Correctamente Distintos

Capítulo 26

Decido no decirle a nadie que ayudaré a Zayn a estudiar y solo le digo a mi mamá que me quedaré los lunes hasta más tarde para ayudar a algunos alumnos más atrasados a estudiar, se ve orgullosa pero no estoy segura si lo estaría al saber que salí con Zayn anoche...
-¡Oye! –grito molesta y me volteo para ver quien fue la que me dio un enorme remache en la espalda, solo estábamos peloteando pero no logro saber quien es- ¡Tengan cuidado por favor! –digo molesta.-

Ahora practico con Leisha y descubro que no es tan mala como pensaba, sólo le falta tener más fuerza y por eso le remacho con fuerza, para que logre ser más ruda al jugar...
-Ya basta –dice malhumorada- ¿por qué eres tan cruel?.-
- Vamos, tienes buena recepción pero necesitas más fuerza.-
- Me duelen los brazos –se queja y se sienta en el piso.-
- Vamos Leisha, puedes ser de las mejores si solo te esfuerzas un poco más.-
- No quiero seguir esforzándome –se recuesta en el piso.-
- ¡Leisha! –le grita Lorena enojada- te iba a poner de titular pero olvídalo, con suerte vas a tocar la pelota una vez por juego con ese espíritu.-
- Ya Lorena, todos tenemos días malos –le digo- Leisha es buena, déjala –la levanto del piso- además es hora de irnos, estamos cansadas. Adiós.-

Fui a cambiarme de ropa y luego a buscar mis cosas para irme, subí al auto y me fui a casa con mamá.
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-Waliyha –digo- ¿comenzaron con raíces otra vez? –le pregunto al leer su cuaderno.-
- Oh si –dice- lo había olvidado.-
- ¿Cómo eres con las raíces?.-
- ¿Estaría mal si digo que apesto como mula en raíces? –pregunta.-
- Ya, ya, tranquila.-

Mis clases con Waliyha habían cambiado un poco, ya no era solo explicarle y muchos números, también conversábamos un poco, ella es una chica muy interesante y para ser tan joven sabe mucho sobre el Mundo, me refiero a como son las personas. Me sorprendió cuando me dijo que una chica de su clase estaba embarazada y no pude evitar imaginármela a ella en esa situación, no lo creo posible, demasiado pequeña...
-Bien, creo que ya entendí estos ejercicios mezclados –dijo Waliyha- aunque me sigo confundiendo –escuchamos un fuerte portazo, Zayn había llegado- ¿algún día dejará de cerrar esa puerta así? –preguntó molesta.-
- Quien sabe –digo y me mira sonriendo.-
- ¿Por qué la otra vez mi hermano "te pidió prestada"? –hizo comillas con sus dedos- ¡Lo sabías! Se gustan –la miro alarmada.-
- No, no, no, nada de eso, claro que no.-
- Entonces... ¿por qué se quedaron hablando?.-
- Porque le molestó que estuviera hurgando en su habitación –contesto.-
- ¿Y por qué hurgabas en su habitación?.-
- Porque soy una curiosa y una metiche, no aprendas eso de mi.-
- ¿Segura que es solo eso?.-
- Si –respondo.-
- Está bien.-

Termino la clase con Waliyha y mi mamá me pasó a buscar, pero en ningún momento me encontré con Zayn y de verdad esperé que el bajaría a saludarme al menos pero no lo hizo. ¿Debería sentirme dolida o solo debería aceptar la extraña forma de ser de él?
-Hola cariño –dijo mi papá cuando salí de casa y me abrazó, sabía perfectamente que el no iba a entrar.-
- Hola. ¿Cómo estás?.-
- Mmm... bien ¿y tú? –caminamos hacia su auto y subimos, veo la casa unos segundos y puedo jurar que vi a mi mamá asomarse por la ventana.-
- Bien –conduce tranquilo.-
- Escuché de una buena cafetería, creo que sería bueno comer algo dulce –sonríe- ¿qué dices?.-
- Suena genial.-
- ¿Cómo ha estado todo? –pregunta.-
- Bien –lo miro y siento que cada vez estamos más lejos- en un par de semanas iré a un campeonato o algo así de voleibol, me gustaría que fueras.-
- Claro que iré, amo verte jugar. Me recuerda cuando yo entrenaba –sonrío.-
- Lo sé, cuando estabas en todos los deportes que había en tu escuela.-
- ¡era genial! –dijo.-
- Estoy segura –se estacionó y bajamo.-

Pedí un pie de limón con un café al igual que papá, los dos amamos el pie de limón...
-Iba a preguntarte sobre tus notas –dice de pronto- pero estoy seguro que no debo preocuparme por eso.-
- Nop –sonrío- ahora estoy ayudando a varias personas a estudiar –digo sin especificar.-
- Eso es bueno, es bueno tener habilidades pero es mejor aun compartirlas.-
- Así es.-
- Mmm... este pie está delicioso pero no tanto como el que hace... -pero se calla, se que diría que es mi mamá, ella hace el mejor pie de limón del Mundo pero papá no la menciona y solo deja que el silencio avance.-
- ¿Vas a venir la semana que viene? –pregunto.-
- Creo que este ritmo que llevamos está bien –dice- digo, semana por medio, ahora estoy teniendo mucho trabajo.-
- Oh, está bien –hago una mueca, sé que esa era la respuesta pero aun así me decepciona un poco.-
- Pero disfrutaremos los días que venga a verte, incluso estaba pensando en que fueras unos días para allá.-
- Mmm... si.-
- Si esque quieres claro.-
- Si, está bien.-