Abrió sus ojos cansado y a la vez satisfecho, se sentía realmente diferente, como si todo pesara pero a la vez estuviese tan ligero que volar fuese una tarea sencilla.
No encontró a la chica en la cama, después no la encontró en toda la habitación. Un poco adolorido se pone de pie y se da su tiempo para estirarse.
Tal vez ella ya se fue, tal vez Danniel tenía cosas más importantes que hacer.
Camina tranquilamente fuera de la habitación y la encuentra sentada en el sofá, con sus piernas cruzadas y una mirada sin ningún punto en específico.
-¿Estas bien?- es lo primero que le pregunta Guren.
Danniel le mira unos instantes mientras sonríe.
-Si ¿Tú lo estás?
-Sí, estoy bien.
¿Qué pasaría si esto seguía? ¿Qué pasaría si Guren quisiera besarla cuando ambos estén en público? Probablemente Kureto se enteraría, probablemente todos se enterarían. Yuichiro haría el intento de hermano celoso y lo complicaría todo, Kureto lo golpearía y Shinya se reiría.
-Me gustaría saber que pasara ahora en adelante- dijo ella, levantándose y caminando con gracia por toda la habitación, no es como si lo estuviese haciendo a propósito, en realidad ella caminaba así con mucha frecuencia.
-Tal vez deberíamos ducharnos e ir a desayunar.- le contestó un poco indiferente.
-¿Qué es lo que somos ahora?- preguntó de repente- Me refiero... En aquellos libros que leí y lo poco que se sobre el tema, después de esas demostraciones de afectos y el compartir saliva no lo hacen los amigos. Además de que recalcaste anoche que ya no querías ser mi amigo.
Era ahora o nunca, Guren tenía que elegir si ser egoísta por un tiempo y quedarse con la chica, reclamarla como suya o rechazarla y acostumbrarse a su odio desde ahora.
Guren Ichinose quiere a Danniel, la quiere para él, para su cama, para sus brazos, para sus labios, para escuchar palabras espontaneas, la quiere en sencillas palabras que ya no puede negar pero sabe muy bien que tarde o temprano Danniel lo odiara al igual que Yuichiro.
-No creo que debas tomarte todo lo que pasó anoche en serio- le comenzó diciendo- Veras, besarte era algo que quise hacer desde hace un tiempo y aproveche la oportunidad de anoche. Me deje llevar un poco y estaba muy adolorido, quería una distracción y tú fuiste muy perfecta para eso.
El rostro de la chica no cambia su expresión neutra pero Guren nota sus puños haciéndose y cerrándose de una manera estrepitosa.
-Entonces, todo lo que me dijiste anoche no fue verdad- dice más para sí misma- Creí que te importaba algo más que nuestra amistad, algo un poco más profundo.
-Espera... ¿No lo entendiste? ¿No entendiste que son las amigas especiales?- le preguntó sarcástico, con sorna y despreocupación.
A Guren le dolía bastante decir aquello pero sabía que poco a poco también estaba rompiendo el corazón de Danniel.
El Teniente Coronel espero una reacción un poco más viva de Danniel, algo como un grito, algo como "Eres un idiota, no volveré a verte jamás" o al menos una bofetada por actuar tan voluble y desinteresado en los demás.
Efectivamente, la chica se acercó, levantó su mano derecha pero solo alcanzó a dejarla caer en el hombro de Guren.
-Supongo que eso no me lo vi venir.- le dice Danniel con sus ojos vacíos.
ESTÁS LEYENDO
Owari no Seraph. "La tercera Hyakuya"
Fanfiction"Sonrisa misteriosa y coqueta, pero me sigue pareciendo un hombre muy extraño" Fue como describió la tierna, inocente y dulce Danniel Hyakuya cuando vio en persona al Teniente Coronel Guren Ichinose. Como un animal, fue puesta en cautiverio por casi...
