¡Super compras para comprahólicas!

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-Marylin Monroe-
Dijo Margo mientras jugábamos "Adivina quién" de famosos. Yo negué con la cabeza, y me reí un poco.

-nope.-

-¿es una mujer?-
Dijo Margo estresada.

Yo asentí.

-¿es rubia?-
Preguntó. Yo asentí, conteniendo la risa.

-¡Marilyn Monroe!-
Dijo Margo, enterrando sus dedos entre su cabello agarrado. Yo negué con la cabeza, poniéndome un cojín en la cara para no estallar de la risa.

-¿¡Tiene el cabello largo!?-
Preguntó casi gritando. Yo asentí, poniéndome ahora morada de aguantar la risa.

-¿¡Taylor Swift!?-

-¡¡NO!!-
Dije, estallando de la risa. No se por qué nos dio tanta risa, pero las dos nos tiramos al piso a llorar de la risa y a rodar de la risa. Hasta creo que nos salimos del cuarto y nos tiramos por las escaleras pero en realidad ni lo recuerdo de tantos golpes en la cabeza. Creo que ya recuerdo. Comimos Nutella. Esa es la razón por la que nos dio la estupidez tan fuerte.

Luego de ese ataque de risa, nos dio flojera volver a subir las escaleras, así que, ya que estábamos envueltas en cobijas, nos quedamos en la sala, cada una en un sofá, y no nos dimos cuenta a qué hora nos quedamos dormidas.

Al día siguiente, me desperté, y estaba en mi habitación. En mi cama, muy tranquila como si me hubiera dormido como un angelito en esta. Me senté confundida, y miré a mi alrededor. Miré a mi lado al piso, y estaba el colchón de Margo y ella en este, como si se hubiera dormido como un angelito también. Siempre me pasaba lo mismo con Margo. Yo me despertaba, y ella seguía dormida como la bella durmiente, menos la vez que me despertó ella a mí. Pero eso fue diferente. Al parecer, nada había cambiado en dos años.

Estiré mi mano, para alcanzar mi celular para ver la hora, y eran las doce y media del día. Abrí los ojos como platos, y me paré de un salto. Salí del cuarto sin hacer mucho ruido para no despertar a Margo, y me metí a bañar. Se supone que debía ir de compras Nina en media hora. Y hace mucho que no hacía eso, así que lo extrañaba demasiado.

Cuando salí de bañarme, encontré a Margo escarbando dentro de mis cosas.

-¡hey! ¿Qué crees que haces?-
Le dije mientras dejaba la toalla y mi pijama en en el canasto de la ropa sucia. 

-solo miro.-
Dijo Margo, sacando una foto con un marco de madera clara.

-¿qué es eso?-
Le pregunté.

-no quieres saber. Créeme.-
Dijo ella, guardando la foto de vuelta donde la encontró.

-En realidad sí.-
Le dije, rapándole la foto. Desearía no haberlo hecho.

El día que nos conocimos, mirando las estrellas.

El picnic, bailando a la luz del atardecer nuestra canción.

Cuando me ayudó a no caer en la pista de hielo.

Todos esos recuerdos del viaje a Estados Unidos juntos.

La rueda de la fortuna, cuando nos quedamos atorados.

La película y el beso en Halloween.

"COMO AMIGOS"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora