Me descubrieron...

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Scott

Ese era el día más importante para él, era sábado, iba a ir a la casa de Alistair, faltaban un par de horas, apenas había salido de la bañera, su hermana estaba en su habitación, aún en toalla, la tomo de un brazo y la saco del cuarto cerrándole la puerta en la cara, su habitación era algo amplia, tenía una cama tipo litera, ya que estaba montada en lo alto de unas enormes patas, las paredes estaban pintadas de azul, sin embargo, si alguien entraba a su habitación, no sabría el color de las paredes ya que están repletas de posters de Taylor Swift. Una vez vestido, Scott bajó a la cocina, donde se encontró a su padre tomando un jugo, Scott ni le dirigió la vista, ¿Para qué hacerlo? De cualquier modo, no quería establecer ni la más mínima conversación con él. Scott lo rodeo y tomó otro jugo del refrigerador, luego subió a su habitación y se dispuso a revisar algunas notificaciones.

Alison

Sus padres habían salido por cuestiones laborales, ella estaba sola en casa, prendió la lap top y vio que habían unas tres notificaciones en Instagram, probablemente eran seguidores nuevos, pero no, era una foto que había subido su vecino Alistair, parecían unas palomitas, o algo así, cerró la lap, y se fue a cambiar, quería ir a ver que planeaba Alistair.

Dan

—¡No quiero! ¡No voy a cambiar, yo soy y seré así hasta que me canse! —Dan le gritaba a su padre, no lo había visto desde hace dos meses, quería llevarse bien con él, pero, su padre no lo soportaba.

—¡No seas idiota! — ¡Slap! Su padre había golpeado la mejilla de Dan, él se quedó en shock, su madre dió un grito de miedo, Dan se tocó la mejilla, y rosó su labio, estaba sangrando —Danielle, lo siento, no quería hacer eso...

—Yo tampoco quería que lo hicieras.

Dan subió corriendo a su habitación, tomo unos tenis, como pudo se los puso, metió unos pantalones, una sudadera y una camiseta a una mochila, bajó corriendo la escalera, sus padres le preguntaron a donde iba, no respondió y siguió corriendo a la cochera, tomó su bicicleta y se montó en ella, no tenía lugar a donde ir, tampoco dinero, pero no quería estar en la casa de sus padres. Entonces, se acordó de su primo Alistair, cambió de dirección hacía su casa.

Alistair

Alguien tocó la puerta, Alistair emocionado abrió la puerta, allí estaba Scott, ajustandose la coleta, lo saludó, Scott levantó la vista, lo que ocasionó que Alistair se sonrojara cuando le dedicó esa mirada tímida, Alistair le indicó que pasará.

—Alistair, tienes una linda casa... Oh, casi lo olvidaba. —Scott se sacó la mochila y buscó algo dentro de ella, cuando por fin encontró lo que estaba buscando, lo sacó, era un paquete de papas fritas, en un paquete morado, lo que le indicó a Alistair que eran picosas.

—Gracias Scott, no te hubieras molestado.

Al rato, ellos ya estaban jugando Just Dance en un paso difícil de baile, Scott tropezó contra Alistair, ocasionando que ambos cayeran al suelo, ambos rieron un rato, sus risas se fueron apagando, y el ambiente tomó un tema romántico, ambos se miraban, Alistair principalmente los labios de Scott, él se fue acercando poco a poco a Scott... Ding, dong! alguien llamaba a la puerta, Alistair se levantó del suelo y abrió la puerta, ¿Enserio? ¿Tenía que venir ella?

Alison

—Hola Alistair —Dijo Alison en tono coqueto cuando él abrió la puerta. —Estaba pasando por aquí y pues, no sé, simplemente se me dio por ver como estabas.

—Ah, hola, llegas en buen momento, vino un amigo. Por favor, pasa. —Alistair la dirigió a la sala de estar, allí estaba el amigo de Dan.

—Hola Scott, ¿Cierto?

—¿Alison? Qué mundo tan pequeño.

—Demasiado diria yo... ¿Dónde está Dan?

—¿Quién es Dan?— Interrumpió Alistair, volteando a ver a Scott.

—Dan es un estudiante del colegio. —Le contestó Alison

Ding Dong!

Dan

Por fin llegó a la casa de su primo, allí estaba él, con su enorme sonrisa.

—¿Danielle? ¿Qué haces aquí? —Preguntó algo desorientado.

—Oh, cierto. Mi padre, lo de siempre, ¿Me dejas quedarme solo esta noche?

—Claro, puedes quedarte lo que quieras.

—Gracias Alistair.

—Pásate, llegaron unos amigos, deja presentártelos. —Él asintió y siguió a Alistair hacía la cocina. —Chicos, ella es Danielle mi primo. —Eran Alison y Scot...

—¿¡Primo!?

Continuara...


El Rastro de su SonrisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora