice el oso.

Llegamos al centro comercial, y entramos a los cinemas.

-¿qué vamos a ver?-
Le pregunté a Hayden.

-Bajo la Misma Estrella.-
Dijo él. Yo reí por lo bajo. Él hizo una cara de interrogación.

-me he visto esa película como dos mil veces-
Dije, controlando la risa.

-oh, lo siento... Si quieres podemos...-
Dijo él.

-no.. Está bien. Me la repito cuantas veces quieras.-
Dije, y seguimos caminando hacia la sala.

Ibamos en la parte de la película cuando Hazel dice "Esta es la realidad. Lo siento". En ese momento, Hayden agarró mi mano delicadamente, y no la dejó ir hasta el final de la película.

(...)

....Steven POV....

Era domingo, así que caminaba por el parque de mi nuevo hogar. No puedo decir que es mejor que el de Londres. Ese tenía a todos mis amigos, y a Sabrina... En realidad la extraño. Y sé que ella a mí. Por algo no quiso hablarme después de recibir la noticia de que yo me iba a mudar, hace por lo menos un mes. Ya pasó un mes, y yo aquí aguantando las ganas de verla y abrazarla.

"COMO AMIGOS"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora