15-¿Puedes irte?

1.6K 123 15
                                    

Jesús.

He venido a verla. No sé que hago aquí, ni por qué, solo se que yo necesito verla.
No le he contado a nadie que voy a venir. Únicamente porque soy un capullo, y no me merezco estar aquí.
Soy un cabrón.
Y jamás dejaré de repetirlo. Porque es así.
No vine a verla cuando más me necesitaba. No estuve a su lado intentado callar las voces que Dani me contó que tenía. No vine a decirla que lo siento, que Aitana no es ni la mitad de lo que ella es.
Que me he equivocado, que yo le he hecho todo esto.
Pero la quiero.
-Puedes pasar tú primero.
+¿Cómo? ¿Qué haces aquí? -me giré y vi la de mi gemelo-.
-Necesito verla. Es la única amiga que me queda cuando Mery se marcha. Supongo que no te has enterado, pero está cuidando niños.
Soy una mierda de hermano. -pensé-.
Joder, todo este tiempo sin Almu ha hecho que me vuelva a convertir en el cabrón que era.
Ni siquiera paso por casa, y cuando paso, no hablo con nadie.
Espero y espero, pensando que un día el teléfono sonará y será Almu desde la otra la otra línea, diciendome que esta bien. Que me necesita, y que todo entre nosotros, está bien.
Pero no es así.
+Lo siento.
-Mira tío, -me puso la mano en el hombro- eres un capullo. Pero sé que la necesitas. Asique entiendo que estés así. Pero no lo comparto, ¿vale?. Los demás no tenemos la culpa de que ella esté así. Y sin embargo, lo pagas con nosotros. Mamá no entiende nada, papá intenta buscar soluciones, y yo... Tío, yo te veo así, y me duele. Pero, ¿sabes quien sale peor de todo esto?. Tú. -me dió un golpe en el pecho-. Te engañas. Piensas que con Ana -movió los brazos por el aire- el vacío que esa chica -señaló la habitación- te está dejando, vas a conseguir olvidarla. Pero no es así. Y lo sabes. Joder, -se giró frustrado y dio un golpe en la pared- no vuelvas a ser el mismo cabrón que siempre jode todo y a todos, porque te odias a ti mismo.
No supe que responder. Asique me giré, y entré en la habitación de Almu.
+Hola, cariño -comencé a llorar-. He venido a verte. -le cogí su fría mano-. Necesito que despiertes. ¿Sabes?. Solo he venido a decirte eso. Que necesito que despiertes. Necesito saber si quieres que me quede a tu lado después de todo o quieres que me marche de tu vida para siempre. Entenderé las dos opciones, pero por favor, dime una. -me tumbé a su lado-. Y pronto. Por favor -susurré- pronto.
+No sé lo que quiero -dijo con dificultad-.

Paciente [Jesús Oviedo]. Segunda temporada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora