Against my dark side

Go

By: Blaine

Las escaleras se me estaban haciendo más fáciles de subir cada día. Eso me ponía extrañamente feliz.

Cuando casi llegaba a nuestro piso escuché que tocaban a la puerta y a Kurt contestando un rápido "Un momento". Algo me dijo que me detuviera antes de que entrara a su campo de visión.

Escuché como se abría la puerta y una exhalación asombrada.

-Sebastian.- dijo Kurt con un tono claramente alterado.

-Hola.-contestó alguien al que no reconocía.

-¿Qué haces aquí?

-Te necesito, Kurt. Nunca antes había estado tan conciente de esto. No tienes idea de cuánto lamento haberte perdido por alguien que no valía la pena. De verdad lo siento.- ¿su ex-esposo? La garganta comenzó a dolerme. Kurt me iba a dejar. Con lo siguiente que escuché se me vino el mundo abajo.

-Pasa, necesitamos hablar.

La puerta se cerró de un azote y sentí como mi vida se  tambaleaba con ese golpe.

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By: Kurt

-Siéntate.- dije sin siquiera mirarlo, me apoyé a la pared y crucé los brazos.

-Escucha, Kurt, sé que...

-No me importa, Sebastian. Creéme.

-Pero, Kurt...

-Basta.- susurré.- No puedes estar aquí. No te quiero aquí.

-No te hagas del rogar, sabes que me necesitas.- una carcajada seca escapó de mi garganta.

-Te equivocas. Ya no te necesito. Ya no te quiero. Y en realidad creo que nunca te amé.- sus ojos habían empezado a flamear de coraje.- Ahora sé lo que es amar a alguien y me doy cuenta de que contigo no fue amor.

-No digas tonterías, Kurt.

-No lo hago.- mi rostro formó una involuntaria sonrisa sarcástica.- Vete de aquí, por favor.- se levantó y se dirigió a la puerta.

-No has cambiado ni un poco.- dijo con acidez, saliendo y azotando la puerta.

-Tú tampoco.- contesté al vacío.

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Era cerca de la medianoche y no sabía nada de Blaine. Le había llamado y me mandaba al buzón. Si no me hubiera mandado ese mensaje de que estaba con su amigo Garth, ya estaría volteando el mundo para encontrarle.

Había algo en todo esto que me dejaba un mal sabor de boca. Él sabía de nuestra cena, y me había dejado plantado. Algo tuvo que haber pasado.

Me senté en el sillón dispuesto a esperarlo, sacando el pequeño anillo plateado del bolsillo de mi camisa.