Trabajo

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- Bueno, mejor te lo enseño - me dijo Yami.

- ¿Crees que me dejarían trabajar? - No podía quedarme en su casa sin hacer nada, tenía que ayudarla y para eso necesitaba un trabajo

- Claro, aparte una de mis compañeras es Kuro, si se lo pedimos a lo mejor te deja trabajar ya que eres muy bueno con la cocina -

- Vivir solo te obliga a aprender sobre cocina - los dos reímos.

Narra Yami

- Que emoción, voy a poder trabajar con Aoi - me puse muy contenta.

No estaba muy lejos así que llegamos rápido - Mira Aoi, ahí es -

Narra Aoi

Pudimos ver una cafetería muy mona llamada "half st∆r" (media estrella), tenía dos estatuas de gatos a los lados de la entrada.

- ¿Hola? ¿Kuro? - dijo Yami.

- ¿Yami? ¿No te habías cogido el día libre? - respondió Kuro dejando una bandeja de dulces en la mesa de unos clientes.

- Si, pero Aoi quiere trabajar y le íbamos a preguntar a la gerente si le deja trabajar en la cocina -

- Entiendo, pero sabes que la gerente no deja trabajar a cualquiera -

- Ya... - dijo apenada - Pero tu nos ayudarás -

Kuro empezó a reírse - No se como lo haces pero siempre consigues lo que quieres - y las dos rieron.

Es muy bonito verlas divertirse así, debe ser precioso tener tan buenos amigos... Al contrario... Yo no me relaciono mucho por lo que no tengo amigos.
Por ese motivo no tuve dudas para irme de la tierra.

Llegamos a una puerta al fondo del pasillo donde había un cartel que ponía "Despacho del gerente".

Al entrar solo vimos a una niña en el suelo pintando flores y animales.
Empezó a mirarme fijamente y se levantó.

- Asuuuul - dijo tirando de mi pantalón como si quisiera que la cogiera en brazos.

La acaricie y la cogí en brazos.

- ¿Como te llamas guapa? - la niña respondió.

- Cha -

- ¿Cha? ¿Charlot? -

- No, tu cha -

- ¿Dices que yo me llamo cha? - no entendía lo que quería decir.

Ella negó con la cabeza y saltó de mis brazos - ¡Oye! No hagas eso, te vas a hacer daño - dije preocupado.

- ¿Con que un peligro? - dijo una voz diferente.

- ¡Gerente! - dijeron Kuro y Yami.

Una mujer adulta salió de una puerta que había detrás del escritorio.

- Ai, ven - dijo la gerente.

- Mami, el tene cha -

La gerente empezó a mirarme seria por un rato hasta que habló - Bueno, supongo que no habéis venido de visita ¿En que puedo ayudaros? - dijo dirigiendo su mirada hacia Kuro y Yami.

- Si - dijo Yami - Este es Aoi, mi amigo de la infancia - me señaló - Nos gustaría que le dejara trabajar como cocinero -

La gerente me miró fijamente
- Primero tengo que evaluar sus habilidades -

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