Ahora es mi momento

Capítulo veintitrés

-¿No piensas hablar?- Me preguntó Will sin dejar de mirar a la carretera. Yo no le contesté.- Olive, sé que estás enfadada, pero vamos dime algo.

-¿Por qué?- Le dije yo.

-¿Por qué, qué?

-Porque eres así conmigo.

-Explícate.

-A veces eres un poco cortito.- Dije yo.- Ayer, te enfadaste por lo que te dije sobre que deberíamos dejar lo que teníamos, esta noche te has puesto enfrente mía con Amy a liarte. Y vale, eso lo puedo entender porque querías darme celos, pero ¿y cuando yo he besado a Edward? ¿Por qué lo has apartado? Yo no te he apartado de esa chica.- Cogí aire para poder seguir hablando.- Y bueno, después de que mi hermano empujase al chico al que estaba besando delante de toda la fiesta, ¿te haces voluntario para traerme a casa?- Paré de hablar un momento.- Así que, ¿por qué?

-Primero. Lo he apartado como cualquier hermano mayor haría al ver a su hermanita besarse con un tío en sus narices.

-Sí, pero es que tú no eres mi hermano corriente, y mucho menos el hermano mayor. Tenemos la misma edad.

-Tú antes has dicho que sí, así que no cambies de opinión ahora, y además, si soy el mayor, meses mayor que tú. Pero además, da igual seguro que si Josh o Theo hubiesen estado ahí, también os hubiesen apartado.
Segundo. La verdad es que lo que quería es que me apartases de esa chica y la que me besases fueses tú.- Me quedé paralizada cuando dijo eso, no sabía que responderle. Él me miró directamene a los ojos y yo miré a otro lado, no quería tener contacto con sus ojos.- Y me he ofrecido voluntario para traerte porque me gusta cuidarte, además, no te iba a dejar venirte andando sola.

Nos quedamos un rato en silencio, sin saber que decir. Yo no sabía que contestarle, oh sí espera... ¿Qué tal si era un puto bipolar?
Decidí pasar de decirle eso, era mejor que mantuviésemos una "buena relación".

-Estaba Edward.- Contesté cuando estábamos llegando ya a casa.

-Preferiría que hubieses venido andando antes que con él.

-Ya. Pero yo no. Yo prefería haberme venido con él.- Dije evitando preguntarle que por qué decía esas cosas.

-¿Y explicarle que le has besado para darme celos?- Me preguntó él con una sonrisa prepotente mientras que paraba el coche delante de casa.

-¡Yo no le he besado por eso! ¡Tú no me importas lo más mínimo! ¿Lo entiendes o qué pa...- Will no me dejó que siguiese hablando. Me cogió la cara y me besó. Al principio intente que parase, pero después solo me dejé llevar. Una vez más, sí.
Me fui acercando lentamente a su asiento y acabé sentada encima de él.
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Un sonido horroroso me despertó a la mañana siguiente, abrí los ojos lentamente y me dí cuenta de que no estaba en mi cuarto. Abrí los ojos rápidamente. Y miré a mi lado. Ahí estaba él. Will. Cerré los ojos y suspiré, pero al darme cuenta de que podía haber hecho una estupidez los volví a abrir corriendo un levante las sábanas y la colcha, suspiré al ver que llevaba la ropa de anoche, todo excepto los zapatos.
Me levanté lentamente de la cama, intentando hacer el mínimo ruido, me dolía la cabeza mucho.

-¿Olive?- Me preguntó Will. Yo pegué un grito, no sabía que estaba despierto.- Oh joder, no grites, me duele la cabeza. ¿Qué haces aquí?

-Hmm... No lo sé. Me he despertado aquí.- Dije empezando a avergonzarme. De lo último que me acordaba de anoche era de entrar con Will a casa besándonos. Que idiota soy.

-Oh, está bien.- Creo que él también estaba algo avergonzado. Will avergonzado, algo nuevo para ver.

-Bueno...- No sabía que decir.- Mejor me voy a mi habitación.- Dije para avanzar hacia la puerta.

-Olive, espera.- Me giré cuando Will me llamó.- ¿Te acuerdas de algo de anoche?- Suspiré fuertemente y tiré los zapatos al suelo. Me senté junto a él en la cama.

-De nada. Bueno, sí. De lo único es de... Hmm...- No sabía como decirlo.-Cuando estábamos entrando en casa.

-Creo que después cogimos una botella de la cocina, y nos la bebimos.- Dijo levantando del suelo una botella de alcohol y que por supuesto estaba vacía.- Eso explicaría nuestro dolor de cabeza.- Empecé a reírme.- ¿De qué te ríes?- Me preguntó Will sonriendo.

-Siempre que estoy contigo hago tonterías. Eres un muy mal ejemplo a seguir.- Dije bromeando.

-Ya, claro.- Dijo a la vez que me daba con una almohada en la cara y se echaba a reír al ver mi cara de sorprendida.

-La has cagado Parker.- Dije empezando a darle a él con la almohada, y así empezamos una pelea.

-¡Will!- Llamó Sandra desde la puerta a Will.- ¿Piensas bajar a comer? Son las dos y media de la tarde, deja de dormir ya, perezoso.

-Hmm... Sí, mamá, ya voy.- Yo mientras estaba muy callada y rezando para que Sandra no abriese la puerta.

-No tardes. Voy a avisar a Olive.

-¡No! Mamá ya la aviso yo. Tú vete.- Y no escuchamos respuesta por parte de Sandra.

-Será mejor que nos cambiemos de ropa y bajemos.- Dije yo avanzando a la puerta, a lo que Will asintió

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Eran las tres y media, y me llegó un mensaje al móvil.

-¿Qué tal anoche?- Brooke.

Pensé detenidamente la respuesta.

-Bien, supongo. ¿Y vosotras?

Prefería contarle todo lo que pasó en persona.

-Yo me fui con Josh a casa. De las otras dos no sé nada. Intenté convencerlas de que tenían que irse, pero no me hicieron caso, así que las dejé. Son inaguantables borrachas.

Espera. ¿Había leído bien? ¿Se fue con Josh?

-¿Con Josh? Wow Brooke se descontrola.

-¡Idiota! Mañana hablamos sobre todo ;)

-Está bien. Yo tengo que arreglarme para esta tarde.Deseame suerte.

-Suerte!!!

Saqué la ropa del armario, y me fui al cuarto de baño para ducharme. Había tenido suerte, estaba vacío.
Me duché rápidamente, para que nadie me interrumpiese y me fui a mi cuarto para empezar a arreglarme. Quería darle buena impresión a Sandra. Así que me esperaba una larga tarde antes de poder salir de mi cuarto.