Mamá, no voy a llegar a dormir

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Dan

—¿Mamá? —Gritó Dan mientras entraba a la casa y cerraba la puerta tras él.

—¿Danny? ¿Ya llegaste? Estoy en la cocina. —Dan dejó la mochila en el primer sillón que encontró y fue directo a la cocina para saludar a la madre, quien preparaba pollo a la mostaza o algo parecido.

—¿Ya fuiste a saludar a los nuevos? —Preguntó Dan mientras abría la puerta de la alacena y buscaba algo para comer.

—¿Los de enfrente? Sí, son gente muy amable, tienen un hijo de tu edad: su nombre es...

—Mark. —Terminó la frase Dan, y abrió un frasco de Nutella. —Va a historia conmigo, está ancho de hombros y tiene un rostro muy peculiar... Por cierto, vendrá más al rato, ¿Está bien?

—Sí, está bien. Me alegra que te juntes con los nuevos, a veces las personas necesitamos a alguien para no sentirnos solos. —Concluyó la madre y le robó un poco de Nutella al hijo.

Su hermana no llegó a la hora de comer, ni mucho menos su padre. Cuando Dan terminó todo lo de su plato: se levantó y lo llevó junto a los demás trastes sucios. Subió a su habitación e hizo su tarea de español; que consistía en hacer un enlistado de nexos.

Estaba aburrido y agotado, al menos había conseguido lo que quería: Alguien para la bienvenida. ¿Qué tenía que hacer? ¿Ir a presentarse con sus padres y luego llevarla al baile? ¿O simplemente verla en él? Esto no era una película estadounidense, las cosas no salían perfectas todo el tiempo.

"Ding-dong" Alguien tocaba a la puerta y de seguro era Mark. Él salió de su habitación y se dirigió a la puerta principal de la casa. Ahí estaba él con unos jeans gastados y una camiseta de Kingdom Hearts. Se notaba que era un amante de los videojuegos. A Dan también le gustaba jugar videojuegos, en especial, La Leyenda de Zelda, era amante de ese videojuego, su tío lo había enseñado a jugar ese cuando Dan aún solo era un niño de unos cinco años.

Mark

Dan lo saludó y le indicó que pasará, luego se lo presentó a su madre, quien se quedó encantada con la gentileza del chico. Luego subieron a la habitación de Dan. Su habitación tenía dos ventanales grandes que te daban vista al patio trasero, estaban cerradas las cortinas. Tenía un escritorio para computadora repleto de libros, comics desgastados y uno que otro Post-it con una frase poética en el escritorio. El computador se veía del año antepasado, conectada en ella había una Xbox 360, por eso lo había hecho subir a la habitación. Tenía un closet alto, hecho de madera. Su cama tenía un diseño de Inglaterra, la bandera tenía un efecto desgastado. Había una repisa azul encima de ella, donde habían unos figurines de Zelda y unos de superhéroes de Marvel, también había un BMO de Hora de Aventura. Las paredes estaban invadidas de posters de todo tipo: Unos de anime, otros de artistas, algunos de superhéroes y por mayoría: de Zelda. La luz de la habitación era de color verde, rojo y azul, que daban vueltas formando círculos y puntos que rodeaban la habitación por completo.

—Bonita habitación, en especial por las luces. —Dijo Mark señalando el foquillo.

—¿Verdad que sí? No fue nada fácil conseguirlas. —Sonrió y se agacho para encender la Xbox 360. —Apuesto a que sabes jugar, ¿cierto?

—Claro. —Él apuntaba a su camisa, pues era de Kingdom Hearts, luego tomó los controles de la 360 y le tendió uno.

Se sentaron en el borde de la cama, jugaron Lego: Indiana Jones, si, sonara aniñado pero es un juego demasiado divertido y se requiere de mucho trabajo en equipo.

Scott

Ya pasaban de las cuatro, ahora él estaba en el centro comercial con Alistair, comían helado, cuando la exnovia de Scott se acercaba muy sonriente a ellos. ¿Qué hacía ella allí? ¿Le estaban jugando una broma? Se acercó a Alistair mirándolo muy sonriente jugando con su cabello. "Smuak" un enorme beso fue plantado en los labios de Alistair por esa chica.

