Prólogo

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Al fin llegó el día, el día en el que iba a salir de aquí, de este lugar en el que mi padre me encerró hace ocho años.
Por lo que me dijo la encargada del orfanato, y cito textualmente "A alguna familia le habrás dado pena y quieren adoptarte".
Aunque las palabras no es que fuesen muy sensibles, fue el mejor momento de mi vida. Pero hoy sería todavía mejor, solo quedan unos minutos para que mi nueva familia venga a recogerme.
-¡Olive, coge todas tus cosas, ya han llegado!- Me gritó la encargada.

-¡Voy!- Esa mujer no me había caído nunca bien, pero hoy estaban tan feliz que no me importaba nada.
Salí del edificio sin despedirme de nadie, aunque llevaba aquí mucho tiempo no había hecho amigos, porque, ¿para qué? Si total o me iba yo, o se iban ellos.
Cuando llegué a las puertas respiré fuertemente acompañada de Anne, la encargada.

-Vamos Olive, es tu hora.- Me dijo bastante sonriente, para lo que aconstumbraba.

-Vaya, se nota que está feliz de que me vaya de aquí, pero no la culpo, yo también estoy feliz de dejar de verla a usted.-Después de que Anne me mirara de una forma rara, la verdad no sé explicarlo, salimos de allí.
Y ahí estaban, los que serían mis nuevos padres.

Ahora es mi momentoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora