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La tarde comenzaba a desvanecerse por completo cuando salieron del complejo Hyūga. El cielo se teñía de azul profundo con pinceladas de púrpura, y el canto lejano de las cigarras acompañaba sus pasos mientras avanzaban por los senderos de piedra que conectaban el interior de la aldea con las zonas de entrenamiento.
Caminaron en silencio durante los primeros minutos. Neji, como era habitual en él, se mantenía a un paso constante, elegante, con las manos a la espalda. Pero cada tanto giraba apenas la cabeza para asegurarse de que Asami lo seguía bien, sin prisas, sin tropiezos. Atento, aunque sin decir palabra.
Asami notó esa discreta vigilancia, pero no le molestó. De hecho, le provocó una sensación extraña -un calor leve, inesperado- que se instaló en el pecho y no se fue.
Para romper el silencio, comenzó a contarle sobre su propio equipo.
-La prueba con Kakashi-sensei fue... dura -dijo, con una media sonrisa, mirando el sendero delante de ellos-. Al principio no entendíamos nada. Sólo nos dijo que teníamos que quitarle un par de cascabeles antes del mediodía. Sonaba sencillo, pero apenas empezó, nos dimos cuenta de que no teníamos ninguna oportunidad.
Neji la miró por el rabillo del ojo, sin interrumpirla.
-Naruto intentó hacer trampa -continuó ella, conteniendo una risa breve-. Usó un kunai, intentó lanzarse de frente sin pensar. Fue un desastre. Kakashi lo derribo apenas sin mayor esfuerzo - Asami negó con la cabeza, recordando-. Por un momento de verdad creí que habíamos desaprobado.
Su voz bajó apenas, más pensativa.
-Kakashi-sensei nos dijo que no habíamos trabajado como un equipo. Que no habíamos entendido nada. Me sentí tan frustrada... estaba convencida de que se había rendido con nosotros.
Neji asintió lentamente, sin dejar de mirarla de reojo.
-Pero al final todo fue parte de la prueba -dijo ella, soltando un suspiro que era mitad alivio, mitad orgullo-. Una forma de empujarnos a colaborar, a confiar unos en otros. Nos dio otra oportunidad. Y por primera vez, sentí que alguien quería enseñarme algo más que disciplina o silencio que se escucha en casa.
