Ahora es mi momento

Capítulo tres

-Bueno, ya te dejo aquí para que deshagas las maletas y eso...- dijo Caleb al ver que yo me quedé embobada mirando la habitación.
-Oh no, no tengo ganas de deshacer ahora las maletas, soy demasiado vaga para eso. Pero Caleb, ¿podrías hacerme un favor? Es que ya sabes, todo esto es nuevo para mí.
-Sí, claro, ¿qué necesitas?
-Pues, ¿podría hacerte algunas preguntas? No sé, para conoceros mejor a todos.- Le dije dudosa.
-Supongo que sí. Bien, ¿qué necesitas saber?-Dijo él mientras que se sentaba en la cama.
- ¿Todos vosotros sois adoptados también? Sé que puede sonar un poco brusco, pero necesito saberlo ya, porque soy demasiado curiosa y...
-No, no somos adoptados, ninguno de nosotros.- Dijo interrumpiéndome.
-Oh vaya... Y bueno, ¿por qué con tantos hijos como sois, han decidido tener otra más?
- Mis padres siempre han querido tener una niña, y bueno, cuando nacieron los gemelos se dieron por vencidos, pero hará cosa de un año una amiga de mi madre adoptó un bebé y lo han estado hablando hasta que mi madre consiguió convencer a mi padre. Claro que ellos ya no querían más bebés, preferían a alguien más mayor, aunque parezca raro.- Dijo mientras empezaba a sonreír.- Pero bueno, no quiero hablar más de este tema, pregúntame otras cosas, algo más fácil
- Está bien, pues, ¿quién es el mayor de vosotros?
-Yo soy el mayor, tengo diecisiete, después va Will, que tiene dieciséis, ¿cómo tú, no?
-Sí.
-Y bueno los últimos son los gemelos que tienen quince recién cumplidos.
-Vaya, que poco os lleváis.
-Sí, bueno. ¿Alguna pregunta más?
-Tengo muchas, pero no quiero saturarte, así te diré algunas fáciles.- Dije intentando bromear. Claramente lo de bromear no era lo mío.- ¿Y Peter y Sandra, qué edad tienen?
-Mi madre tiene cuarenta y dos, y mi padre cuarenta y seis.
-¿En qué trabajan?
-Él es arquitecto y ella abogada. Aunque mi padre se pasa media vida viajando, excepto en verano que los únicos viajes que hace es con nosotros.
-Vaya...
-Bueno es mi turno, ¿cuántos años llevabas allí?
-¿Cuándo habíamos quedado en que tú también ibas a preguntarme?
-Oh vamos, te he respondido a un montón de cosas.
- Está bien, pues llevaba ocho años.
-Joder, eso es demasiado, ¿y por qué te abandonaron?
La pregunta del millón... No iba a responder a eso, aunque lo hubiese superado, aunque ya ha pasado mucho tiempo desde que pasó, todavía me sigue doliendo.
-¿Sabes? Estoy un poco cansada, necesito dormir.- Dije intentando que se fuera de la que ahora era mi habitación.
-Oh vamos, respóndeme a eso y me iré.
-No voy a responderte a eso, al menos no por ahora, te tienes que ganar mi confianza para saberlo.- Dije intentando reírme para que no notase mi incomodidez.
-Vale, está bien, me voy. Buenas noches.
-Buenas noches.
Y ahí estaba yo, en mi nueva gigante habitación, con ganas de mear, y sin saber dónde estaba el baño. Un gran aplauso para ti Olive, por qué me negaría que Caleb me enseñase toda la casa.
Intenté dormirme, pero las ganas de ir al baño aumentaban, así que decidí arriesgarme e ir en busca de un baño.
Y claro, Olive siempre tiene mala suerte, Olive nunca tendrá buen sentido de la orientación. La primera habitación en la que entro y tiene que ser del gran William Parker, ahora ya no me meaba, ahora estaba cagada, este chico me daba miedo incluso a mí.
-¿Quieres algo?- Me dijo de mala manera.
-Oh no, yo... Yo... Solo buscaba un cuarto de baño.- Y encima me ponía nerviosa.
-Bien, pues ya ves que esto no es ningún cuarto de baño ni nada, así que larga.
Hasta este momento no me había dado cuenta de que solo estaba en boxer. ¡En serio, Olive! ¡Qué inoportuna eres!
Al momento me empecé a poner muy roja, cosa que Will notó.
-¿Qué? ¿Nunca has visto a un tío en ropa interior? Ah se me olvidaba que tú no has salido de ese orfanato para niñitas.
Uf, eso ya si que no lo consentía, ¡Cómo se atrevía a hablarme así! ¡Quién se creía que era ese gilipollas! Él no sabía nada sobre mí.
-¡No te permito que hables así de mí! ¡Eres un auténtico gilipollas!- No quería fastidiarla el primer día, pero es que este chico era un completo imbécil.
-Uy la niñita se pone furiosa.
-No soy una niñita, y tengo nombre el cuál sabrías si escuchas cuando te hablan, porque te lo dije antes, cuando llegué.
-Ya bueno, yo solo escucho lo que me interesa, y tú, no me interesas. Y ahora, ¿podrías irte ya de mi habitación?
-Con mucho gusto.- Y me fui dando un gran portazo.
Genial, no llevaba aquí ni un día y ya me había peleado con uno de mis nuevos hermanos. Y lo peor no era eso, lo peor era que todavía no sabía dónde estaba el cuarto de baño, y ahora si que lo necesitaba urgentemente.

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Cameron Dallas será Will bc sksbajdbfj.
No tengo mucho más que contar.
Espero que os haya gustado, ya empieza el salseo por aquí.
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