Su hermano la miró de arriba a abajo.
"Parece que te he despertado" sonriendo la volvió a apretar contra su pecho.
"Oh, sí. Estábamos durmiendo" fue a la cocina a preparar el desayuno.
"¿Estábamos?" inquiere él, cruzándose de brazos.
Elías apareció en el momento justo.
"Andy, yo..." y se quedó petrificado al ver a Gerónimo.
"¿Y este imbécil?" preguntó alzando una rubia ceja.
"Nada de imbécil. Serás vos" contraatacó Elías. Miró a Andrea "Me tengo que ir, nos vemos"
Y dejó una sombra incesante en su ida.
"Me vas a explicar ¿no?" giró su hermano.
"Basta, Gero, ¿viniste a visitarme o a discutir? Ya no tengo dieciséis"
Colocó dos tazas sobre la mesa.