—Ali, ¿Quién es tú amigo? —Para el colmo, ni lo recordaba.

—Él es Scott... —Su voz tenía un tono nervioso, tal vez se había dado cuenta de lo que pasaba.

—Scott... —Ella se daba golpecitos con el índice en el labio con aire pensativo. — ¡Eres el chico que estaba en segundo! Salimos por un tiempo.

—Un gusto en volverte a ver. —Mintió. —Me tengo que ir.

Salió corriendo, dejando a Alistair y a ella en chock. Ahora era lo que menos importaba, las lágrimas resbalaban por sus mejillas cayendo al suelo, no quería llegar a casa así, su padre le diría maricón por llorar gracias a una tonta chica, no valía la pena llorar por alguien así, no lloraba por los recuerdos, si no por el presente: Su mejor amigo salía con su ex novia, era lo peor que le podía ocurrir en la vida, las chicas son engañosas, siempre te apuñalan por la espalda cuando menos te lo esperas.

Salió del centro comercial sin mirar atrás, detuvo un taxi amarillo, parecía que era un Tsuru. Estaba a punto de abordarlo cuando alguien lo tomó por el codo.

—Scott, lo siento. No sabía que habían tenido una relación. —La voz de Alistair sonaba preocupada, con arrepentimiento y suave.

—Ni te molestes en hablarme, ni mucho menos me toques.

Se zafó de su agarre y se metió en el auto. Le dijo al conductor la calle en la que vivía Dan. Luego tomó el teléfono y marcó el número de su amigo.

—¿Scott? ¿Qué pasó? ¿Estás llorando?

—Dan, ¿Me puedo quedar en tu casa, solo por hoy?

—¿Bromeas? ¡Ni lo preguntes! Por supuesto que sí.

—Gracias Dan.

Colgó y le mando un mensaje de texto a su madre, sin esperar preguntas o respuestas. "Mamá, no voy a llegar a dormir."

Llegó a la casa de Dan, él estaba en la puerta recargado, cuando se dio cuenta de que estaba allí, salió corriendo a su encuentro, lo abrazó y le susurró suavemente:

—¿Estás bien?

—No lo sé... —Estaba a punto de derramar otra vez su llanto.

—Tranquilo, no pasa nada, aquí estoy...

Lo pasó a la casa, Scott saludó a la madre y le agradeció que lo dejara quedarse, prometió no ser una molestia. La madre de Dan era muy amable, le dirigió una sonrisa y le dijo que no sería para nada una molestia.

Allí se quedó la noche platicándole a Dan lo que había pasado esa tarde.

Alison

Estaba en el celular hablando con Angie y Valery en un grupo de WhatsApp, el plan había comenzado esa tarde, iba a portarse de la peor manera, y si eso incluía a ella, lo haría de cualquier modo.

"¿Cómo me veo con esta blusa?" Mando un mensaje Angie, adjuntando una imagen.

"¡Súper guay!" Respondió Valery.

"¡Ja! ¿Bromeas? Te ves horrible Angie" Contestó Alison.

"¿¡Qué es lo que te sucede Alison!?" Mandó un audio Valery muy enojada.

"Es la verdad." Tecleó Alison.

Después de tanta pelea, ella se salió del grupo y bloqueó a ambas chicas. Su plan apenas comenzaba, y estaba muy avanzado. El siguiente paso era muy sencillo, la mañana siguiente iría vestida como toda una chica mala: de negro.

Alistair

¿Qué había hecho? Una tontería total, por culpa de esa chica que ni siquiera era su novia, sino una de sus amiguitas había perdido a su amigo Scott, era hora de prometerse que no iba a salir con más chicas así, incluso ninguna. Se dirigía a su casa, solo, le había dicho a la chica que se había terminado. Se sentía tan triste y repugnante de haber hecho semejante tontería que le iba a costar la felicidad. Scott era o único que lo mantenía feliz.



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⏰ Última actualización: Sep 18, 2016 ⏰

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