El frío se colaba entre los espacios vacíos de su chaqueta.
Tiritó, acomodó su bufanda y cambió de página.
Los autos volaban en la calle y sólo tenía una visión distorsionada de ellos.
La gente caminaba sin darse cuenta de nada, en un mundo aparte.
"¿Qué lees?", preguntó un extraño chico de ojos grises interrumpiendo su lectura. Sacó sus audífonos, despeinando sus rulos, y los dejó colgar en su cuello.
Ella se quedó perpleja, y sólo le mostró la tapa del libro.
"Atrapado en un sueño, Anna Jansson", susurró para sí. "¡Me fascina!"
No sabía que responder y sólo contestó en voz baja "A mí también"...
Aquel chico le siguió sacando temas de conversación, hasta que llegó su colectivo, su ida.
Él se volteó"¿Cuál es tu nombre?"
"Andrea" respondió con timidez.
Sonrió mostrando los dientes.
Las puertas se cerraron y el colectivo desapareció de su vista.
No le había preguntado su nombre.
Volvió a su aburrida vida solitaria.
Probablemente nunca más lo volvería a ver.
